Ocurrió hace dos semanas. Acudimos al Núcleo Zoológico El Bosque de Oviedo y allí pudimos comprobar como se lucha por la vida de aquellos bichitos a quienes sus dueños por una u otra razón abandonan sin piedad.
Tuvimos la sensación de que no se trataba de un zoo normal. Regentado por un matrimonio que desde hace años se deja la piel por los animales y ayudados por un joven veterinario, una bióloga con muy buen gusto musical y algunas voluntarias; el Núcleo subsiste sin ayudas de ningún tipo cuando en esta Asturias nuestra sí las hay para otras cosas mucho más absurdas.
Vimos que en algunas de las jaulas colgaban carteles que anunciaban la colaboración de algunas personas o empresas a modo de apadrinamiento del animal. Nos informamos, y no nos pudimos resistir. Un pequeño y precioso loro Amazona Real se acercó a nosotros y ... nos convertimos en sus padrinos.
Ahora Gus, que así se llama nuestro verde amigo, forma parte de la familia de Diario de un Metalhead. Es nuestro ahijado. Gusa, su inseparable compañera espera a que alguien vaya y tenga el mismo detalle con ella. Si os queréis pasar a visitarles a ellos y a todos sus compañeros abandonados, allí os esperan con los brazos abiertos. Con poco, se puede hacer mucho. Os lo decimos por experiencia. Toda ayuda, por pequeña que sea, es buena. Necesitamos que por cada desalmado haya una buena persona para compensar.
Por cierto, por ser padrinos, tenemos acceso gratis todo el año al Parque, así que podemos ir a ver a Gus siempre que queramos.
Os dejamos el link a la web por si pensáis como nosotros. Si vais, seguro que os va a encantar.