📝 Jorge López Novales.
En esta edición de 2023 teníamos once bandas que abarcaban desde un metal con cierto regusto punk como puede ser Nuevecondiez, pasando por el power metal de “Sylvania” y Dünedain, el thrash de Angelus Apatrida, el metal alternativo de Sôber o el metalcore de Teksuo y As Life Burns. También tuvimos un poco de folk metal por parte de Celtibeerian, sin olvidarnos de los amantes del metal extremo con bandas como Aneuma, Bonecarver y Murmur. La verdad es que era un cartel muy variado, con algo más de trece horas de música por delante.
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| Nuevecondiez |
Fue llegar a Pola de Laviana sobre las dos de la tarde y acceder al recinto. Empezó Nuevecondiez con un volumen exagerado. De primeras, no parecían muy cómodos, porque al parecer algunas bandas tuvieron problemas para escucharse. La banda sonó muy contundente con ese híbrido metal punk con profundidad en sus letras, en la rasgada voz de Fran Rubio. Fueron a por todas con siete hits sacados de sus dos discos.
“Tarde”, con el doble bombo de Marco (ex-Avalanch) acompañado por la dupla de Eneko Ramos y Fran Jiménez a la guitarra y el bajo de Ismael Rodríguez, sonó más potente que nunca y cerraron con la intensa “Bala perdida”.
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| Murmur |
Con cambios rápidos y un calor inaudito (misma tónica que la edición anterior) por estas fechas en Asturias, llegó el turno de los madrileños Murmur. Las tres de la tarde puede que no fuera un buen momento para sumergirnos en la atmósfera de un sonido Death Metal con toques Doom y Black lleno de complejidad. Venían a Asturias a mostrarnos su primer trabajo “Pvtrefactio” (2022). Consiguieron dar un buen concierto, pese a los ya aludidos problemas de sonido y el hecho de que Beatriz Benett tenía el sol de cara, algo realmente molesto en un escenario. Fueron ganando tema a tema, y consiguieron que fuera al puesto de merch a comprar su disco.
La tercera banda fueron los valencianos Sylvania. Su primera visita a Asturias fue en 2019 y desde entonces la formación ha sufrido varios cambios. Para suplir al vocalista Alfonso Arróniz entró en la banda Alberto Symon, y Sergio Garay (a quién veríamos también en Celtibeerian) pasó a ser segundo guitarra. Sonaron muy bien temas como “Luna quebrada” o “La princesa prometida”. Fue una lástima que su concierto durara media hora. Nos dejaron con ganas de más, tras “Vivo en tu memoria”.
Tengo muchas ganas de que saquen su “Purgatorium” y de volver a verlos pronto por Asturias.
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| Teksuo |
Tras un nuevo cambio llegan los asturianos Teksuo. Su metalcore se mueve entre dos extremos aparentemente opuestos, uno que tiende a lo más melódico y otro a lo más agresivo. Jugaban hoy en casa y desde el primer acorde de “Forever endless”, tema con el que arrancaron, consiguieron movilizar a su público haciendo que apareciesen los primeros circle pit de la jornada. “Natural born liars” y “Holes” cerraron su intervención.
La banda tiene todos los ingredientes para un mayor reconocimiento. Pocas voces tienen la versatilidad de Diego y tienen trabajos discográficos muy sólidos a sus espaldas.
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| Dunedain |
📝 Larry Runner.
Llegaba el turno de Dunedain. El sonido durante su concierto distó de ser el mejor de la jornada, pero pareció no importar a sus fieles. Son realmente increíbles, y con la cantidad de grupos que hay girando por el país sin tener un cantante decente al frente, ellos se permiten el lujo de tener a dos. Y es que tanto Carlos Sanz como Tony Delgado son unos excelentes vocalistas. Pero sin duda el que mostró ser un animal de escenario fue Alberto Pérez, su bajista, capaz de contagiar a cualquiera y meterte en el concierto de su banda. Le ves disfrutar y acabas haciéndolo con él. Pero hay que reconocer que es muy fácil con esas canciones tan brillantes. Nos hartamos de cantar, porque si hay un grupo que invite a ello esos son Dunedain.
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| Sober |
Sober eran los siguientes, cuando aún lucía el sol salía a escena una de las estrellas del cartel. Nunca he sido muy fan suyo, y bromeaba al respecto con mi amiga Ana que sí lo es de los madrileños. Pero … salen con “Sombras” y me cierran la boca. Un fantástico sonido y un saber estar increíble sobre el escenario que me acaba absorbiendo. Profesionales como la copa de un pino me llegan a dar la sensación de que seguro que un bolo suyo flojo, si es que lo puede ser, es mejor que algunos muy buenos de otros. Si además eres capaz de disfrutar de momentos mágicos como cuando suena “Arrepentido”, pues lo tienes. Lección de saber estar de una banda grande. Cuando uno es cabeza de cartel, lo es por algo.
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| Celtibeerian |
Celtibeerian pagaron el pato de salir tras la avalancha Sober y justo antes de Angelus Apatrida. Un buen horario siempre que no te hagan el bocadillo entre dos cabezas de cartel, que fue lo que les pasó a ellos. El público se mostró con los folkis más frío de lo que cabría esperar, algo que llegó a mosquear a Gus Infantes, que se cansó de intentar encender al público sin lograrlo del todo. Había visto a Celtibeerian en Oviedo hace unos años y la fiesta había sido total. Esta vez la gente se lo puso difícil. Fue una faena verse entre los dos cabezas de cartel, más aún teniendo en cuenta que salieron a eso de las diez de la noche, un horario que muchos vieron como el momento propicio para acercarse a reponer fuerzas a los foodtrucks situados en el otro extremo del recinto. De su show me quedaría con la actitud y el buen hacer de Dagda, que sin duda fue el más ovacionado y el que más logró conectar con la audiencia. A pesar de la fría respuesta del público, no dejaron de intentarlo y acabaron logrando conectar con “Looking for Beer”. Por fin aparecieron los empujones y los bailoteos, aunque fuera muy tarde. Sin duda tendrán días mejores. Ahora Asturias les debe una.
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| Angelus Apatrida |
Angelus Apatrida actuaban por última vez fuera de casa en su gira del homónimo álbum. Un tour que ya había pasado por la región en repetidas ocasiones y que cerrarían días más tarde en La Gineta ante los suyos. No nos iban a traer nada nuevo, o al menos no lo esperábamos, pero aún así, nadie se lo quiso perder. Ellos disfrutaron del público más entregado de la jornada. Su sonido, que empezó siendo muy farfullero en los dos primeros temas, pronto mejoró para engancharnos. Algunos nos volvimos literalmente locos con ellos. Por mi parte la histeria fue tal que me olvidé por completo de sacar del bolsillo la libreta que me acompañaba para tomar notas. ¿Quién se va a parar a apuntar nada cuando no paran de sonar himnos? A disfrutar y a darse empujones como si fueras un chaval. Desde “Bleed the crown” y con canciones como “Indoctrinate”, no hay momentos para la relajación. Sudan ellos y lo haces tú si te dejas llevar. Si amas el thrash, les amas a ellos. Volverán a Asturias en diciembre, ya con el nuevo “Aftermath” bajo el brazo. Contamos los días.
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| As Life Burns |
Ya es mala suerte tirarse todo el día trabajando en el festival, dejándote el alma para que todo salga bien y que la historia se vaya al traste cuando te toca a ti subir al escenario. Es lo que le pasó a Mikel, frontman, líder y padre de la banda local de metalcore As Life Burns y que es también el principal impulsor del festival. Problemas técnicos hicieron que la banda saliera tardísimo al escenario, al principio incluso sin bajista. El caos propició que observáramos caras de disgusto sobre todo en sus dos jóvenes guitarristas. Para no trastocar los horarios acortaron su repertorio, que se vio reducido a apenas cuatro canciones que no sirven en absoluto para calificar su actuación. Tendrán noches mejores sin duda alguna y esperemos que una de ellas sea la de quitarse la espina clavada en el corazón en la que debería haber sido su noche. A la fuerza han de estar en el Karmafest 2024. El detalle de no trastocar nada en beneficio propio debe ser premiado. Pronto celebrarán en Oviedo su 15 aniversario. Quizás sea un buen momento para olvidar el mal trago.
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| Bonecarver |
Bonecarver fueron los más intensos de la noche. La nueva versión de aquellos Cannibal Granpa que yo conocí gracias a su presencia en una final de la Metal Battle suena más intensa a la par que sofisticada. Fondos orquestales y durísimos y potentes rasgados de cuerdas para una orgía de gruñidos y pig squeal agotadora para oídos poco acostumbrados pero que hizo las delicias de todos aquellos que se acercaban a esas horas aún a las primeras filas. Y es que tras la finalización del concierto de Angelus Apatrida muchos ya comenzaron a desfilar camino de sus casas y se notó. Eso y el frío, claro, porque el nuevo recinto del Karmafest es maravilloso, pero está al lado de un río y la noche fue castigadora, más teniendo en cuenta que la mañana y la tarde habían sido soleadas y calurosas. El cambio de temperatura fue abrumador.
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| Aneuma |
Aneuma son una de las bandas del momento en Asturias. Con sólo un disco, “Climax”, han logrado darse a conocer y colarse en las finales de todos aquellos concursos en los que han participado. Finalistas del Oviedo Rock, llegar a la final de FestiAMAS les ha sacado en televisión en repetidas ocasiones. A ellos hay que sumarle el éxito en la Metal Battle de Wacken, que les llevó a actuar en el mejor festival de Metal del Mundo. Allí quedaron segundos sólo por detrás de los representantes de Japón, pero su música llamó poderosamente la atención de los responsables de Waken TV, que incluso utilizaron su tema “Fall Apart” para dos de sus videos post festival. Cerraron el Karma con treinta y cinco minutos de buena música y de buen sonido en los que ofrecieron el repertorio ejecutado en Wacken y un par de covers de Death y Carcass para dejar un muy buen sabor de boca y que los valientes que aguantaron el cansancio y el frío hasta el final salieran felices de un Prau La Chalana que esperemos nos vuelva a recibir de la misma manera en 2024. Y es que sin duda alguna fue el mejor cierre para el verano asturiano y una fiesta que no se quisieron perder ni los metalheads más ilustres de la región. Hasta WarCry estaban entre el público.
© Diario de un Metalhead 2023.
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