Comenzaba la última jornada del Hellfest y por fin apareció la temible tromba de agua de cada año. Lo bueno es que esta vez fue el último día, y además lo hizo durante la mañana hasta casi las tres de la tarde, con lo que retrasó nuestra hora de entrada, pero no afectó a nuestro planning en los bolos importantes del día. El recinto se vio muy poco afectado, así que se puede decir que este año nos libramos.
Entramos a las cuatro de la tarde para ver a HATEBREED en el Main sStage 1, que celebraban con un año de retraso el 20 aniversario de uno de sus discazos, el "Perseverance". El sonido no fue de lo más destacado del concierto, pero acabó mejorando y terminó con una calidad aceptable. Sea como fuere, con el setlist que llevaban y las ganas que les pusieron los de Jamey Jasta ya fue suficiente. Fue imposible no ponerse a cantar y dar caña durante todo el bolo…pocas melodías invItan tanto a volverse loco como las de Hatebreed. Cuidado con el setlist que se marcaron en 45 minutos: "To the threshold", "Destroy Everything", "Proven", "Live for this", "Tear it down", "In ashes they shall reap", "As diehard as they come", "This is now", "Perseverance" o "I will be Heard" con la que cerraron, fueron algunos de los temazos que sonaron. HATEBREED siempre es un buen subidón de adrenalina en directo.
Al terminar había la opción de ELECTRIC CALLBOY, que tomaron algunos compañeros, y HOLY MOSES, que fue la elegida por mí. Desde luego que ver en un Main Stage a ELECTRIC CALLBOY, siempre es diversión asegurada, pero ante la despedida de la banda Sabina Classen no tuve duda que tenía que acercarme al Altar Stage. El concierto no estuvo mal, sabes a lo que vas con HOLY MOSES, thrash alemán puro y duro. No fue el concierto del festival en esa carpa ni de cerca, pero es una banda que has visto tantas veces que te da un poco de pena su más que merecida retirada. El setlist recorrió lo que pudo de su discografía en sus cincuenta minutos de actuación, pero se detuvieron sobre todo en sus discos “Finished With the Dogs” y “The new machine of Lichtenstein”, con temas como "Def Con II", "Panic", "SSP", "Near Dark", "Undead dogs", "Finished with the dogs", "Life’s destroyer" o "Current death". Hasta siempre HOLY MOSES, una gran banda que siempre quedará en nuestro recuerdo.
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| Holy Moses |
De ahí me dirigí al punto de encuentro con el resto de compañeros para ver a AMON AMARTH. Tengo que decir que no acabamos el concierto, siguen soñando cañón, con un gran show, y siempre es una pasada oír la voz de ultratumba de Johan Hegg, pero es una banda que cada vez me aburre más. Me parece otra de las bandas que se están sumando al clan de las orquestas, con esos tiempos y esos coros tan machacones y tan parecidos todos entre sí. El nuevo metal está empezando a hacérseme mucha bola. "Guardians of Asgard", "Raven’s flight", "Heidrun", "Death in fire", "Put your back into de oar" y "The way of vikings" fueron los temas que escuchamos, y nos fuimos con los primeros acordes de "First kill". Se puede ver en el setlist como dejan muy de lado sus melodías del pasado para usar más las que mejor les van para el público de los festivales. Gran banda, gran directo, pero cada vez me dicen menos…
Una vez finalizado me fui con un colega a BENEDICTION, sabíamos que había confusión, pues se cayó a última hora INCUBUS y de los rumores de que lo harían CRISIX en su lugar, pero como estaba sin red en el móvil no pude enterarme bien de lo que estaba pasando. Si lo hubiéramos sabido seguro que hubiéramos compaginado ambos conciertos, pues aun viendo muchas más veces a CRISIX, la ocasión de verlos a esa hora en un Main Stage del Hellfest era única. Sea como fuere algunos compañeros que sí que los vieron me dijeron que dieron un bolazo y que el público estuvo moviéndose sin parar toda la hora de actuación de la que dispusieron. Me alegro mucho por ellos, se lo han currado de la hostia, y después de lo que pasó el año pasado cuando Carry no pudo viajar por enfermedad a tocar en el Hellfest 22, se merecían poder volver a demostrar lo mucho que valen sobre el escenario.
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| Benediction |
En cuanto a BENEDICTION, la banda procedente de Birmingham, liderados por Peter Rew y Darren Brokes, hicieron un bolo de los de reventar el tímpano. Para mi gusto se les fue la mano con el volumen un cacho largo, aunque a pesar de eso, los instrumentos iban más o menos bien por su sitio. A estas alturas de festival cada vez es más difícil que te muevan del sitio, son ya casi siete días fuera de casa y las fuerzas van fallando, pero además el setlist tampoco ayudaba, pues parece que venían a presentar su SCRIPTURES de 2020, con lo que la gran mayoría de los temas fueron de ese disco y pocos de sus grandes clásicos. Sonaron "Iterations", "Scriptures in scarlet", "Vision in the shroud", "Unfound mortality", "Nightfear", "I bow to none", "Agonised", "The grotesque", "Jumping at Shadows", "Subconscious Terror", "Foetus Noose" y "Stormcrow".
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| Tenacious D |
La siguiente parada era pillar sitio para el concierto de PANTERA en el Main 2, y desde allí ver lo que sucedía en el Main Stage 1, donde estaba comenzando TENACIOUS D. Soy un fan acérrimo de la película, y me mola mucho Jack Black, pero poner en horario de cabeza de cartel algo así me parece una aberración igual o peor que la de HOLLYWOOD VAMPIRES. Un teatrillo regado con canciones de la película y versiones en las que se salva alguna graciosada, y algún momento épico que nos recuerda a la película y poquito más. Este año se ve que hubo un problema gordo para poder cerrar a grandes cabezas de cartel, si no no se puede explicar de otra manera ciertas contrataciones. Solo sirvió para estar más impacientes para que llegara uno de los momentos del festival.
Llegaban las nueve de la noche y empezaba el video presentación de uno de los bolos más esperados de este año y también de los que más polémica había generado. Creo que ya se ha escrito suficiente sobre si es PANTERA, o si no lo es, si Anselmo esto o Anselmo lo otro, así que voy a hablar exclusivamente de lo que vivimos en Clisson en esa hora y veinticinco minutos de actuación. Para mí fue una auténtica gozada, no pude ver a PANTERA en su día y no dejaba de tener cierta épica poder ver por fin en directo a Anselmo y Rex haciendo los mejores temas de la banda y acompañados por Benante a la batería y Zakk Wylde a la guitarra. Estoy escribiendo estas líneas habiendo visto ya el concierto en el Resurrection Fest, y para los que los hayáis visto en Galicia tengo que deciros que nada que ver uno y otro. En Hellfest el sonido fue demoledor, una auténtica hostia en la cara, guitarra, bajo y batería sonaban como cualquier directo mítico de la banda hace 25 años, y Anselmo sin ser el de esa época cumplió bastante bien. La voz no es lo que más se oye, está ahí, se distingue bien, pero con esos niveles en los instrumentos es difícil que Anselmo pueda estar al nivel. Sea como fuere los temazos y homenajes a Vinnie Paul y Dimebag fueron sucediéndose y la gente disfrutaba el concierto allá donde miraras. Vimos el concierto bastante atrás y el sonido en los delays de apoyo era tremendo, y la gente que estaba por adelante me confirmó que allí también sonó como una apisonadora. El tempo del concierto en ningún momento me parece que no fuera el de las canciones originales, con lo que el balance de la experiencia fue más que positiva. Digo esto, y ya entraré en materia en la crónica del Resurrection Fest, porque en Galicia pareció que todo iba más despacio, además que no sonó igual de bien en algunas zonas del recinto. Como curiosidad, no sabemos por qué en Hellfest decidieron no tocar al final su “Domination”…
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| Slipknot |
Para terminar el festival teníamos un solape de SLIPKNOT, MELVINS y TESTAMENT. Ante esa situación lo primero que hice fue dejarme llevar por el hambre, e ir a la zona de comidas para apretarme una ensalada mientras curioseaba un poco con los MELVINS. Estando el Valley Stage lleno solo pude escucharlos un poco, y demasiado escorado al escenario con lo que presté la atención justa, tenía curiosidad, pero tampoco es que sea una banda que me haya gustado especialmente nunca.
De ahí nos fuimos a TESTAMENT en el Altar Stage, pero como había tiempo nos pasamos por delante del Main 1 para ver cómo estaba sonando SLIPKNOT. Hace unos años en 2019 los vi en Hellfest y Resu, y me defraudaron un montón, el show está bien, aunque parece que empieza a ser siempre muy parecido, pero el sonido en aquel año tenía un nivel que para mí no daba la talla comparado con como sonaban otros en esos escenarios principales. Pues bien este año en el Hellfest para mí fue parecido, pasamos por las pantallas del delay 2 de la izquierda, por las del delay 1 y 2 de la derecha y la sensación fue la misma, un nivel de sonido que bajaba enteros después de lo que había sonado PANTERA, y en este caso al menos, creo que la calidad del sonido era mejor que hace cuatro años. A mí los conciertos que suenan en algunas zonas así de bajo consiguen desengancharme por completo, sobre todo si la banda me da un poco igual, como es con SLIPKNOT. Tengo que matizar aquí, que en el Resurrection fest me han sorprendido esta semana pasada, con un sonidazo y un bolo buenísimo, y que no me esperaba para nada. Por fin puedo poner que vi un buen bolo de esta gente, que no puede ser que siempre me quedara con ganas de algo mejor.
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| Slipknot |
Bueno, pues esto se acababa, ya no había energías, casi no se podía uno ni mover, pero había que cerrarlo a lo grande, y así fue, con una exhibición de thrash a cargo de TESTAMENT. Ver a Chuck Billy, a Eric Peterson y a Skolnick ya es de por sí respirar historia viva del auténtico thrash del oeste de los USA, además de que siempre es un puto placer escuchar el bajo de DiGiorgio, que es posiblemente el mejor bajista de este siglo en cuanto a metal se refiere. Ha sido una pena por otra parte la salida de Lombardo, pero su sustituto Chris Dovas ha sido más que digno. El concierto empieza sonando cañón desde el primer segundo, y lo único que hizo canción a canción fue mejorar más y más. Consiguieron movernos a pesar de estar ya en las últimas, que conciertazo. Los podemos meter directos al saco de los tres grandes del festival en este escenario junto con Meshuggah y As i Lay Dying. El setlist fue una pasada, prácticamente todo clásicos, empezaron con "Rise up", acto seguido primeros pepinazos "The new order" y "The preacher", "Children of the next level", "The pale King", "Practice what you preach" (patas arriba), "D.N.R" y "3 days in darkness" del “THE GATHERING”, "Electric Crown" (Sublime), "The formation of damnation" y para la apoteosis final "Over the Wall" e "Into the pit"… en resumen, un fin de fiesta ANTOLÓGICO.
Como conclusión, el Hellfest sigue siendo un diez en sonido, en servicios, en precios y atención del cliente, y también en detalles y estética del recinto. Contras, da la impresión de que cada vez hay más gente y está empezando a ponerse demasiado agobiante en algunos sitios, y ligeramente incómodo en algunos momentos donde antes no lo era. El cartel este año a pesar de ser buenísimo yo creo que es el peor de los últimos cuatro y en eso afecta que muchas bandas hayan escogido girar en agosto donde ya empieza a haber muchos festivales consolidados y otros emergentes. El cambio del Valley Stage espero que haya sido provisional y se replantee una ubicación distinta este año, de momento desde la organización dicen que este año habrá obras y que el recinto sufrirá un lavado de cara importante, estamos ansiosos por ver el resultado. Finalmente hay que decir con tristeza que el año que viene coincidirán Hellfest y Resurrection Fest, y eso para los que estamos acostumbrados a hacer los dos festivales es una auténtica puñalada en el corazón.
FIN.
Fotos: Hellfest & https://www.facebook.com/PhotoLiveJaime
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