domingo, 26 de julio de 2015

ANIVERSARIO DE CONTRASTES . Viveiro 17.07.2015. RESURRECTION FEST. Crónica y fotos. Part 2/3.


Texto: Sonia M.
Fotos: Unai Calleja & Resurrection Fest.
Foto cabecera: Javier Bragado by Resurrection Fest.

Continuamos con la aventura RESURRECTION abordando el viernes. Antes de nada me gustaría aclarar el motivo del título "Aniversario de Contrastes". La décima edición del festival fue un aniversario cargado de contrastes tanto musicales como de organización (que iré comentando brevemente) y de gente que pululaba por ahí.


Mi jornada comenzó bien pronto, desde la primera banda con los barceloneses BLAZE OUT. Tenía ganas de verles porque su disco me gusta. Contaron con una buena cantidad de curiosos para las horas resacosas que eran. Me quedé un poco a medias entre el gustar y el no. Después vimos el final de INTOLERANCE en la carpa con un hardcore muy macarra y directo. Tras ellos los alemanes RISK IT! pusieron a tono la carpa. Se echaron en falta a muchos que piden tanto hardcore hasta la saciedad. Un concierto sencillo, directo y que animó un poco el cotarro. Hubo unos cuantos anima
dos en el pit y bailoteos varios.

BLAZE OUT

Luego bajamos las revoluciones en el Main con GET DEAD, tanto que me aburrí un poco y eso que lo que había escuchado de ellos me había motivado mucho, pero no me conquistaron en ese momento. 

La cosa se animó y de que manera con los locazos IRON REAGAN que pusieron patas arriba el escenario principal con bien de circle pits, mosh y mucho polvo en el aire. Desperté de golpe y me dejé llevar sin piedad por los ritmos crossoveros de los americanos. Mucha tralla. Una de las bandas del día para mi. Provocadores, irreverentes y muy divertidos.

Tras ellos en el Chaos Stage más caña thrasher con DR. LIVING DEAD. Una pena lo de los suecos que no dieron pie con bola por los problemas de sonido aunque no dejaron de darlo todo en el escenario. Unos profesionales hasta el final. Esos problemas acabaron desquiciándolos, sobre todo a su cantante Dr. Mania que acabó por lanzar con rabia e indignado el micro con fuerza al suelo del escenario. No fue su día, al menos a mi no me convencieron como esperaba pero sí que conectaron con el público que no dejó de moverse y liarla. Anécdota aparte tuvieron una breve colaboración por parte de Guillermo Izquierdo de ANGELUS APATRIDA. Fugaz y concisa.

DR. LIVING DEAD

KADAVAR me sorprendieron gratamente en el Main Stage. Barbas, pelos largos, ropas de muchos años atrás y una música elegante y bien ejecutada, con mucho sentimiento. Este tipo de sonidos no son mis predilectos pero la verdad que disfruté de su concierto y les aplaudí como la que más. Aquí encontramos uno de esos grandes contrastes que os comentaba, con bandas así en medio de toda la locura de pits, mosh y violent dance entre otras cosas.

TOXIC HOLOCAUST eran los siguientes en mi lista. Venía cargada de thrash metal a rabiar. El día así estaba planificado, y creo que pasó factura ya que no pude disfrutar de estas bandas quizás como si hubiesen estado mejor repartidas en los días o no tan seguidos. Aún así el speed/black/thrash de estos americanos fue otra de las liadas grandes en el Chaos Stage. Gustaron mucho y la liaron otro tanto.

Tiempo de cena y despeje de neuronas mientras escuchábamos a BACKYARD BABIES de fondo y echábamos un ojo por la pantalla. Aquí aprovecharé para comentar que eché muchísimo en falta más papeleras. Prácticamente sólo había las del propio parque en la zona del circle meal y unos contenedores apartados, pero nada más. En el resto del recinto brillaron por su ausencia. A ver, la gente no es cerda (los habrá) pero muchos no dejábamos de mirar por papeleras por si nos llevábamos la cena para ver mientras un concierto plácidamente sentados. Es algo que tiene fácil solución e impedirá que se acumule tanta basura en el propio recinto de conciertos.

Foto: Rubén Navarro  by Resurrection Fest.

Y después de recuperar fuerzas a lo speed metal, al Chaos de nuevo para ver a unos clásicos, D.R.I. Un gustazo, con temas directos y sin medias tintas, liándose bien en el mosh, unas montoneras de infarto y alguno que salió hasta volando. Mucho gimnasio hacía falta para aventurarse en ese agujero negro. Su carismático bajo Harald Oimoen no dejó de animar y gesticular al público que no hacia más que volverse literalmente loco. Se les tenía muchas ganas después de su caída del cartel hace unos años. Solo puedo decir: ¡¡POR FIN!!

Se notaba que llegaba el plato fuerte de la noche porque en la zona del Main Stage no cabía un alma, tanto que nos tocó quedarnos a mitad al lado de la pantalla para poder ver algo en condiciones e intuir en la distancia. Sí, MOTORHEAD. A ver, soy realista y no esperaba más de lo que vi. No soy de las que echo pestes de ello. Me siento afortunada de haber visto a la banda bien, aunque sea en estas circunstancias. Es lo que hay, y nadie esperaba milagros. A Lemmy se le veía muy mal, mirada perdida, muy cansado y agotado, e hizo bastante a mi parecer, hasta se animó a hablar un poco al finalizar algunos temas. A mi me vale, ahora sí. No fue tan malo, a mi me gustó y el setlist estuvo muy bien. Lo que me sobró un poco fueron los sendos solos de guitarra y batería, aunque entiendo que son necesarios por Lemmy. Estoy segura que en tiempos mejores hubiesen ido a saco en la hora que tenían para tocar. Dicho esto, Lemmy seguirá ahí arriba hasta que se muera, es su vida.

MOTÖRHEAD. Foto: Rubén Navarro by Resurrection Fest.

Uno de los puntos positivos de esta edición que se repitió el año pasado fue colocar la pantalla en medio, mucha gente se sentó ahí a verlo. Eso si, se echó en falta muchas más pantallas, ya que era la única. Además que en varios conciertos se comenzó con retraso a emitir lo que estaba ocurriendo y muchos nos lo perdimos porque era imposible hacerlo mirando directamente al escenario. En la última entrega abordaré los otros puntos que me quedan respecto a baños, bebidas y demás. Aquí quedan ya reflejados el tema papeleras y pantallas.

NUCLEAR ASSAULT, otro de los platos fuertes la liaron bien en el Chaos Stage. Me encantaron. Había descansado un poco la mente de tanto thrash metal y sentaron muy bien. Un pepinazo de concierto. A pesar de los primeros problemas de sonido, luego aquello fue como la seda aunque no hubo mucho movimiento en el pit. Ya las fuerzas iban fallando.

CHILDREN OF BODOM petaron el escenario principal y la parte del concierto que les vi me encantó. Clásico tras clásico y cera bien repartida. Lo demás no lo recuerdo por desgracia porque caí rendida en el césped de Viveiro en lo que se viene a conocer como una amable siestecita porque no podía más con mi alma.

IN FLAMES. Foto: Javier Bragado by Resurrection Fest.

Justo cuando terminaba mis compañeros de aventuras me despertaron y fuimos a ver de lejos a TERROR en la carpa donde no cabía un alfiler. Hay que decir que esta banda lo peta, pero que sin su cantante no fue lo mismo, aunque no quiero decir que fuera malo. A mi personalmente no me emocionó mucho, además que tener que estar estirando el cuello todo el rato para ver una cabeza me desanimó bastante. Eso sí, si algo define a esta banda es ACTITUD. Otra vez será y en mejores condiciones.

Cerramos el día con una banda que ansiaba ver, IN FLAMES. Y fue una soberana decepción. Sonido estupendo, espectáculo de diez, pero el resto fue insulso, a mi me faltó ahí alma, además de que el setlist me dejó fría. No es por ser de una época u otra. Soy de las que piensa que si lo repartes bien no tiene porque ser mal concierto. Me dejaron entre cabreada, decepcionada y etc. Y eso de tocarse una canción lenta como que sobraba mucho. Si cuentas con más tiempo lo entiendo pero si cuentas con apenas una hora tienes que ir a morir. Lo único que me pareció reseñable fue que en la última canción, Take this Life, una de mis favoritas que ni disfruté, subieron a un chico del público que básicamente la cantó él entera junto a la banda. Sé que a muchos les fliparon, y me alegro, ojalá me hubiese ido a dormir con esa sensación.

TO BE CONTINUED!!

© Diario de un Metalhead 2015.