By Simón García López.
En esto del metal como en todo, uno nunca deja de aprender y sorprenderse. En este mundo en el que vivimos, tan sumamente globalizado y con tantas posibilidades, cerrarse a lo que te venden o lo establecido es un error mayúsculo. Es lo cómodo pero no lo correcto. En el Grindcore eso lo saben bastante bien. Pensar que en esto del metal se conoce todo lo que se debe de conocer, que está todo inventado en general y que llega un punto en donde ya no merece la pena escuchar nada nuevo es simplemente un error.
Llega a la redacción de Diario un Split compartido de dos grupos que no conozco de nada. DEPARTMENT OF CORRECTION (Francia) y PROLETAR (Indonesia). Los grupos de Grind siempre los pillo con mucho miedo. Van muy rápido y yo con ellos. En menos de 10 segundos he escuchado lo suficiente para saber si me gustan o no. No necesito más sinceramente y no es soberbia. Si en un grupo normal una canción dura 4 minutos y lo quitas si no te gusta al minuto 1, con uno de Grind si una canción dura 40 segundos a los 10 sabes lo que hay. Van a toda leche y en esos 10 segundos ya te han demostrado en mayor o menor medida lo que son.
Empieza el Split con DEPARTMENT OF CORRECTION y la canción termina. La segunda también termina y cuando me doy cuenta los 8 minutos de su parte del Split han pasado como una exhalación, con lo cual hay que volver a ponerlo. En este punto investigo sobre el grupo. Se forman en 2008, tienen varios Splits además de este y un larga duración de 15 minutos.
Es buenísimo, sin más. De ahí mi reflexión inicial. Nunca se sabe ni se conoce lo suficiente y siempre puedes resultar gratamente sorprendido. Su parte está compuesta de 10 canciones de 8 minutos de duración. Si tenemos en cuenta que la última dura casi 3 minutos, os podéis hacer una idea de lo que duran las demás. Suena genial, muy intenso, cortante y definido a pesar de lo extremo, al estilo de los últimos de Napalm. Al principio me da la impresión de estar escuchando a unos Soilent Green a toda leche en su parte más Grind pero tienen un estilo muy personal. Su música está llena de cambios esquizofrénicos, cortes sequísimos y diferentes voces que abarcan todas las diferentes maneras de cantar Grindcore, desde lo gutural a lo agudo. Como curiosidad, Grégoire Duclos su cantante, en directo utiliza dos micros, uno en cada mano que intercambia dependiendo de la voz que utiliza. Y aunque a en este Split lo tienen, solían tocar sin bajo a lo Pig Destroyer, grupo del que se puede sacar alguna semejanza también. En resumen, no tengo más calificativo para esto que excepcional. Si Relapse fuese lo que fue no tardarían ni un segundo en ficharlos. Intensidad y extremismo a raudales en estos 8 minutos de un Grind que es como un bofetón de frescor. Los fans del estilo tienen aquí un chute que no se deben de perder bajo ningún pretexto. Termino de escribir esta parte y puede que ya lo haya escuchado 5 veces.
Después de esto PROLETAR me emocionan mucho menos. Grupo veterano de Indonesia donde la escena extrema es enorme, llevan más de 15 años tocando y tienen multitud de Splits y EP publicados. En esta ocasión nos presentan 6 temas, uno de ellos una versión del tercer tema del Razor Sharp Daggers de Agathocles, donde desarrollan un Death/Grind old school que recuerda en gran medida a los Napalm Death de los inicios de Barney, con algún toque Death al estilo Incantation (mínimo) con esos armónicos inconfundibles de los americanos. No están mal y a los amantes del Old school les gustará la propuesta de PROLETAR, aunque no sean nada del otro mundo. Además, sin incidir mucho en el tema, los errores de ejecución son en algunas partes bastante palpables, aunque a este respecto siempre he opinado que prefiero mil veces escuchar grabaciones naturales con fallos de ejecución que las sobreproducciones que invaden el mercado a día de hoy.
En resumen, un buen Split donde se encuentran dos formas de entender el Grind. Una actual y otra clásica, pero con encanto las dos. Eso sí, si me tengo que quedar con uno de los dos, me quedo con Department of correction sin dudarlo ni un solo segundo, no vaya a ser que se me escape algún tema en ese tiempo.
Nota de redacción: a la venta el 12 de febrero.
© Diario de un Metalhead 2016.
