Por Larry Runner.
Noche de metal de corte folk en la capital asturiana. Tres bandas con notable presencia femenina en sus filas se presentaban en Oviedo: Last Days of Eden para concluir su gira y dos bandas amigas para acompañarles Taranus y Crusade of Bards.
Por temas laborales no llegamos para ver a los piratas madrileños y nos quedan en el debe aunque a buen seguro que tarde o temprano les veremos en vivo. Malos tiempos estos en los que ni de sábado a veces puedes disponer de tu ocio como quisieras. Así las cosas, llegamos justo cuando acababan de terminar su actuación, tal y como nos hacían saber a la puerta de la Sir Laurens. Cumpliremos con ellos en el futuro. Lástima de oportunidad perdida.
La noche empezó para nosotros con TARANUS que estuvieron sensacionales a lo largo de toda la noche a pesar de que el sonido no les acompañó en ningún momento. He visto a la banda en diferentes escenarios, grandes, minúsculos y en teatros, siempre llevando una línea más folk y demasiado blanda para lo que son mis gustos personales. Nunca jamás me han disgustado, todo lo contrario, pero siempre me quedaba con las ganas de más caña. Era como tener sexo y no consumar. Afortunadamente para este concierto de Sir Laurens donde el público iba a ser eminentemente heavy, se pusieron las pilas y presentaron un repertorio mucho más duro y cercano a los presentes. En mi opinión creo que fue todo un acierto y personalmente ha sido la vez que más me han gustado. Con eso ya os lo digo todo.
Video by "Olimpo del Metal" grabado desde la primera fila.
Abrieron con “La Bruxa” -temazo- y siguieron con “Ánima”. Las guitarras estaban bajísimas y el bajo de Diego Martino las tapaba totalmente. “Herr Mannelig” sonó enseguida y metió al público en el bolsillo, probablemente porque casi la totalidad de los asistentes la conociesen por la versión que de ella hacen los berlineses In Extremo. Tras la nueva y cañera "La Lleenda del Nordés" cantada por Antonio Carballo y en la que Pindy estuvo realmente brutal, continuaron con un “Montesinos” bastante más duro que el disco. El público estaba ya entregado al sexteto que presentó una fantástica puesta en escena todos de negro y donde no faltaron atuendos acordes al sonido del grupo como las faldas. Sobresaliente la imagen, como todo el show en sí, con una Susana Mortem a la voz que encandila a mujeres y hombres por igual, con esa capacidad de pasar de frágil mujer a bestia de escenario en cuestión de segundos. De lo mejorcito de esta Asturias nuestra sobre un escenario.
“El Llobu” convirtió a la banda en un grupo de rock duro, con Marco Álvarez quitando las telarañas a la batería, aporreando como hacía tiempo que no le veíamos y un Pindy al micro transformado en bestia y que ya antes había puesto la sala patas arriba con su intro del “Thunderstruck” de AC/DC. Tras unos bailoteos más que celebrados con su particular revisión de “Bella Ciao”, cerraron con “Taranus” una brillante actuación que ni siquiera los problemas de sonido lograron ensombrecer. Enormes.
LAST DAYS OF EDEN ofrecían el último show en casa de esta primera gira “Ride The World Tour”. Agoniza un tour que se ha convertido con el paso del tiempo en un largo periplo que les ha llevado incluso a girar por centroeuropa.
Se presentaron sin su teclista Juan Gómez y tampoco estuvo Gustavo Rodríguez, al que no se le echó tanto de menos porque Pindy Díaz aportó además de sus sonidos de flauta, las partes fundamentales de gaita. Aún así el escenario se llenó de gente, pues por vez primera vimos a la banda contar con la presencia de Sara Cabezas al violín. Las partes de las teclas se vieron cubiertas de forma grabada y sobre ellas la banda se lanzó para ofrecer probablemente el concierto con el que yo más haya disfrutado de todas las veces que les he visto en vivo. Y puedes creerme, ya he perdido la cuenta.
Todo ello tiene un mérito aún mayor sabiendo que el grupo contó con dificultades durante toda la actuación. Sus monitores inalámbricos se les iban constantemente y tocar así es una dificultad añadida que supieron solventar con profesionalidad y que desde abajo no se percibió demasiado. Quizás a Dani G en los coros se le fuese un poco el tono en un par de temas, pensaba en crucificarle por ello (hay que darles caña que si no se creen rockstars), pero sabiendo al final lo mal que lo pasaron por los problemas de interferencias, habrá que perdonarle.
Un ventilador y unas flores de luz a los pies de Lady Ani sirvieron de atrezzo a una actuación que arrancó con “Invisible” sonando bastante mal. “Queen of the North” sonó un poco mejor y para “Bring Me The Night”, que sonó muy cañera, todo parecía ya estar casi en su sitio. Y es que en ese arranque la voz solista sonaba muy alta y el violín de Sara era casi inaudible. Un rápido saludo y “Lost”. Nada de largos discursos, metiendo caña, saliendo fuerte.
Para “7 Years of Madness”, que fue presentada por Dani G. por fin comenzó a sonar el violín de verdad y bajaron un poco el volumen a Pindy, que hacía doblete esta noche. A partir de ahí fue cuando yo comencé a disfrutar del concierto. Seguidamente se subió Susana Mortem de Taranus para sumarse al cover de Within’ Temptation “Paradise (What About Us)” emulando a la versión original de Sharon den Adel y Tarja. Temazo que la banda defendió fantásticamente.
“Here Come The Wolves” sonó perfecta y “Moonlight” fue interpretada en asturiano, como en “Traxel Mor”. “The Last Stand” empezó bien pero alguien se pasó por detrás del escenario, tropezó con una regleta y dejó a más de media banda en silencio. Tuvieron que volver a arrancar y ... salió bien.
La nueva “Roots of life” sonó contundente, con el ex-Alquimia Leo Duarte especialmente brillante en la batería en el tema y con un Pindy fundamental a la flauta, una Sara deslumbrante al violín y un buen solo de Dani G en la guitarra. Me parece que el nivel compositivo no va a bajar con el nuevo disco. Detrás “Last of the Wilds”, de Nightwish sin Lady Ani, que volvió para cerrar con “Land of the Rain”.
Regresaron para un bis sin hacerse de rogar. “The Piper’s Call” para abrir “les otres tres”. “Paradise” con Adrián gustándose en el bajo y para el final otro cover “Last Ride of the Day” del “Imaginaerum” de Nightwish con una Lady Ani pletórica.
Conciertazo. De los problemas sólo se enteraron ellos.
© Diario de un Metalhead 2017.
Más crónicas de conciertos aquí.
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