By Diego Rodríguez Liébanas.
Se suele utilizar el nombre de THE SWORD junto al de
bandas como Orange Goblin y High On Fire. Las tres han tenido el denominador
común a lo largo de su carrera de interpretar de forma similar el legado de los
primeros Sabbath incorporándose a territorio Stoner y Doom Metal desde la
circunvalación que nace de escuchar como posesos un disco angular como es el
Masters Of Reality. Los anteriores discos de los tejanos están construidos en
base a mil riffs que desprenden contundencia e intensidad, una base rítmica
pesada, un sonido gordo, guitarras rítmicas muy presentes y una cierta melodía
Heavy Metal.
¿Han dejado atrás todo esto con High Country? No. ¿Es
un disco con una propuesta musical diferente? Sí. Siguen estando los mismos
ingredientes antes citados pero los miembros de la banda se han cansado de
repetir receta por lo que están administrados en diferentes proporciones y aparecen
definitivamente otros nuevos que provocan que estemos sin duda ante uno de esos
discos que suponen un antes y un después en la carrera de una banda y que
provocan reacciones encontradas en sus seguidores. ¿Suena más a Hard Rock que a
Metal? Sí, pero no nos volvamos locos, tenemos a Thin Lizzy y Queens Of The
Stone Age, a las grandes bandas de Hard Rock americanas de los setenta como ZZ
Top, Grand Funk Railroad o Lynyrd Skynyrd.
Se abre el telón con Unicorn Farm que sirve para dejarnos claro a base de sintetizadores que el panorama que nos vamos a encontrar va a ser diferente. Le siguen Empty Temples y High Country, dos buenos temas que corroboran que la intención de este disco no es la de machacarnos la cabeza a base de riffs sino que propone una experiencia más tranquila. La voz de John Cronise y su forma de interpretar siempre me ha recordado a la de Rod Evans, primer cantante de Deep Purple, pero con las canciones y la producción de este disco el parecido se me antoja más acusado si cabe. Tenemos Blues como uno de los elementos más presentes en el álbum pero en esta ocasión no se encuentra únicamente revestido de distorsión sino que se presenta desnudo y a la vieja usanza como se puede observar a través de dos grandes temas como son Mist & Shadow y la también algo psicodélica Turned To Dust.
un resultado final casi sobresaliente
Agartha y Seriously Misterious van seguidos y son los dos temas más
diferentes del disco. El primero, instrumental, da rienda suelta a las
apetencias electrónicas de la banda a través de unos sintetizadores envolventes
que crean una atmósfera misteriosa que no hubiera estado nada mal que se
hubiera prolongado unos minutos más. La segunda, facilona y sugerente, es un
Electro Pop con un aire Country que funciona bastante bien convirtiéndose en
uno de los temas del disco. Puede pensarse que quince es un número excesivo de
canciones pero el álbum apenas sobrepasa los cincuenta minutos y los temas fluyen
una detrás de otra con total naturalidad como si formaran parte de un todo lo
cual supone uno de los puntos fuertes ya que conviven en perfecta sintonía un
abanico de temas bastante diferentes.
Con otra producción podrían estar en alguno de los
anteriores discos de la banda temas como Early
Snow, Buzzards o Ghost Eye a
través de los cuáles se nos administra cierta dosis de la agresividad y de los
riffs a los que THE SWORD nos tenía acostumbrados. Todo el álbum tiene un halo
especial pero The Dreamthieves se
lleva la palma destacando por encima del resto por su exquisitez y suavidad
siendo sencilla y llanamente perfecto. Los temas instrumentales como Suffer No Fools y Silver Petals, la primera más movida y la segunda acústica,
proliferan en el disco pero no sirven de relleno ya que además de tener miga y
estar muy bien elegida su posición contribuyen de forma determinante a que el disco
funcione como unidad. La última es The
Bees Of Spring… ¿Había alguna manera mejor de acabar que con una delicia
como esta? Blues tranquilo, suave y hermoso que me recuerda a lo mejor de los
Fleetwood Mac de Peter Green.
¿Obra maestra? ¿Disco de transición? ¿Intento
desesperado de subirse al carro del éxito de Clutch o Rival Sons? ¿Trabajo
fallido en el que pierden toda credibilidad? John Cronise asevera en una
entrevista "inevitablemente habrá gente a quien le gusta nuestro
material antiguo y que no valore positivamente este disco y habrá gente que le
guste este disco y no le llame la atención tanto lo anterior". Reconozco que
me encuentro entre el segundo grupo de personas pero a pesar de los grandes
temas que hay en el disco tengo la sensación de que no le han sacado todo el
jugo y que se han quedado a medias en la senda que han escogido pero meterse en
esa labor quizá hubiera descompensado un resultado final casi sobresaliente.