lunes, 10 de diciembre de 2018

DAGLA: El Enemigo (2018, Autoeditado)


Por Larry Runner. 

Javi Barreiro, batería de la banda, es para mí una persona cercana a pesar de la distancia. Un compañero de trabajo del que me separan tres horas de carretera pero con el que cruzo algún mensaje o llamada casi a diario. Siempre me decía “toco en una banda, un día te mando algo”, pero ese día nunca llegaba.

El que lo conozca, sabrá lo modesto y buena persona que es. La poca importancia que se da y lo poco que le gusta “molestar”, aunque siendo como es, me parece imposible que a nadie pueda enturbiar su paz. De ser otro y tener la confianza que tenemos él y yo, creo que me aburriría para que escuchara su disco, le diera cancha a la banda y les apoyara. 

DAGLA, se llama ese grupo del que tras mucho tiempo oyendo hablar por referencias ahora disfruto de su música. Sí, disfruto. 

Cuatro son los cortes de este EP llegado desde A Coruña titulado “El Enemigo” cuya música podríamos situar entre el stoner rock y el progresivo, con un mucho de respeto por los sonidos clásicos, eso que en inglaterra han bautizado muy acertadamente como Classic Rock.

Cuatro cortes que te llevan más allá de los 20 minutos con dos temas cortos de poco más de tres  y otros dos más largos, que pasan de los siete y que ellos combinan alternándolos a la perfección.


Abre un “Auri” que es un puto hit. Directa, con un riff asesino, contundente y con el punto de velocidad justo donde la voz realmente me flipa por como viene trabajada y producida. Los coros la convierten en perfecta. Temazo y una magnífica forma de entrar en contacto contigo cuando te pones el disco. Difícil no repetir experiencia y darle al rewind para volver a escucharla. Una de esas canciones que no te cansas de escuchar. 

“Teruel” es la segundo de los cortes. Más de siete minutos de sonido clásico en una fantástica canción que se apoya en el sonido de Hammond que aporta Fernando Vilaboy (Elephant Band, Mega Purple Sex Toy Kit). El invitado le insufla a la canción el espíritu que seguramente perseguía la banda, envolviendo todo en una atmósfera exagerada de Rock con mayúsculas. Suenan aquí a gordos, a banda grande y veterana. La repolla musical va con una letra basada en la carta de un soldado republicano que escribe desde la mismísima batalla del Ebro. Allí donde las tropas demócratas acabaron sucumbiendo al empuje del ejército golpista gracias al soporte de las tropas de la alemania nazi. Una de las historias más tristes y vergonzantes de este país a la que ellos le han dado una vuelta y la han convertido en humana y sensible gracias al uso de la primera persona. Crema.


En “El Viaje” es donde encontramos de verdad ese tonillo stoner con el que ya contaba “Auri”. Bastante parecida a aquella, no llega a ser tan buena, aunque musicalmente se le acerca bastante. 

“El Enemigo” es el corte que cierra este EP y el más largo de todos. Comienza con un bajo al que se le van añadiendo elementos a medida que avanza la canción, subiendo en intensidad y contundencia y donde la voz rasgada se acopla de forma magnífica entendiéndose a la perfección a lo pesar de su rasgado. No le falta tampoco el tonillo progresivo.

En definitiva un fantástico EP que mi compañero tenía oculto y en secreto y que por fin forma parte de mi colección de metal estatal. ¡Qué callado te lo tenías, mamón! Discazo. Enorme banda. Y sin darse un pijo de importancia. Ojalá encuentren el apoyo que merecen. Son mejores de lo que se creen. Por aquí estamos empezando. ¡Grandes!

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