By Sonia M.
Desde Reino Unido nos llega HEART IN HAND. He de confesar que los vi el año pasado en el Resurrection Fest y me dejaron bastante fría, pero he decidido darles una oportunidad a ver que tal sonaba este nuevo disco suyo y la verdad que me ha gustado, aunque con matices. Me he divertido escuchándoles, dentro de lo que se puede una divertir dentro del denominado "melodic hardcore". Un hardcore cargado de mucha melodía y de sentimientos desgarrados, sentimientos frustrados, todo a grito pelado, como si se acabara el mundo.
Un contraste que no es nada desagradable y que se disfruta. Se diferencia de otro tipo de hardcore melódico tipo BAD RELIGION o MILLENCOLIN, donde la voz es mucho más amable y no tan agresiva. Su propuesta es elegante y muy bien elaborada. Directa y melodiosa nos van guiando a través de los 12 cortes de este A beautiful white. Adoro My heart belongs in Denamark, ese tema es apasionante. Mi favorito sin lugar a dudas de todo el disco. Las melodías más bonitas vienen de la mano de Ollie y Ed a las guitarras. Charlie Holmes, por su parte es un grandísimo frontman, eso lo puedo decir perfectamente a pesar de que no me gustara la actuación antes comentada. Lo da todo y eso transmite muchísimo.
Y no va a ser menos en disco donde da lo mejor de sí, desgarrando cada estrofa como si no hubiese un mañana aunque ese será uno de los peros que le pongo al asunto y es que de tanto, cansa. Me gusta la emotividad, las estrofas desgarradas, pero no todo un disco así. Me carga bastante. Sin embargo de la base instrumental no tengo nada que objetar ya que es sencillamente exquisita. Cuando se ponen más melosos, cuando le dan un toque más tristón, cuando aceleran sin compasión. En eso un diez.
consiguen desgarrarte tema a tema
Pero lo dicho, el mismo registro sin cambiar un ápice en todos los temas no me gusta. No obstante vuelvo a insistir que de esto se trata este tipo de melodic hardcore. Con el registro de Charlie consiguen desgarrarte tema a tema, hacerte suspirar de tristeza o hacerte recordar mejores momentos, con una simple melodía. Me quedo con varios temas de este A beautiful white, entre las que destaco por encima de las demás la que da nombre al disco, la que lo empieza "Mae", "Jasmine" y mi perdición My heart belongs in Denamark.
Son demasiado modernos para la gente que es reacia a estos sonidos y son demasiado blandos para los del hardcore de toda la vida. Están en medio de una especie de encrucijada malvada en la que entran unos pocos valientes. De todas formas soy de las que opina que en la variedad está el gusto y que cuanto más amplíes tu horizonte musical mucho mejor. Siempre habrá preferencias, obviamente.
Hace unos pocos meses anunciaron su separación, así que nos quedaremos con sus grabaciones. Nunca se sabe si volverán a los escenarios dentro de unos años.
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