viernes, 13 de marzo de 2020

KNIGHTS OF BLOOD: El Lado Oculto (Duque Producciones, 2020).


Por Larry Runner.

Sonidos japoneses nos reciben en “El Lado Oculto”, nuevo álbum de KNIGHTS OF BLOOD grabado en Asturias. Sí, hasta los Sanctuarium de Alberto Rionda se desplazó este quinteto granadino para inmortalizar diez canciones que se abren con la citada intro que lleva por título “Estigmas del condenado”. 
sin
La introducción viene relacionada con el concepto en el que se basa “El Lado Oculto”: “Omote, se refiere a la imagen que la persona quiere demostrar al mundo. Una imagen "positiva" a la vez fría sin emoción. Por su parte Ura es la versión más real y natural de sí mismo. Ura suele estar escondido por Omote y cuando es expuesto causa grandes daños y vergüenza al revelar la irrealidad de Omote...” nos cuentan.

Curioso el concepto basado en la cultura japonesa. Y es que  KNIGHTS OF BLOOD es una banda de heavy metal, como decía, andaluza. La conforman Mireia a la voz, Jose y Javi a las guitarras, Alex al bajo y Kyle a la batería. Este es su tercer disco, segundo largo, tras haber editado el EP debut “Revolución” en 2017 y al año siguiente publicar “Falsa Realidad”, su primer LP.

Tras tirarse a la carretera a curtirse girando con King Company, en septiembre se meten con Alberto Rionda en el estudio y el fruto del trabajo está ahora en mis manos tras ser lanzado el pasado 14 de febrero. 

“El Lado Oculto” se mueve a través de tonos graves sobre los que resalta con mucha fuerza, quizás demasiada para mi gusto, la aguda voz de Mireia que contra lo que es tendencia hoy en día, canta en castellano. Así lo hace a pesar de que el grupo lleve el nombre en inglés, algo que sucede con otros muchos grupos españoles, por supuesto. En ese sentido no necesito viajar mucho para verlo, las dos  referencias de Asturias, Avalanch y Warcry así lo hicieron antes.


Es un disco sin demasiados aditivos. Suena crudo, bastante creíble, muy exportable al directo y me gusta que no le hayan metido demasiadas florituras de estudio que luego no son mantenidas en directo. Eso hace que cuando los vayas a ver en vivo no te defrauden, todo suena como muy honesto, muy directo. 

Quizás buscando esa honestidad y ese sonido real y poco adornado han dejado la voz de Mireia casi sin capas. Acostumbrados hoy en día a las voces creadas a base de pistas y pistas, esas que hacen que escuches a un solista que busca con ese recurso encontrar fuerza y brillantez, KNIGHTS OF BLOOD apenas tiran de la "trampa". Sólo en momentos muy concretos te encuentras a la voz realmente arropada, pero jamás sin abusos.

Tiran de tonos graves en todo momento, lo cual dota al álbum de un tono bastante oscuro, y lo que ofrecen no es otra cosa que heavy metal que probablemente llegue bien a los amantes del heavy en castellano de toda la vida. 

Sin duda alguna lo que más me gusta del álbum son las guitarras, auténticas protagonistas del sonido del grupo, con rítmicas contundentes en todo momento, intensas, que luego se ven aderezadas por buenos solos como en “Promesas Vacías” o “Vuela” por citar algunas donde creo que se lucen en esa tarea.

El álbum transcurre sin sorpresas en la primera parte del disco, con una línea melódica común a todos los temas, aunque alguna excepción encontramos que evita la linearidad en la segunda mitad del trabajo. De ellas os hablaré un poco.

“En Tu Memoria” es la primera de las que rompe la cuerda. Una balada de tono acústico lo cual le da un ambiente bastante pop que al final se difumina gracias a la entrada de la guitarra eléctrica en el solo.

“La Era de Hielo”, es otra de las que destaca. Tira de un riff tan simple como efectivo y tiene un tono épico que la hace distinta a la mayoría de las canciones de este “El Lado Oculto”. “Sed de Otros”, lleva un tono también muy heavy tradicional que quizás la convierta también en algo especial. “Triste Condena” cierra el disco de una forma también un tanto especial, llevando su duración más allá de los seis minutos y medio -la más larga del disco- contundente, también muy épica y con la aparición de voces masculinas dando la réplica a Mireia. Un buen colofón.


El álbum me gusta mucho más desde el séptimo corte en adelante. Hasta entonces lo estaba encontrando demasiado lineal, todo me sonaba como muy igual y no me estaba agradando demasiado, pero a partir de la balada el disco se hace, en mi opinión, más variado y divertido. No está nada mal.

El tiempo dirá si estos granadinos, que llevan una fulgurante carrera con tres discos en poco más de tres años, se hacen un hueco serio en la cada vez más pobre escena del heavy en español a la que no acaban de llegar bandas a la altura de las que conocimos a finales de los 90 y principios de los 2000, la última generación brillante de verdad. El trono sigue vacante.

La portada y el artwork del álbum han sido realizados por Gustavo Sazes, y la fotografía por Nat Enemede. Me encanta la preciosa edición en digipack que han sacado.

Tracklisting:
01 Estigma del condenado
02 El Lado Oculto
03 Promesas Vacías
04 Ojos que Gritan
05 Vuela.
06 Crematomanía
07 En Tu Memoria
08 La Cuenta Atrás
09 La Era de Hielo
10 Sed de Otros
11 Triste Condena



© Diario de un Metalhead 2020.

No hay comentarios: