Por Jorge López Novales.
El pasado 17 de febrero se presentó el anuario amas de la música asturiana 2022, en el que se recoge todo aquello que ocurrió con nuestra música en el pasado año, y la gala de los AMAS. Estaban presentes D. Pablo León Gasalla (Director General de Cultura y Patrimonio del Principado de Asturias), D ª. Julia María Martínez-Lombó Testa (Coordinadora del Anuario AMAS) y D. Geno Cuesta, miembro de la organización de los Premios Amas.
Mañana viernes a las 19:00 horas se entregarán en el teatro Filarmónica de Oviedo los premios AMAS 2022. Las 22 categorías que reconocen las trayectorias profesionales o los trabajos editados en 2022 lo decidirán los 109.321 votos efectivos recibidos. Pero los 3 AMAS de honor serán entregados al guitarrista Carlos Martagón, al percusionista Tino di Geraldo y a la librería Paradiso de Gijón.
En cuanto a lo del anuario se refiere.
Un año que prometía devolvernos a la situación pre pandemia y que finalmente, como podemos ver al leer sus páginas y compararla con aquello que se contaba en el anuario de 2019, se quedó en un amago.
Una ansiada normalidad que como nos recordaba la coordinadora del anuario no ha llegado y que se refleja en el número de discos publicados, menor en todas las escenas y coma todavía más coma en la música en directo.
Pese a que este año se ha podido recuperar la categoría mejor directo en los Premios AMAS la situación ha sido un tanto especial. Y es que, si nos alejamos del éxito de los festivales, hemos asistido a un año lleno de aplazamientos y cancelaciones. Motivos logísticos que, aunque en varios casos se debieron a que alguno de los miembros de la banda en cuestión se encontraba convaleciente de COVID, la razón de fondo fue en gran parte de las ocasiones la escasa respuesta del público ante el aluvión de conciertos que existía. Y esta es otra de las características de 2022 que nos destacaban durante la presentación, era este el año en el que se recuperaban fechas pospuestas desde marzo de 2020. Festivales que tras 2 años de aplazamientos y cancelaciones se habían reprogramado, convivían con los conciertos de aquellas bandas que por fin se lanzaban a la carretera para presentar esos trabajos guardados desde 2020 y 2021. A esto tendríamos que añadir con las novedades del año que también las hubo.
La coordinadora nos desglosaría el número de discos editados en cada categoría, comparándolo con el año precedente. Destacaba que tan solo la escena jazz ha perdido publicaciones y es que, si en 2021 se habían editado 4 discos, este año sólo contamos con uno.
A esta publicación hemos de añadir los 46 discos de rock, 7 de folk, dos de escena clásica y 30 correspondientes a otras escenas. 9 referencias en música electrónica y 6 en escena urbana. Se destacaba a sí mismo el hecho de que Asturias continúa siendo una región eminentemente rockera, ya que esta es una escena en la que el número de publicaciones es mucho muy superior al resto y es que de los 30 discos publicados en la categoría de otras escenas se incluyen géneros tan variopintos como el pop o el indie.
El anuario de este año continúa la línea editorial iniciada, en la que se van sumando contenidos y aumentando las secciones en cada nueva edición. En esta se incluye un reportaje de opinión sobre la situación actual en lo que ya se denomina la era post pandemia y que está firmado por Sara González aportando una visión desde dentro de la propia programación y realización de conciertos. Hoy se mantienen asimismo las secciones habituales con los colaboradores que venían trabajando con premios AMAS a lo largo de los últimos años con la excepción de la Escena Clásica cuya redacción corre ahora a cargo de Jonathan Mallada.
Nuestros colegas de Noche de Lobos siguen firmando la escena rock. Sara además del reportaje de opinión nos presenta todo aquello que aconteció en la música asturiana a lo largo de 2022 mientras que Juanjo se ocupa de las reseñas discográficas.
La presentación concluyó con un deseo que se vaya equilibrando la situación entre oferta y demanda y que este sea por fin el último año en el que el anuario recoja las consecuencias de la COVID.
© Diario de un Metalhead 2023.
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