Por Jorge López Novales.
Hoy viene una de esas reseñas tristes. Intermezzo se despide con un disco póstumo con un título sencillo llamado “Off”.
Tras cinco discos, numerosos conciertos, nos dejan. No puedo reprochar nada la banda después de escuchar un trabajo... podría decirse que lo dejan en su mejor momento y nos regalan trece temas más una intro.
Mi mente me lleva a ese Raposu que fue la última vez que los vi sobre un escenario en la que se mezclaba juventud y veteranía. Desprendían una gran energía.
Pero, ¿quiénes son Inntermezzo? Es una banda de Langreo que practica un metal moderno. ¿Metal moderno? Sería simplificar demasiado. Habría que decir que entendemos como moderno un sonido en el que tiene cabida todo y con lo que se logra un trabajo muy dinámico de múltiples lecturas.
Tenemos la voz de Fran Tejado y su guitarra. Como un moderno cantautor va cantando los versos compuestos por Guti (a su vez bajista de la formación con un gran protagonismo en su sonido). Escucha a escucha voy hilvanando cada frase y mi oído va dando forma a un puzzle, en el que vas reparando en cada detalle de las letras. La letra tiene mucha profundidad (y lo considero una de las características primordiales de Inntermezzo) y ahonda en temas de actualidad con cierto regusto amargo y mucha crudeza. Contrasta con la simplicidad que se aborda al titular cada canción con una sola palabra.
A su vez su guitarra combina con la de Álvaro Cocina. Un guitarrista que me encanta. Se ha conseguido plasmar riff a riff, punteo a punteo, un trabajo muy variado. Las guitarras abrazan desde un sonido groove metal (su punto álgido en “Suplicio”), pasando por el metal (como es el caso de “Farmacia”), hasta llegar al hard rock con el que rematan "52HZ".
La base rítmica es muy potente con un Turo “Will” tan inspirado como inquieto.
Tenemos invitados, amigos, en algunos temas como son el inconfundible Ramón Lage en “Erase”, “Cuentos” e “Indolentes”, Quilo Zapico en Olimpo y la guitarra de Diego Riesgo en “Olimpo”.
Quizá los caminos de Inntermezzo se hayan bifurcado, pero hay todavía cuatro músicos con mucho que decir.
Una muy interesante despedida.
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