jueves, 3 de noviembre de 2016

KATHEW: El Árbol del Ahorcado (2016 - Autoedición)


Por Sonia M.

KATHEW se estrenan desde Algeciras con este "El árbol del ahorcado", su primera referencia musical.

Como todo debut, siempre se plasma mucha ilusión y se quieren hacer muchas cosas. Al ver la etiqueta de groove metal sé a lo que vengo. Sin embargo me llevo una grata sorpresa oir los arreglos industriales que le meten, esos samplers que añade a los cortes DJ Neneko, lo que les da una vidilla más interesante a mi parecer y me atrae especialmente. Lo puedes percibir en la inicial "Déjanos en paz". Registros crudos y unas guitarras afiladas. En "Depredador" la base se hace demasiado monótona, pero quizás es eso lo que le da esa atmósfera tan chunga y oscura al corte, junto a la aportación de DJ Neneko. Como también ocurre en la siguiente "El cielo puede esperar", que gana enteros cuanto más la pinchas, aunque como diría el jefe, no llega a romper. 



El interludio donde DJ Neneko se expande alcanzando los dos minutos es casi como meterse en las fauces de cualquier álbum de numetal. Sin embargo no se une a la siguiente y queda como pendido de un hilo. Eso si, el inicio posterior de "El árbol del ahorcado", es muy positivo. Esta creo que es la pura esencia de la banda, con esa breve firma de Neneko, esos riffs killers de Rafa y ese martillo en forma de batería que es David. Uno de los mejores cortes y que a mi más me ha entusiasmado. Conciso y a la yugular, sin anestesia. Así como "Amstetten". Para una servidora, la línea que debería explotar la banda. Esos dos cortes resumen para mi el camino. Eso es KATHEW.  Pinceladas de electrónica oscura en la onda más RAMMSTEIN junto al groove metal más agresivo.

En general encontramos puntos muy positivos en este debut como esa mezcla de groove metal pesado con los samplers electrónicos en forma de atmósferas que le dan a los temas otro color. Sin embargo, el disco peca un poco de lineal y aún creo que falta por pulir detalles. Necesitan ser menos lineales, sorprender en los cortes con cambios, con mayor adrenalina como en los cortes comentados.

PD: Cosas como el último corte mejor evitar en el futuro. Una improvisación con más chicha y guitarras de por medio hubiese quedado mejor.

Un debut con el que comenzar a moverse y ganar tablas sobre el escenario.








© Diario de un Metalhead 2016.

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