Por fin, tenemos una nueva edición de Rockv… un segundo. No. Acaba de nacer el festival Monorock Fest en Corvera. Lo organiza la misma gente, y tienen una misión: enriquecer la programación del Teatro el Llar (Corvera).
Llegué a este viernes agotado, no precisamente afónico, por mi primera participación en el programa de mi jefe, Larry Runner. Ya se está sopesando darnos una sección al Vieyu y a mí. Si hubieran dicho, entonces, que iba a llegar a casa a las 3 de la mañana… Eso es que no se dio mal la noche.
Lo primero aclarar que la gente que lleva el Rockvera decidió ampliar las posibilidades del festival con un evento más comedido. Incluso no llevando todo el trabajo que lleva un Rockvera en toda su magnitud, no es una tarea nada fácil.
Casi tan importante como el festival, eran las actividades paralelas. Teníamos una exposición de José Ángel Muñiz (Heavy Metal Brigade) Y Felipe S.M (fotógrafo oficial del festival y Keep the Flame).
Sobre las 19:00 se interrumpieron las pruebas de sonido, que habían empezado el día anterior. Ya antes de acceder al recinto del Llar teníamos una visión de ambos fotógrafos de la escena asturiana del pasado año en forma de exposición fotográfica.
Felipe está más habituado a estas cosas. José estaba más emocionado. Pudimos estar todos juntos un rato socializando antes de acceder a la mesa.
En el propio Llar plantaron la mesa, ubicada al pie de la zona de butacas.
Los moderadores (moderación, ¡qué palabra tan extraña en estos tiempos!) fueron los Piratas de Libertalia (nuestro Metalovisión de la tierrina, simplificando cabronamente, ya que todavía no han hecho un video con una lista de 11 grupos que empiecen por A) y que forman parte de la organización del festival.
Habrá un video completo de esta charla. Esto me temo que no deja de ser un mal resumen.
La mesa estaba conformada por el ya mentado Felipe, con uno los medios más longevos de la escena asturiana y, curiosamente, el más joven de los invitados. Con toda esa perspectiva aportó ideas para recuperar el interés del público y acercarse a una nueva generación, como adaptarse a los nuevos tiempos c con las retransmisiones en vivo. Otro de los contertulios era Dani G. (Darksun, Last Days of Edén y FOH de tantas bandas que llenaríamos esta crónica). Dani aportaría una perspectiva global (nunca mejor dicho), más allá de hablarnos de su tour gastronómico por el mundo o de cómo enseña palabras en asturiano allá donde va.
Lady Ani (LDOE) también aportó ideas para recuperar (yo diría siempre paliar) el tema de la asistencia (falta de asistencia) a conciertos. Una de ellas, fue la de que los músicos acudan a conciertos de otros músicos.
Pablo García no necesita presentación. Me parece incluso más importante que su gran calidad como guitarrista y su trabajo en WarCry su labor formando gente, que ya lleva tiempo alimentando nuevas formaciones de música asturiana. Pablo es la encarnación de la prudencia, a pesar de que ha leído de todo (habló de ello) en las redes sociales. No digo que sea inmune a ciertos comentarios y publicaciones. Me dio mucho en lo que pensar: Grunge Progresivo.
Naves (HMB) con más de cien conciertos a sus espaldas este año y otras tantas crónicas. Habló de tendencias de los medios, del cambio generacional que ha observado este año en cuanto a los espectadores de conciertos furto de esas nuevas bandas que se promocionan por Redes Sociales atrayendo a público joven, algo que no ocurre con las bandas de la “vieja guardia”.
Me faltaba Rheme Peláez (una pena que no pudiera venir). Hubiera aportado otra visión de la escena asturiana. Me pareció una mesa orientada excesivamente al heavy (no, no es una queja).
Hubo un público participativo, bastante atento. Habría sido interesante emitirlo en directo, pero imagino las dificultades.
En cuanto acabó la charla, continuaron hasta las 22:00 las pruebas de sonido de Azure. Luego darían una buena sorpresa y mostrarían el resultado de todo aquello.
Sobre el cartel de esta noche. Lo cierto es que no me emocionaba. Si me atuviera, solamente a eso, no habría venido. Valoré más cosas. Va a ser verdad lo que dijo Pablo García sobre que los gustos propios condicionan las crónicas y las críticas de discos. No me impidió llevar una muy buena impresión de Azure u Ofensivos (sino, no me habría quedado a verlos hasta el final). A Ochobre ya los había visto en Premios Amas y sabía que no iban a tener problema en encender el Llar.
Hay conciertos en los que no me muevo de la primera fila y me voy sin saludar, o ver a nadie. Creo que jamás había “socializado” tanto como en este Monorock.
Azure |
Prácticamente a oscuras salieron los músicos de Azure. La oscuridad, esas tenues luces rojas y azules acompañadas de humo, forman parte de la experiencia inmersiva en su música. Me comentaron que en sala la luz acompañaba incluso menos.
Abren con “Hielo Sumergido”, el único tema no instrumental que vimos en su interpretación. Dibujaron con su sonido emociones, lugares… Cinco temas largos de estos músicos avilesinos, con interpretaciones de gran nivel con un hipnótico post rock.
Con “Amor Fati” vino esa pequeña sorpresa. Un montón de pequeños percursionistas de la Fábrica de Músicos salieron al escenario, dotando de gran intensidad el tema. Y remataron con “Enkarateia”.
Ochobre |
Ochobre llegó y nos hizo salir del trance anterior. Su punk rock en asturiano, obvio contraste con lo anterior (una máxima en la que se mueve la gente de Rockvera) nos trajo un chute energía. Una música rabiosa y reivindicativa, como tiene que ser. Con Raquel Alonso como frontwoman no tuvieron peligro de quedarse cortos.
La gaita de Natalia González da un toque folk, pero siguen teniendo un sonido muy afilado, con mucha personalidad.
Cuenta con Viti Redondo (curiosamente coincidí con él en la Academia de Pablo García, más concretamente, en alguna “audición”). Un guitarrista que alimentaba a dos bandas esta noche. Se ejemplifica aquí el tema de la cantera asturiana.
Tienen un larga duración de 2018 “Sobredosis de Grisú”, y su material más reciente es un EP de 2021 llamado “Autodefensa, Muyer”, cuando Raquel se incorporó como vocalista a la banda.
Lo de Ofensivos no tiene nombre. Pregunté, previamente, a Juanjo (Noche de Lobos) a qué sonaba la banda. Me vino a decir algo así como “Def Con Dos”. ¿Rap metal punk? En ese momento, se me vino el cielo encima.
Esta noche era una prueba de fuego para la banda, una nueva etapa. Tras muchos cambios que implicaban a Pablo Viña en la batería, al propio Viti, a Fran como frontman junto con Ángel. A lo que hay que sumar, un quinto miembro, Java Sánchez a los mandos del sonido.
¿El padre Eusebio?, su bajista, vestido de cura empezó a arrastrar a los músicos, vestidos de comunión, al escenario.
Ofensivos |
Un insolente Casio dio paso a los “Guajes”. Uno de los dos temas en que participan dos guitarristas. “Perdón x el retraso”.
Sonaba todo muy gordo, muy heavy. Viña le daba de forma muy contundente a la batería. Mi lado True se vio complacido, acabaron dinamitando todos mis prejuicios. Aun así, pensaba que el cansancio haría mella en mi y me retiraría a la primera de cambio.
Tuvimos lucha de escobillas, fútbol… a un recuperado Kike Collado como invitado “especial” de la banda.
Y con “Violencia infantil” acabó todo. Momento de despedidas.
Gracias a la gente de la organización por todas las facilidades. Esperamos nuevas ediciones de este Monorock Fest y de su hermano mayor, Rockvera.
Gracias Rheme por ponerme al día con las bandas y a los Titos por ayudarme a recordar algunos momentos de la charla.
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