jueves, 11 de enero de 2024

BRUCE DICKINSON: Balls to Picasso (EMI, 1994) UK. 30 aniversario.

📝 Larry Runner.

¿Alguien se acuerda de cuando escuchó por vez primera el "Balls to Picasso" de Bruce Dickinson? ¿Se acuerda de las primeras sensaciones?


Cuatro años habían pasado de "Tattoed Millionaire" un álbum distinto del sonido Maiden, más hard rockero que lo de la doncella, pero al fin y al cabo un disco de sonidos tradicionales. En él Dickinson se permitía alguna licencia fuera de guión como el hacer una versión del mismísimo David Bowie, pero su trabajo y el que estuviese junto a él Janick Gers era algo que nos encantó a todos los fans de Iron Maiden de siempre. Pero "Balls to Picasso" venía a rompernos la cabeza, o quizás las balls directamente.

Y es que cuando nos pusimos el disco por vez primera, casi nos da un síncope. El single "Tears of the Dragon" había salido un tiempo antes y nos pareció increíble. Era un puñetero hit y a día de hoy sigue siendo una canción que no puedo escuchar sólo una vez. Me vuelve loco como cualquier éxito de Maiden. "Tears of the Dragon" seguía la línea esperada, pero el álbum ... cuando arrancó "Cyclops" pensamos que el mundo se iba a la mierda.

Bruce Dickinson nos la había colado con el single y venía con una propuesta muy alejada de lo que esperábamos, algo a lo que contribuían sin duda sus nuevos músicos. Recordemos que "Balls to Picasso" fue el primer álbum de Bruce con Roy Z, Eddie Casillas y Dave Ingraham de Tribe of Gypsies.

El sonido que nos presentaba Dickinson en este disco era lo que por entonces se le llamaba Metal Alternativo, algo que nadie sabía calificar y por eso se le metía esa etiqueta, ese saco al que iba a parar todo lo raro.

De repente los sonidos alegres dejaban el paso a una música mucho más pesada en la que se tiraba de afinaciones graves, con unas rítmicas muy contundentes y aires tristones repartidos por el álbum como si el grunge intentase brotar. Todo un halo de oscuridad envuelve la música del disco. No es Maiden en absoluto salvo la citada “Tears of the Dragon”, colocada al final del álbum y que bien podría haber ido en "Fear of the Dark".

Confieso haber mostrado poco o nada de amor por el disco en el momento de llegar a mí. Sólo el paso de los años y la apertura de miras que nos trajo todo el metal mestizo de los 90 hizo que lo fuese aceptando de verdad hasta llegar a amarlo. Con el tiempo canciones como "Gods of War" o "Shoot all the Clowns" fueron entrando y las fui disfrutando, pero temas como "Fire" o "1000 Points of Light" siguen hoy en día siendo aún algo difíciles para mí. Pero he aprendido a disfrutar de temas como "Sacred Cowboys" a lo grande aunque estén más cerca de Rage Against the Machine que de Maiden. Y es que Dickinson llegó a rapear en este disco donde encontramos influencias hasta del funk. Eso sí, tengo varios discos en vivo de la época y el rapeo en vivo no se le daba nada bien,

Mención aparte para “Change of Heart”, una joya semiacústica con tanto de sabor latino que fue una hostia en la mesa para decirnos que algo de Bruce Dickinson era bueno y daba igual a qué sonara. A día de hoy me sigue pareciendo una maravilla y probablemente de lo mejor que ha grabado nunca el maestro de esgrima.

Sin duda el trabajo de Roy Z. fue deslumbrante y el descubrir a aquel tipo aportó mucho y bueno, pero ... que difícil nos lo puso Bruce con este disco. 

Posteriormente el álbum ha sido publicado en diversas ocasiones con distintas tiradas remasterizadas, con caras b, etc, (fui comprando todo lo que pude) pero, personalmente, cuando me da por ponérmelo, me tomo el original y no el comprado posteriormente, si no el promo que aún obra en mi poder, que con el paso de estos 30 años que ahora se cumplen de su edición se ha convertido en una de mis joyas favoritas. Y es que si algo tiene el haber estado ligado toda la vida a esto de la música, es que meter baza en programas de radio, fanzines, etc, trajo alguna que otra joya inesperada a mis manos sin pagar un duro. Ser viejo tiene también sus ventajas.

El disco fue difícil de primeras, pero sirvió para educarnos los oídos un poco más, y es por ello que ahora, 30 años más tarde, tenemos que decirle a Bruce Dickinson que "muchas gracias" por semejante regalo. 

Sí, 30 años más tarde tenía que decirlo en público. Me rindo. "Balls to Picasso" es maravilloso.

Tracklist:
Cyclops 7:57
Hell No 5:12
Gods Of War 5:02
1000 Points Of Light 4:25
Laughing In The Hiding Bush 4:21
Change Of Heart 4:59
Shoot All The Clowns 4:24
Fire 4:30
Sacred Cowboys 3:54
Tears Of The Dragon 6:20



© Diario de un Metalhead 2024.


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