martes, 28 de enero de 2020

SONS OF APOLLO: MMXX (Inside Out, 2019) USA.


Por Larry Runner.

No diré que estuviese hambriento de un nuevo disco de Sons Of Apollo porque tampoco era eso, pero a nadie le amarga un dulce, así que si tienen material nuevo, pues genial. Y es que desde su irrupción en 2017 con aquel “Psychotic Symphony” los he tenido en mi mente. Aquel fue un disco que a pesar de haberme llegado en descarga sentí la imperiosa necesidad de tenerlo en físico y en edición limitada. Desde entonces no se han separado de mí.

Ahora, cuando aún no había terminado de digerir su “Live With Plovdiv Psychotic Symphony” vuelven con más material nuevo, con este “MMXX” que estoy seguro tendrá un largo recorrido conmigo en este año que acaba de comenzar.

Y es que tengo que decir que si me gustaba su álbum debut, este lo hace aún más. Me gusta más porque “MMXX” lleva una línea más dura, más heavy, y sí, vale que es metal progresivo, pero viene cargado de feeling, de alma, no es un disco de canciones aburridas e inertes. Es un álbum divertido, donde evidentemente no faltan las demostraciones virtuosas por todos y cada uno de los instrumentistas, pero aquí hay canciones.

Desde la inicial “Goodbye Divinity”, un tema que se va más allá de los siete minutos pero que aún así se hace corto, sabes que vas a estar ante un gran disco. Desde el primer acorde se respira calidad, sonidazo e intensidad. La segunda es “Wither To Black” es aún más heavy, con un intenso riff -inmenso “Bumblefoot” en todo el álbum- que te invita a subir el volumen en otra canción que Jeff Scott Soto canta más que sobrado. Y es que si por algo me atrae esta banda es por tener en su line-up a uno de mis cantantes favoritos, aunque bien es verdad que el que esté a las teclas mi favorito Derek Sherinian es otro factor importante.


“MMXX” viene como digo más intenso y heavy que su predecesor. Más duro, menos hard rock y más metal. “Asphyxiaton”, cargada de groove es la tercera, con un Mike Pornoy a al batería que, como en todo el álbum, lo goza. Y es que el mago de los tambores está sobresaliente en todo el disco, como no podía ser de otra forma, tocando probablemente siempre más de lo que la canción necesita. Pero con él nunca es mucho.


“Desolate July” es una maravilla que da comienzo con piano y teclas de Sherinian. Una preciosa balada, donde Ron “Bumblefoot” se coloca al servicio de la canción de forma sobresaliente, como pasa con todas. Adiós a los lucimientos absurdos del primer álbum. No es que los instrumentistas se estén guardando nada, pero no hacen temas por hacer. Las canciones son casi magia y la compenetración parece absoluta. Que el primer tour les llevase a 83 ciudades distintas seguro que algo tiene que ver. “King of Delusion” entra sin que te des cuenta. Otra que comienza con el piano de Sherinian para al contrario que en su predecesora pasar luego por una fase densa de poderoso sonido. Vuelta de Sherinian y luego al final otra vez caña, con presencia también de sonido Hammond.


“Fall to Ascend” está más cerca de su disco debut que el resto de temas, tirando un poco más al hard rock. “Resurrection Day” es una auténtica maravilla y un tema que no puedo dejar de escuchar. Tira de riff pegadizo, de esos que penetra en tu cabeza y ya no sale, contando además con un muy buen estribillo, algo que no es exclusivo de este corte, pues a nivel de estribillos este disco es también superior a su predecesor. La parte instrumental central es apasionante.


Cierran con “New World Today”, un tema de casi dieciséis minutos similar al “Labyrinth” o al “Opus Maximus” del primer disco y que incluye unos momentos instrumentales realmente deslumbrantes, con todos los miembros gozando de momentos de protagonismo.


Portnoy, Sherinian y Bumblefoot fueron los primeros en arrancar a nivel de composición ya hace un año. “The Del Fuvio Brothers” fueron los encargados de la grabación, como ya sucediera en su álbum debut, o lo que es lo mismo,Ron Thal, Portnoy y Sherinian, pues ese es el pseudónimo que se gastan. Aunque una vez más el toque final fue de Jay Ruston, que se encargó de la mezcla. Thomas Ewerhard firma la portada.


En definitiva, un discazo y la primera gran obra que me encuentro en este 2020. Un grandísimo álbum muy superior a su predecesor a nivel compositivo, con muy buenas canciones sin que por ello hayan dejado de lucirse una y otra vez a nivel instrumental.

Genios.


Tracklisting:
1 - Goodbye Divinity (07:15)
2 - Wither To Black (04:44)
3 - Asphyxiation (05:07)
4 - Desolate July (05:58)
5 - King Of Delusion (08:48)
6 - Fall To Ascend (05:06)
7 - Resurrection Day (05:51)
8 - New World Today (15:50)

Line-up:
Mike Portnoy – drums and vocals
Derek Sherinian – keyboards
Billy Sheehan – bass
Ron “Bumblefoot” Thal – guitar and vocals
Jeff Scott Soto – vocals

Discografía:
2017 – Psychotic Symphony
2019 – Live With The Plovdiv Psychotic Symphony
2020 – MMXX








© Diario de un Metalhead 2020. 

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