Por Larry Runner.
“Bringer of Pain” es lo mejor que han parido BATTLE BEAST. Olvídate de eso que tan bien queda de “a mí me molaban al principio”, una polla. Vale, puede quedarte muy bien para dártelas de “auténtico” y esas gilipolleces que hace la gente para pasar por true. Sí que estaban bien en sus comienzos, por eso ganaron la W:O:A Metal Battle en 2010, porque eran muy buenos. Pero siete años más tarde son un auténtico cañón, y yo lo celebro.
Necesitamos sangre nueva, que el metal se vaya renovando, pero cuidado, sin experimentos chorras y con gente buena, pero sin falta de que por demostrarlo ofrezcan discos que son un tostón. Hacen falta CANCIONES, sí, así, en mayúsculas. Pues bien, eso es lo que ofrece el sexteto capitaneado por la mejor cantante de Europa: Noora Louhimo.
“Bringer of Pain” es eso, una fantástica colección de canciones, hasta trece en el digipack, en las que encontramos toda la fuerza del heavy metal y la velocidad, como en la que da el título al disco, pasando por ritmos típicos del nuevo metal sueco como en la inicial “Straight to the heart” y llegando a sonidos más “comerciales” como en “King for a day” o “Familiar Hell” que casi te hacen bailar.
Sí, está claro, estos suecos se han criado escuchando Iron Maiden y Abba, y han tomado lo mejor del pop de los dioses de su país y lo han unido al heavy metal tradicional, lo cual les ha hecho únicos.
Hay buenos solos, demostraciones de virtuosismo y a veces hasta buenas baterías, que no todas son programadas, pero por encima de todo lo que hay son muy buenas canciones, de las que te quedan en la mente y de las que hacen que te vuelvas a pinchar el disco uno y otro día. Que te hacen repetir y no te vayas a olvidar de él a la semana porque tienes otros 25 nuevos.
La rubia Noora Louhimo recuerda con su mezcla de dulzura y fuerza a las mujeres vikingas que hoy vemos en las películas y series que se dedican a los héroes de su pasado y con su trabajo en este “Bringer of Pain” se ha convertido en mi vocalista femenina favorita del momento. Brilla con luz propia.
Y es que su registro es enorme y cambia de estilo como le da la gana según lo pida esta colección de hits, porque eso son canciones como “Beyond the burning skies” -al loro aquí con la rubia- o todas las ya citadas y más que hay en este fantástico disco.
Podría ir aquí describiéntote el sonido de cada canción, repito, canción, que no corte o tema, pero mejor es que te pongas el disco y disfrutes de los mejores estribillos que he escuchado desde que descubrí a Eclipse. El álbum mejora con cada canción y a veces hasta entra en sonidos juegan a experimentar como en “Lost in Words” donde se ponen industriales con además la colaboración de Tomi Joutsen de Amorphis. Alucinante.
Sonidazo from Finnvox y sobresaliente absoluto para uno de los discos del año. Estos de Nuclear Blast de tontos. Ni un pelo. Mola hasta la portada de Jan Yrlund.
© Diario de un Metalhead 2017.
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