Por Larry Runner.
Fue en enero de 2020 cuando hablé aquí de "The Dogma and The Outsider", el anterior álbum de Chechu Nos, o lo que es lo mismo, de NORTH OF SOUTH, nombre del proyecto de este enorme músico y multiinstrumentista todo terreno leonés. Ahora, tras casi dos años de la publicación de aquel espectacular disco, donde aparecían nombres internacionales de relumbrón, Chechu regresa este nuevo trabajo, titulado “The Tides in Our Veins”.
Chechu Nos vuelve a mostrar un trabajo complejo repleto de una música de fusión sin límites, donde todo tiene cabida, desde el death metal al flamenco logrando a pesar de la rarísima mezcolanza un disco con sentido.
Abre el álbum “A Pinch Of Stardust”, un larguísimo corte de más de once minutos donde el artista va mostrando sus armas y dando pistas al oyente de que una vez más cualquier cosa cabe esperar de la música de este nuevo disco. El tema es de un intenso progresivo, con partes de puro jazz, cantado a dos voces. La femenina aportada por Rebecca Stanley y la masculina del propio Chechu que se muestra a veces en un tono que podría recordar a James Labrie en un corte que sin duda recuerda a los grandes del estilo. La duración del tema da para que la canción trascurra por diferentes atmósferas, de más claras a otras más oscuras sin faltar buenos solos de guitarra y llegando incluso a tirar de guturales.
“Swim Among The Stars” es el segundo de los temas, un tema con un aire que me recuerda enormemente a aquellos magníficos Racer X con los que descubrimos a Paul Gilbert. Evidentemente no suena igual, y es que una vez más la voz femenina de Rebecca Stanley está presente. Una canción más directa, menos cargada y más heavy que personalmente encuentro más divertida, sobre todo con esas guitarras dobladas. Los teclados tienen su peso en una composición a la que personalmente le habría dado, quizás como a todo el disco, un poco más de fuerza en la percusión.
“Soul Cartography” es el tercer corte y un tema de otra liga. No podría ser de otra forma. Entra en juego una de las grandes estrellas invitadas de este disco, Tom S. Englund, la voz de Evergrey. Intenso a veces, suave en otros momentos, tirando de estribillo, teclados y algunas partes rápidas, la canción es todo un galimatías de cambios de ritmo realmente interesante con momentos realmente atmosféricos y complicados con otros de puro heavy metal.
“Just Fourteen Seconds” es el cuarto de los cortes. Una canción que rompe con la trayectoria de lo que era el disco hasta el momento, donde aparece el blast beat con un comienzo agresivo. El leonés nos lleva al Black Metal, ofreciendo una atmósfera oscura a la que llega con la ayuda de Sakis Tolis de Rotting Christ, otra de las grandes estrellas invitadas del álbum. Eso sí, Chechu nos vuelve a sorprender. Cuando piensas que por fin va a haber un tema etiquetable, entra en juego la flauta de Rodrigo Martínez (referente del folk leonés) y tras un oscuro susurro viene una parte flamenca con la voz del maestro Javier Caminero. Al final tira de atmósfera progresiva y guitarrera. Toda una rareza.
“The Nameless Walker” es el quinto de los cortes. Un tema instrumental donde Chechu se luce sin excesos a la guitarra y a los teclados a lo Procol Harum, dando un sentido a todo el conjunto y una musicalidad total. Si bien al principio parece que por fin tendrás un tema sin sorpresas, luego no es así. Era de esperar en un track de casi siete minutos. Un tema progresivo donde no puedo evitar que la guitarra del leonés me recuerde a la forma de tocar de Andy Summers.
“To Cross The Emotional Spectrum” regresa a la atmósfera del principio del disco, tirando de nuevo de la ayuda de Rebecca Stanley a la voz. En esta ocasión la sorpresa viene en forma de sonidos de instrumentos de viento, pero sin excesos en una canción cuyo resultado llega a ser al final tan extraño quizás como lo es su letra, aunque en realidad todos los textos lo son.
Y es que también en ese aspecto el artista leonés se diferencia quizás un poco de todos los estándares. No consigo encontrar una explicación clara a lo que tratan las letras en la mayoría de los cortes. En ese sentido, el trabajo es tan complicado como en lo musical. Además los textos suelen tener también una extensión fuera de lo común. Quizás la falta de estribillos nítidos sea la razón.
“White Blindness” tira de riff intenso y vuelve a transcurrir por multitud de atmósferas, con partes extremas y otras realmente melódicas, ofreciendo además todo tipo de voces, jugando muchísimo con las líneas vocales entrando en juego también la voz femenina de Rebecca Stanley.
“The Robber Of Memories” es doblemente sorprendente. Y es que entran en juego nuevos sonidos, pues el tema nos traslada al mundo del Doom Metal. Por otra parte, parte de la letra está en castellano, algo no se repite en todo el álbum. Oscura y enormemente tristona, quizás sea la única en la que encuentre cierto sentido a la letra, probablemente porque la pérdida reciente de un familiar que la padecía hace que esté muy presente a día de hoy. Maldita demencia de apellido alemán, que hace que las personas se conviertan casi en plantas. Luego dicen que hay Dios ...
“In the Margins of the Script of Life” viene a iluminarnos tras la aflicción y el sufrimiento experimentados en “The Robber Of Memories”. Es un tema progresivo más “normal” que te traslada una vez más a la atmósfera del comienzo del disco. Me encanta el solo y que sea menos retorcida. Esa habitualidad hace que sea especial tras tanto retorcimiento musical. Entra sola antes de la instrumental final “Secrets And Revelations” que tiene una parte que no puedo evitar me recuerde al estribillo del “Get into the groove” de Madonna.
Una vez más Chechu Nos entrega un trabajo en el que parece buscar la excelencia, la perfección musical, intentando no evitar ningún estilo ni idea que le venga a la mente. El resultado es un disco de un mestizaje total, de lo más variado y que puede encantar a los amantes del metal más progresivo o experimental. Un álbum al que le podrás mil vueltas antes de llegar a aprendértelo o a que te suene conocido. Y es que en cada escucha encuentras un detalle que te había pasado desapercibido en las anteriores. Con el tiempo y las sucesivas pasadas va ganando y transmitiéndote la pasión con la que está trabajado. Un álbum sumamente cuidado y detallista.
No me gusta extenderme tanto en las reseñas, pero es que en este caso no encontré mejor fórmula para expresar todo. Aún así, me he quedado corto.
1. A Pinch of Stardust
2. Swim Among the Stars
3. Soul Cartography
4. Just Fourteen Seconds
5. The Nameless Walker
6. To Cross the Emotional Spectrum
7. White Blindness
8. The Robber of Memories
9. In the Margins of the Script of Life
10. Secrets and Revelations
No hay comentarios:
Publicar un comentario