By Larry Runner.
El disco más esperado de BELLAKO ya está aquí. Sí, el más esperado, porque es ahora cuando se han dado de conocer, de verdad, fuera de Catalunya. Es ahora cuando se han dado a conocer con fuerza, tras haber girado con Crisix un huevo de fechas, un tour que, sinceramente, creo que les va a ser más que productivo.
Y es que en estos tiempos que padecemos en los que la música está a tiro de click, la única forma de que te presten atención de verdad, o al menos la más efectiva, es haciendo kilómetros, juntarte a otra banda a la altura de tus posibilidades que sabes que va a mover gente y ganarte cada noche a un puñado de fieles. Ofrecer lo mejor de ti mismo sobre las tablas y también al bajarte en forma de fotos, autógrafos y regalando “púas a los pesaos” que diría Valseca.
Esa parte la han cubierto con creces y pronto volverán a salir a la carretera, ahora aún más si cabe, con la nueva agencia Atlas apostando por ellos. ¿Qué les faltaba para poder apostar fuerte? Un disco que lo petara, que estuviera a la altura de lo mucho y bueno que el grupo ofrece en vivo. Pues bien, ya está aquí, se titula Extinction.
¿Qué encontramos? Pues mucho y muy bueno. Un disco sobresaliente de crossover, donde encontramos toda la agresividad del hardcore, la destreza del metal y la chulería del punk. Todo ello en un mismo álbum con once cortes de recorrido.
Su música tiene mucho de metal, eso es lo que me gustó de ellos cuando los vi por primera y hasta ahora única vez en Oviedo y tranquilo, no te vas a salir de la carretera del metal por escucharlos, vienen “con GPS”.
Se lo montan en castellano con mucho de thrash y de death en su ADN. Abre El Nieto, contundente, veloz y metálica. Con más de headbanging que de pogo, directa al esfínter (cuando la escuches sabrás el porqué de esta afirmación). Le sigue Manos Arriba, muy metálica. ¿O debería decir Metallica? El comienzo es matador.
Los temas son directos, como una patada en la boca, y muy muy metal, gracias a los ritmos impuestos desde la batería de Carlos, donde encuentras mucha actitud death por momentos y donde si hay que tirar de doble bombo, pues se tira. Las guitarras engancharán a los más heavies.
Rober a la voz tira de todo tipo de recursos, con mucho de heavy y de hardcore, pero sin hacerle ascos a nada, tomando registros hasta del brutal death cuando los temas lo requieren y consiguiendo con su trabajo que el disco no sea nunca repetitivo a pesar de que el crossover lo suele ser. Además se ve acompañado en algunos temas de algunos amigos todos muy grandes en lo suyo, lo cual amplía las miras del disco y lo hace sumamente entretenido y consigue la sensación de que el álbum se pase más que volado. Toma nota de los colaboradores que aparecen: Sagan (Ummo), Bezpalov, Juli Baz (Crisix) y Adriá (Crim). Lo dicho, buenas compañías.
Le das al play y te lo comes sin que te de ni tiempo a pensar. En menos que canta un gallo estás en Has Venido y cabeceando o botando por el salón con la música a toda hostia, habiendo pasado hasta por el hip-hop. Los textos se entienden más que bien, pero si no lo pillas, en el libreto vienen las letras, reivindicativas a veces y vomitando mala hostia siempre.
THC se ha convertido en himno desde ya. Cantada en catalán, inglés y castellano, es todo un puntazo, como lo es Extinction que da título al álbum y que en menos de tres minutos desprende más energía que el 80% de los discos de estilo similar que pululan por ahí. 420 es otro corte especial. Una instrumental melodiosa no exenta de energía que me guardo porque puede dar mucho juego en la radio. Llega justo antes de Posesión/Obsesión, que comienza como canción de amor y acaba en desastre.
En definitiva 27 minutos de diversión como pocas encontrarás viniendo de una gente tan joven. Tras escucharlo varias veces estos días de atrás, tengo que decir que me siento un elegido apareciendo por un instante en el video de THC. Bendecido.
"Tú lo sientes" gritan. Si te lo pones y no lo sientes, es que tus venas no llevan sangre.
"Tú lo sientes" gritan. Si te lo pones y no lo sientes, es que tus venas no llevan sangre.
Ojalá triunfen como parecen merecer. Ojalá Extinction sea el comienzo de algo realmente grande y los convierta en referencia. La llama está encendida. ¡Que no se extinga!
A la venta el 27 de septiembre, el día que se cumplen 30 años de la muerte de Cliff Burton. Más metal aún!
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