domingo, 10 de julio de 2016

BUDDERSIDE: Budderside (2016- UDR/Motörhead Music) USA.


By Larry Runner.

BUDDERSIDE es probablemente el grupo más ecléctico que me he echado a la cara en mucho tiempo. Provienen de Los Ángeles y su frontman y líder Patrick Stone dice haber mamado de la música de la saga Guns N’ Roses y de otros como Quiet Riot.

Pues bien, su música no tiene casi nada que con todo aquello. BUDDERSIDE son inetiquetables, poco recomendables para amantes de sonidos puros. En cambio son la banda que recomendaría a todo aquel amante de las nuevas sensaciones, de los grupos que gustan de experimentar. Si eres de este segundo grupo, te van a encantar.

Genocide abre un disco extraño como pocos y recordándome a desde System of a Down a Jane’s Addiction pasando por Muse o Soundgarden. Tal cual. No bromeo. ¿Que te suena raro? ¡Prepárate! Detrás viene Ska Bra, un tema bailón mezcla rockera con -evidentemente- ska. Pain es la tercera y no va a ritmo de ska, pero  sí que no pierde el rollo bailongo con retazos del punk de los 90 que encumbró a gente como The Offspring o Green Day.



X-Girlfriend los pone serios y cambian totalmente de palo otra vez. Una mezcla de Sabbath con Velvet Revolver, donde Scott Weiland parece por momentos haber poseído a Patrick. Esto empieza a ser para volverse loco y siguen con cambios. Clear Blue Sky parace sacada de algún disco de Kansas. Van a acabar conmigo. Se me hace duro seguir. A saber lo que nos queda por descubrir en este su primer disco. Llevamos medio álbum y no hay dos temas iguales.

Open Relationship lleva gritos desgañitados para acabar un estribillo melódico tirando de nuevo hacia terrenos punkarras noventas. Muy comercial. My Religion tira de acústicas con la esencia Faith No More -como en todo el disco- presente.


Su manager es Todd Singerman, del entorno de Motörhead y apostó por ellos fuertemente. El resultado llega ahora a nuestros manos no apto para puristas.

The Envelope me recuerda al grunge de Soundgarden, y llegados a este punto pienso que ese mismo sentimiento ya apareció en Pain. Tanta variedad comienza a alienarme. Let’s This One Breathe vuelve al comienzo del álbum, con una mezcla de SOAD y grunge. Se complica la historia. Cierran tirando de balada a lo AOR con Can’t Wrap My Head Around You con instrumentaciones incluidas.

O te enganchan a la primera o probablemente los vayas a ignorar del todo. Aquí no va a existir el término medio. Si te reconoces como purista del metal ni se te ocurra. Recomendado para amantes de todas las bandas citadas, de Queen of the Stone Age o de nuestros Estirpe. Personalmente, me ha abrumado pero a mi amigo Ferreira, compañero de Más Madera, le va a encantar. Su apuesta es arriesgada, y mucho, pero en bueno, no como la de Seek Irony que publicaba hace unos días.





© Diario de un Metalhead 2016.

+ Bandas de sonido experimental aquí.