miércoles, 29 de agosto de 2018

"Eidolon", lo nuevo de POSESSION.


Por Larry Runner.

Seis años. Seis han pasado desde la publicación de “Spiritual Sirius” (2012, KTC Domestic Productions), la anterior obra de POSESSION. He tenido que mirar el dato dos veces, pues no me lo acababa de creer. Quizás no se nos ha hecho tan largo como ha sido porque por el medio llegó la reedición de su debut de 2001 “Anoxia” en vinilo. Me imagino que haya sido eso lo que no nos ha hecho la espera tan larga como ha sido al final.

“Eidolon” rompe con ese silencio y será su quinto álbum de estudio. Verá la luz en septiembre a través de Discos Furia. Un mes antes de que el disco todos lo puedan escuchar, Titi Muñoz, guitarra y voz, nos invita a su casa para escucharlo, y, evidentemente, no rechazamos la oferta. Solo fue una escucha y quizás sea un poco precipitado ponerse a escribir, pero necesitábamos compartirlo, aunque más adelante, con un buen montón de vueltas encima, le hagamos una reseña en condiciones.

Nueve son los temas que componen “Eidolon”. Titi enciende el equipo y los watios empiezan a trabajar. Las canciones no van por orden, así que en vez de ir tomando notas de cada corte, simplemente nos dedicamos a escuchar y tomar alguna referencia para ahora poder escribir esta entrada. Apenas unas notas sobre sensaciones y comentarios. Ya habrá tiempo de escribir una reseña del disco más adelante, cuando lo tengamos en nuestras manos, cuando disfrutemos del producto en físico, que es lo que nos gusta.


¿A qué suena “Eidolon”?

Posession tienen sonido propio, con lo cual, al mantener su esencia, al no perder en ningún momento personalidad, el disco suena a Posession, a ellos mismos. Eso sí, hay que aclarar algunos matices. Y es que “Spiritual Sirius” era un álbum un tanto alejado de sus anteriores obras. Era un disco más asequible, un tanto más melódico, y eso les hizo ganar adeptos para su causa. “Spiritual Sirius” fue como un giro, una apertura hacia la melodía. No es que fuera comercial o menos duro, si no que a la música de la banda se le dio un plus melódico que quizás viniera también de mano de la grabación, superior en calidad a todo lo anterior.

Por ahí van los tiros en “Eidolon”. No es que sea más melódico que “Spiritual Sirius”. Definitivamente no. Es casi una mezcla de todo lo que reflejaban sus anteriores discos, aunque la crudeza de “Anoxia” no está ahí. Y es que “Eidolon” suena limpio, la grabación es nítida, está muy bien grabado, mezclado y masterizado, y con ello la banda da un enorme salto de calidad que les debería hacer crecer.

Esa nitidez, esa limpieza, no resta fuerza al grupo. Lo que sí hace es resaltar las virtudes de una banda que por fin puede sentirse orgullosa de un disco que sin duda alguna refleja mejor que ningún otro lo que la banda ofrece en vivo, aunque para ser perfecto debería ser un live album.

Sí, “Eidolon” refleja mucho mejor lo que es la banda hoy en día. La nitidez no hace perder la fuerza de sus graves afinaciones y las canciones a pesar de la oscuridad son abordables por todo tipo de oídos acostumbrados a escuchar metal. Solo las voces, mejor trabajadas que nunca, le acercan al metal puramente extremo. Sigue siendo metal extremo, pero con matices y dejando mostrar en algunos renglones al heavy metal. Incluso filtra algún ritmo thrash, aunque muy de pasada, no se me asusten ustedes.


Afinaciones graves y el triunfo de los riffs pesados, con mucho espacio para las cabalgadas típicas de la banda que te harán cabecear en todo momento. Con algún pasaje que invita a liarla en el pit, por supuesto, aunque sin abusar. 

Las voces están mejor trabajadas que nunca y a diferencia de otras obras donde el bajista Xuxo Gallego responde una y otra vez a Titi Muñoz, en esta ocasión hay momentos donde las voces se pisan. Sí, hay auténticos coros en algunos momentos, y eso le aporta un brillo especial a los temas cuando se deja ver. Si hasta hoy Pablo Muñoz era el encargado de la parte de composición sin casi compartir esa responsabilidad, en este álbum todos han aportado, con Titi aportando más de lo habitual. Aún así la banda no ha perdido ni un ápice de personalidad.

Las baterías también están mejor trabajadas que en discos anteriores. Iván Rubio está inmenso y en algunos temas complica los ritmos para salirse de lo habitual, de lo que se espera. Sorprende con su trabajo, con ritmos casi antinaturales. Fliparás en ese aspecto con “Cenizas”, la canción que abre un álbum que les ha llevado el triple de tiempo de estudio que sus predecesores. Si antes terminaban todo en cinco días, ahora ese tiempo casi lo han invertido en la batería. El resultado salta a la vista. Sobresaliente. Las letras sobre la maldad de la humanidad, las comentaremos en profundidad cuando tengamos el disco físico.

Pepo de Desakato colabora en uno de los temas, concretamente en “Olor a sangre”. Fue fácil, su hermano estuvo a los mandos de la grabación y de la mezcla. El trabajo de Pablo en los Estudios OVNI unido al toque final de Álex Cappa ha hecho que Posession suene mejor que nunca y se parezcan a los Posssion del directo. Ahora, a esperar a poder escuchar el disco una y otra vez. Una sola pasada es demasiado poco.

En resumen, Posession en estado puro, más que nunca. Un álbum que muestra el sonido actual sin perder la personalidad de los comienzos y el mejor trabajo de producción y masterizado de su vida.

La portada, a la altura del disco, es una vez más de J.M.Navarro y el diseño interior es realmente acojonante.


“Eidolon” lleva en su interior nueve temas y se editará en CD y Vinilo. Son estos:
Cara A
1. Cenizas
2. El lenguaje de la Bestia
3. Cuervos Negros
4. El Camino
5. Olor a Sangre (con Pepe de Desakato)
Cara B
6. El Señor de los Muertos
7. Caldero de Sangre
8. 20 metros
9. La Jaula

El jueves 20 de septiembre presentaremos "Eidolon" en Diario de un Metalhead, entrevistando a la banda. Dos días más tarde el disco será presentado en Oviedo, en la Sala Lata de Zinc. Discos Furia lo publicará. Más adelante informaremos de todos estos detalles.