sábado, 13 de agosto de 2016

LA DESTILERÍA: La Fuga y La Furia (2016 - Santo Grial)


By Larry Runner.

En los 90, antes de que aparecieran AVALANCH y “nos salvaran” del mundo de mierda que nos rodeaba en Asturias, LA DESTILERÍA nos mantuvo vivos. Luego, se fueron. Tras años de parón, regresaron sin perder ni una pizca del estatus conseguido dos décadas antes. En los conciertos del retorno ya comprobamos que seguían siendo igual de grandes, aunque mucho mejores músicos. Todo ello ha hecho eterna la espera por La Fuga y La Furia, su nuevo álbum que marca el definitivo retorno a uno de los grupos más grandes que pariera Asturias.

Siempre fueron por libre, con estilo propio y evidentemente no iban a cambiar a estas alturas. Nunca he escuchado un disco similar, LA DESTILERÍA tiene su sonido, aunque con este nuevo álbum se han permitido experimentar, moverse por nuevos terrenos, eso sí, sin perder en ningún momento su absorbente personalidad macarra.

Comienza el disco con sonido 100% LA DESTILERÍA, con esa mezcla de rock y metal con mala leche e ironía, sonando a “lo de siempre”. Evidentemente, las letras juegan un papel fundamental. Son tan importantes como la música, algo que, por desgracia, no es lo habitual. Nada de infantiladas, los textos son realmente brillantes, normalmente destinados a cagarse en la puta madre de más de uno, que, evidentemente se lo merece. Así que canciones como Traidor o Afila Tus Cuchillos suenan a nuevos clásicos, como no podía ser de otro modo. Turbocrack o En Fuga!! están por supuesto al mismo nivel. La base es contundente y el rasgado de Dany León en las rítmicas tiene el punto ideal para no excederse en la dureza pero también para no sonar a guitarra blandengue. Sobre ellos la voz del maestro Fredy Kostia, uno de los mejores frontman que parió esta tierra norteña. En La Princesa y la Rana nos sorprende la voz de Jorge Ilegal en la intro. Sí, los primeros seis cortes de La Fuga y La Furia son sublimes.

Con el séptimo track del álbum, cambian de estilo. Del rock duro y macarra de siempre pasan a un rollo Tex-Mex que te rompe los esquemas. Cansado de las Derrotas fue escogida para el video y si algún idiota se queda sólo en ese tema, pensará que la banda ha cambiado y que se han vuelto comerciales, porque evidentemente, el tema, lo es. El Rey (Ciudad sin Ley) y Disparos y Tragos completan junto al single, una trilogía western que puede que te llegue a atrapar. La última de ellas sirve de vínculo con la parte final del disco y es una mezcla fantástica entre el sonido Tex-Mex y el de LA DESTILERÍA de toda la vida. Un híbrido genial. De esta manera el álbum vuelve a dar un giro, con una vuelta al macarrismo, aunque a partir de ahora experimentando algo más en los sonidos, pero siempre sin excesos para no cagarla y dejar de ser ellos mismos.


Yo Soy Un Extraterrestre, el décimo corte lleva un punto de psicodelia, con coros femeninos y experimentación abundante, aunque el solo de Dany León la pone en su sitio. Eso, y el estribillo, pegadizo y 100% marca de la casa. Olor a Rosas viene marcada por las acústicas. No Dama y Hastaquí (Hemos Llegao) cumplen con el sonido clásico de la banda, con un trabajo sobresaliente en las guitarras de la segunda.

Casi al final llega una de las joyas del disco: Furia del Norte. Cuando me pincho el disco, nunca la escucho sólo una vez. Siempre le acabo dando al rewind y vuelve a sonar al menos otra más. No es un tema de LA DESTILERÍA propiamente dicho. Está escrita a medias con Desakato, como os digo, mejor dicho, como ellos mismos contaron en nuestro programa de radio. Pepo y Pablo de Desakato aportan lo mejor de sí mismos en una colaboración realmente deslumbrante. Temazo de esos que hacen que uno se sienta orgulloso de ser de donde es. Gracias gente, gracias de corazón, del corazón a donde llega directa la canción. Canciones así deberían estudiarse en la escuela. Orgullo total. Muy grande.

Discazo.







© Diario de un Metalhead 2016.

Programa con entrevista a LA DESTILERÍA aquí.