Por Jorge López Novales.
Un descubrimiento agradable, toda una sorpresa, me he llevado con el segundo trabajo de la banda valencia, creada en 2015, Litost.
Litost es un término, un palabro en checo, que no existe en ningún otro idioma, creado por el filósofo Milan Kundera. El litost es un estado de padecimiento que surge, cuando visualizamos, y sale a la luz, nuestra propia misera y la comparamos con la de otros.
La banda practica un metal extremo. Así es como se etiquetan. Con una definición de su sonido, tan genérica, abarcamos casi todo, la verdad. Y es que, desde que suena la primera nota de este “Pathost”, sientes que te enfrentas a algo único.
Si uno juega al prejuicio con una foto de la formación banda, piensas que vas a afrontar la enésima propuesta post (con sus infinitas acepciones). No necesitan una imagen artificial, recargada; incluso su portada muestra sobriedad (obra de Pablo Ruiz Valls). Su sonido ya lo dice todo de ellos.
Pero, ¿a qué suenan? Es complicado. Me gustaría pensar que Litost parten de una base black metal que destila crudeza, con una buena dosis de death metal, sobre la que van metiendo elementos muy técnicos (incluso llegan a darle un aire progresivo), alguna orquestación- sin abuso- para recrear alguna atmósfera oscura (ese aire oriental que dan a “Barján de Céfiro”) de gran belleza y unos potentes pasajes instrumentales. Les gusta jugar con el contraste. Todo ello, en poco más de treinta minutos en ocho cortes que rara vez llegan a los seis minutos.
Tienen un sonido muy limpio, en que se aprecia por separado todos los instrumentos; una interpretación impecable (mi mente me llevo a evocar a unos Trallery más extremos, todavía, en cuanto arrancó “Tromba” con un tapping de Manri que te descoloca); y letras en castellano con una voz ajena al gutural e imbuida por gritos desgarradores. No se han matado con el nombre de los temas que conforman este “Pathost”, pero da igual.
“Pathost” invita a ser explorado una y otra vez.
Este trabajo ha tenido su premio: ha sido una de las bandas ganadores del Band Contest del Resurrection Fest.
Si uno entra en las redes sociales de Litost, se observa la gran cantidad de reseñas positivas (nacionales e internacionales) que han obtenido. Así se puede ver que han sabido mover su último trabajo bajo el amparo de BLOOD FIRE DEATH Music Promotion & Management.
Este recomendable “Pathos” ha visto la luz el pasado 17 de marzo.
Tracklist
1. Tromba
2. Espectro
3. Vigilante del abismo
4. Emboscada
5. Simún
6. Barján de Céfiro
7. Vendaval
8. Galerna
© Diario de un Metalhead 2023.
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