Continuamos con el segundo día en VAGOS.
Debo decir que me encantan los festivales de todo tipo de tamaño, pero cuando vienes de estar acostumbrado a grandes monstruos como son el RESU o el HELLFEST, se agradece poder paladear pequeñas joyas como este VAGOS METAL FEST. Dos zonas de campings amplias con mucha sombra, duchas gratis, buena cantidad de urinarios y un mercadillo de nivel, completan el buen servicio y atención que ofrece el festival a su público. También es reseñable la amplia variedad de food trucks y el precio de la bebida, que te hace no pensar mucho a la hora de gastarte los euros en la barra.
El enclave en la orilla del rio Boco en Vagos es precioso, y el recinto es perfecto para el total de personas que pueden acceder. Si tengo que poner una pega solo encuentro una, pero es una circunstancia que se escapa a las responsabilidades del festival: los mosquitos. Si tienes pensado ir asegúrate de ir bien preparado, no te van a fastidiar el fin de semana, pero prepárate para rascarte unos cuantos días… que todo lo malo sea eso. En resumen un sitio maravilloso, y un pueblo que recibe con los brazos abiertos al festival y te recuerdan esas sensaciones que vives o viviste en pequeñas poblaciones que tienen festivales de tamaño contenido, como Puerto de Vega con su UNIROCK, Viveiro y su RESURRECTION en sus comienzos, MONDRA n ROLL en Mondragón, etc…
SÁBADO.
Comenzamos el día igual que el viernes, en otra jornada plenamente soleada y con un ligero aire que ayudaba a pasar mejor el calor, aunque eso no fuera lo perfecto para el sonido dentro del festival. Nos dirigimos pronto al recinto, pues a las 15:30h comenzaban CONFESS, la banda iraní condenada en su país a 14 años de cárcel y a un buen puñado de latigazos. Qué triste que a estas alturas de la vida siga habiendo gente perseguida por decir lo que piensa y por condenar regímenes políticos fascistas y autoritarios, ya sea en Oriente o en Occidente dónde no nos olvidemos también pasan estas cosas. Los dos miembros originarios de Irán, Khosravi e Ilkhani, consiguieron escapar de su país vía Turquía, donde después de un tiempo de exilio obtuvieron invitación de Noruega para ser refugiados políticos y poder recuperar la normalidad en sus vidas, si bien esa normalidad no puede ser plena mientras sus amigos y familiares siguen en su país de origen, con lo que ello conlleva. La banda ha editado ya en Noruega su tercer álbum en 2022, dónde se ve un gran salto de calidad en la producción, y desde dónde han vuelto a poder girar con sus otros dos miembros, en este caso de origen nórdico. Buen concierto, donde quizás el sonido no fue todo lo nítido que podía ser en un principio pero fue remontando durante la actuación. A esa hora tuvieron que lidiar con poco público, pero el que hubo disfrutó comenzando la jornada de mosh pit y empezando a levantar las primeras polvaredas. El sonido de la banda carga principalmente con orígenes thrash, sonando riffs y punteos que nos llevan directamente a bandas como Slayer, pero donde su juventud y sus influencias les hacen sonar irremediablemente a NU METAL por momentos. Concierto animado y enérgico y con una banda que se veía cómoda y afable con el púbico, y por si tenéis curiosidad no utilizaron el escaparate para denunciar nada de sus problemas con su país; cierto que las letras ya denuncian de sobra su manera de pensar. Al acabar la actuación el público les manifestaba todo su apoyo a grito pelado, fue un bonito detalle.
Acto seguido empezaba la banda australiana THE OMNIFIC, un trío australiano muy joven con una formación extraña, dos bajistas, un batería y sin voz. La banda hace progresivo hipertécnico, en una suerte de melodías casi de videojuego dónde exhiben toda su calidad en los instrumentos. Solo vimos dos canciones, hacía mucho calor y optamos por descansar un poco, pero lo que pudimos escuchar deja a la banda en muy buen lugar. Cabe decir que soy muy fan de la música progresiva, pero cuando no hay voz y las melodías son tan extravagantes, como les pasa también a ANIMALS AS LEADERS o a LIQUID TENSION EXPERIMENT, pierdo un poco de pasión por esta etiqueta musical; me cansa un poquito tanta exhibición sin más, yo que sé, ya sabéis que para gustos… Sea como fuere estos jóvenes son buenos, muy buenos y merecen nuestro aplauso por tener esa pasión por lo que les gusta.
Volvimos a las 17:45h para ver a los gerundenses MORPHIUM, una banda que lleva desde 2005 pero que desde su firma en 2011 con Roadrunner no han parado de crecer. Prueba de ello es que han estado por medio mundo mostrando su música, y que cualquiera que los haya visto durante la pasada década puede confirmar que el directo que tienen es de banda curtida en mil batallas, y que podrían cumplir en cualquier festival del mundo sea del tamaño que sea. Alex no solo tiene un vozarrón, sino que además tiene una presencia imponente, y consigue mover a todo el público con una facilidad pasmosa. La banda ya funcionaba muy bien con la combinación que formaban con Lur a las voces femeninas, pero sin ella desde su salida de la banda han compactado su sonido más si cabe. Sonido perfecto durante toda la actuación y escenografía trabajada con peso para todos los músicos, en un concierto dónde se demostró que la banda tiene muy buena acogida en el país vecino. El setlist estuvo basado en sus dos últimos discos, obviando los dos primeros de la época con Lur. Sonaron "Everybody is dead in this house", "The truth", "Parasite", "All you are", "Insorcism", "Dance of flies", "What lies behind words" y "You’d rather to be blind".
Turno para los escoceses SAOR con su propuesta de folk black metal. Ya había disfrutado un rato de su música en el HELLFEST 2023 y me habían dejado muy buen sabor de boca. Ha habido cambio de la formación en directo, pues antiguamente llevaban un violinista que ha desaparecido de la formación, quedando el aspecto folkie de la banda cargado sobre los hombros de Zlotos, esta crack multi instrumentista que desde su tarima a un lado de la batería nos deleita con su angelical voz y su demostración de técnica con una buena variedad de instrumentos de viento, entre los que destacan el flautín y la gaita. La banda liderada por el bajista y cantante Andy Marshall estuvo muy bien en cuanto a la idea del show y su ejecución, con un sonido en la parte eléctrica contundente y bien engrasado, pero en el que la parte negativa llegó a la hora de añadir las partes de viento, en un auténtico desastre desde la mesa de sonido, donde casi nunca le dieron el peso necesario donde se necesitaba, habiendo momentos frustrantes para el espectador, viendo como Zlotos tocaba pero nos quedábamos sin escucharla prácticamente nada por momentos. Evidentemente este aspecto deslució mucho el concierto, aun así recomiendo ver en directo a esta banda, sin esos problemas hubiera sido un gran bolo, y creo que tienen un sello propio y original que hace que merezca mucho la pena verlos si te gustan los sonidos extremos y buscas cosas nuevas. El setlist estuvo compuesto por cuatro temas de los cinco que componen su disco AURA, del cual celebran su décimo aniversario, "Pillars of the earth", "The awakening", "Farewell" y "Aura". Entre que son temas de larga duración y que tuvieron problemas para empezar el concierto a su hora por problemas técnicos, no hubo tiempo para más que esos escasos 45 minutos de actuación.
Descansito y vuelta para la traca final del día, con tres bandas de peso en lo que auguraba una buena exhibición de metal en estilos muy distintos unos de otros. El primero sería el concierto de SAMAEL, la banda suiza de los hermanos Xytras y Vorph, que si bien empezaron como banda de black metal, pronto comenzaron una evolución bestial que les convirtió en una banda revolucionaria dentro del estilo del metal industrial. La banda dedica gran parte de su setlist a su época industrial, sobre todo con su célebre disco "Passage", que fue el que supuso el mayor giro de la banda a los sintetizadores, del cual sonaron temas como "Rain", "Shining kingdom", "Angel’s decay", "Jupiterian Vibe" o "The one who came before", salpicados con algunos otros temas como "Samael" o "Black supremacy" de su último disco. El sonido fue incomensurable, preciso, potente, una auténtica exhibición en aspectos técnicos, y lo digo sin ser fan de este estilo de música, pero asumiendo el riesgo y el mérito que tuvo la banda al reconvertirse y no perder parte de su esencia, pues al final casi treinta años después siguen teniendo fans que sobreviven del recuerdo de sus tres primeros discos. De esa época pudimos disfrutar canciones como "Son of earth", "Ceremony of opposites" o "Baphomet’s throne", que seguramente puedan parecer pocas para los fans de esa época, pero es que a mi modo de ver no tiene sentido tirar más de ese tiempo mientras Xytras esté al mando de la batería y los sintetizadores. Desde que este dejó de tocar exclusivamente la batería y se dedicó al synth, el estilo de sonido cambió tanto que no tendría mucho sentido aplicarlo en los temas de esos años. De hecho, lo único que no me acaba de convencer de su propuesta es que los cambios que hace pasando del sintetizador a la batería de pie no me resultan creíbles, hasta el punto que creo que va todo grabado, pues en alguna ocasión creo que no sincronizó bien el cambio y aquello siguió sonando perfectamente. En resumen, para que me toques temas antiguos con una batería sampleada mejor no me los toques. Buen concierto y banda de culto que sigue en forma tres décadas después y que creo que a pesar de todo acertó con su evolución musical a lo largo de su historia.
Llegaba el turno del metal sinfónico de los neerlandeses ÉPICA, banda que no tenía el placer de haber visto, y que tenía ganas de poner la “x” en su casilla y ver si podían mejorar a NIGHTWISH, banda que para mí ha marcado el paso en este estilo en este siglo y final del pasado, sobre todo en su época con TARJA. Mi conclusión es que son una gran banda, y se nota la estabilidad del grupo en su formación que apenas ha sufrido cambios en poco más de veinte años de existencia. La banda de Mark Jansen tiene un show medido a la perfección con una gran puesta en escena, y esta vez al menos, un sonido increíble, limpio y potente, donde todos los instrumentos eran fácilmente identificables sin salirse del nivel en ningún momento, y donde la guinda del pastel lo pone una magnífica Simone Simons, con una voz perfecta y una conexión con el público indudable. Un aspecto que me gustó mucho no solo de Simone, sino que también de su teclista Coen Janssen en mayor medida y del resto de la banda, es que su interacción con el público es muy natural, muy de andar por casa, y regalan buen rollo y sencillez de tal manera que parece que estén todo el concierto cantando para cada uno de nosotros, y eso es de agradecer. No sé si estarán por encima de NIGHTWISH ahora mismo, pues hace mucho que no los veo en directo, pero desde luego que se merecen estar en ese trono con ellos, al menos eso me parece. Por lo que sea, me gustan más las melodías de los finlandeses, pero es cierto que esta gente tiene también una buena colección de temazos. Las más de 3.000 personas asistentes corearon y saltaron durante toda la actuación, en un repaso de temas de toda su discografía, como "The essence of silence", "Victims of contingency", "Sensorium", "Unleashed", "The final lullaby", "Storm the sorrow", "The obsessive devotion"; con "The skeleton key" y "Code of life" viajaron a su último disco y para terminar la traca final con Unchain utopia, Cry for the moon, Beyond the matrix y Consign to Oblivion con la que terminaron un gran concierto.
Había que terminar la jornada con la última gran banda del día y serían compatriotas de los anteriores, los también neerlandeses GOD DETHRONED. La banda de death/black metal ejecutó un concierto perfecto, con una selección de temas heterogénea de su amplia trayectoria, y que incluso presentó un par de temas (Asmodevs y The rat kingdom) de lo que será su próximo THE JUDAS PARADOX. No los había visto nunca y me quedé impresionado por la metralleta de estos tíos. Mike a la batería es una auténtica bestia, tan rápido como preciso y las guitarras no van a la zaga, hacía tiempo que no disfrutaba de un grupo tan veloz, con esas influencias black pero con un sonido tan en bloque como si de los propios CARCASS se tratase. Si la banda hubiera tenido un poco más de regularidad en su carrera, creo que podían haber llegado más lejos en nombre y fama, pero el parón de la banda en 2012 con siete años sin editar disco creo que les pasó mucha factura. Sea como fuere es de celebrar que estén en plena forma y que vayan a regalarnos un nuevo disco cuatro años después de su último illuminati en 2020. Algunos temas del set fueron "Illuminati", "Villa vampiria", "Spirit of Beelzebub", "Posion fog", "Serpent King", "Boiling blood" y "Nihilism". Un gran colofón a una gran jornada de música. Terminaremos la crónica con la traca final del domingo, donde por desgracia tendré que detenerme en algo importante que sucedió que no nos gustó en absoluto, y que poco o nada tiene que ver con la música.
Continuará…
Foto portada: Epica.
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