sábado, 19 de mayo de 2018

Hay que contraatacar.


Por Larry Runner.

Alacant Desperta es un festival que celebra en la ciudad de Alicante desde hace seis años y que aglutina a músicos de muy diversos estilos, llegando este año a superar el número de las 200 actuaciones. El Ayuntamiento de la ciudad con su edil de Cultura al frente y en colaboración con diferentes promotores llevan a adelante una actividad que hace de la ciudad la capital musical y cultural durante el último fin de semana de mayo.

No es fácil coordinar dichas actividades. Son alrededor de un millar de artistas y un más de un centenar de trabajadores que velarán porque todo vaya bien en nueve espacios diferenciados por temáticas y estilos musicales.

El evento se celebra en Monte Tossal del 25 al 27 de mayo y el año pasado acudieron más de 15.000 personas para las actividades ya no solo musicales, si no que además está presente el deporte, el teatro, la poesía, el cine, etc. Es algo abierto a todo el mundo, para todas las edades. Una pasada, ¿verdad? ¿Quién no soñaría con algo así en su ciudad? Pues bien, hay gente que no lo ve así, que le molesta, y eso que está en un lugar apartado. Pues ni así.

Como siempre, hay gente crítica con según qué actividades culturales, gente que se queja porque durante 3 días “la paz” se vea afectada con el tumulto de gente. Y es que hay gente para todo. El caso es que pasa en Alicante y en todas partes, no son una excepción allí, siempre hay gente “antiloquesea” que hace lo posible por amargar la fiesta. 

En el caso de la ciudad levantina, la queja ha llegado en forma de registro al ayuntamiento, algo que podría echar al traste el festival y con ello el trabajo y el ganarse el pan de mucha gente, y es que hay que tener en cuenta el impacto económico que algo así tiene en una ciudad, algo que los quejicas de turno nunca tienen en cuenta, porque a ellos eso, les da igual.

Llama la atención el escrito presentado en el Ayuntamiento de Alicante, con  incluso una frase amenazante al final, y es que a veces algunas asociaciones de vecinos tienen una gran dosis de poder gracias a los contactos con algunos políticos y pueden dar al traste con cualquier actividad ya sea pública en este caso o privada, como sucedió en Oviedo con una sala de conciertos hace bien poco. Algunos parecen vivir solo para fastidiar al prójimo.

¿Cual es el problema? Que la gente de la cultura, jamás contraataca. Nos quejamos en las redes sociales, entre nosotros, pero lo dejamos correr. ¿Qué deberíamos hacer? Probablemente ir a por ellos, a por las asociaciones de vecinos indeseables y hacerles la vida imposible como hacen ellos y jugando con sus normas, a base de denuncias en el ayuntamiento y ante la policía municipal. Que sus canalones gotean, pues denuncia. Que su perro caga y no lo recogen, pues denuncia. Que aparca usted sobre la acera para descargar la compra, pues denuncia. Que su fachada no cumple la reglamentación, pues denuncia. Que sacan la basura a deshora, pues denuncia. Y así todo. Denuncia, denuncia y denuncia, contraataque y a joderles la vida a los que nos la quieren joder. Así es como deberíamos obrar. O al menos así lo pienso yo. En Alicante, en Oviedo o en donde sea.

Que el interés de unos pocos no aplaste al de la mayoría jamás. Aprendamos a convivir. Respeten para ser respetados. Una cosa es es que te aburran la vida a diario y otra cosa una fiesta de tres días. No saquemos las cosas de quicio.

Más sobre el festival de Alicante aquí.
El fb del festival aquí.

La denuncia de Alicante, por desgracia, una de tantas.

© Diario de un Metalhead 2018.