lunes, 26 de febrero de 2018

EROTIC PSYCHO: The Lost Boyz (2017, Art Gates Records)


Por Larry Runner.

Sleazy rock. Macarra. Callejero. Para alguno “música de maricas”. Frase de envidioso. ¿Por quién te cambiarías? ¿Por el cantante de Napalm Death o por Vince Neil de Mötley Crüe? Pues eso. De maricas nada, hay que tenerlos muy gordos para salir con esas pintas y más hoy en día, porque en los 80 lo veíamos todo natural y hoy a las nuevas generaciones todo les parece ridículo y criticable al máximo. Así nos va, que la censura avanza a pasos agigantados en este país de retrógrados.

EROTIC PSYCHO son cuatro valencianos nacidos en el lugar equivocado, como les pasa a otros como Jolly Joker, Overloud o mis paisanos Leather Boys. Los ves vivirlo tan intensamente y sientes coraje porque no pudieran nacer 30 años atrás en L.A. y se hartasen de meterse y follar sin control.


La música de EROTIC PSYCHO te recuerda todo aquello, no han inventado nada, y como suelo decir en estos casos, ni puta falta hace. El Sleazy Rock no permite experimentos, déjenlos para los amantes de los compases imposibles y de la perfección. Ustedes mastúrbense con su instrumento tocando miles de notas y déjennos a otros que disfrutemos de la simpleza y nos lo pasemos de puta madre moviendo el culo, cantando gilipolleces al viento y disfrutando de toda una filosofía de vida. Una forma de vivir que hoy, desgraciadamente, está mal vista por una panda de extremistas amargados tal y como ocurriera en época pasadas de dictaduras o de Santas Inquisiciones. Gente gilipollas que se meten a gobernar la vida de los demás y vienen diciendo a todos qué se puede o no cantar y toda esa mierda que en el fondo no es más que un recorte de libertad absoluto a los que no piensan como ellos. Una forma de fascismo disfrazado. Antes era la religión. Ahora es eso, la corrección política, el veganismo radical, el feminismo y no se cuantas historias más. Aquello de vive y deja vivir, los cojones, todos vienen a tocartelos con sus mierdas. Contra eso, rock n’ roll, aunque cuidado, que nos empiezan a perseguir.


Pues a la mierda. Diversión, buenos riffs, algún sólo rompedor y canciones festivas. Absténganse amargados, puritanos y amantes de las pajas instrumentales. Esto es sleazy, es fiesta, música que hará que se te caiga la birra al suelo y acabes resbalando luego cuando la pises. Lo bien que nos lo habríamos pasado en los 80 con ellos y no te digo mis amigas de la pandilla que todo el puto día se cardaban el pelo. Tendrían un poster suyo en la habitación. Fijo. Los escuchas y dan ganas de follar.

Gracias EROTIC PSYCHO por hacerme retroceder en el tiempo y hacer que me pase el mal rollo en tres temas. Al que no le guste, que no mire. ¡A tomar por culo ya! Muy grandes.







© Diario de un Metalhead 2018.