Fotos: Unai Calleja y Resurrection Fest.
Jornada maratoniana. Primeras y únicas compras del festival a primera hora. Comimos mientras nos amenizaban la espera AVIDA DOLLARS. Los gallegos MOURA en el Desert comenzaron nuestra jornada de una forma muy elegante y fresca, relajando el cuerpo tras tanta caña con su metal progresivo y psicodélica incluida. Tras ellos BTWD con mucho jaleo en el Main. Increíble ver su progresión y crecimiento. Su estilo claramente centrado ya en el beatdown me gusta aunque a veces se me quede lineal. La liaron bastante gorda. Actitud, temones y a bailar.
NEILA calmaron las aguas después de tanta intensidad. Los bilbaínos nos dejaron perlas musicales a una temprana hora, ya las 5, y bastante gente en el recinto. Sonaron muy bien y a pesar de definirse como doom sludge, dos estilos que no controlo, me convencieron.
La primera banda grande para una servidora fueron WHILE SHE SLEEPS en el Main Stage. A pesar de la ausencia de Loz, le suplió con nota el cantante de BLEED FROM WITHIN, Scott Kennedy. Para el marrón que le había tocado con apenas horas para aprenderse el set lo hizo de 10. Me apasionan WSS pero quizás el concierto se me quedó a medio camino, como a medio gas a pesar de que Mat Welsh hace tiempo que se ha echado la banda a la espalda y como cantante me flipa. Esperemos que Loz recupere la forma.
Mientras SERRABULHO perturbaban al personal con intros raveras y electrónica a saco con otras cosas aproveché para intentar descansar un poco. Me fue imposible no ver un rato de los portugueses y su particular manera de entender el grindcore. Me rei un montón, vi como lanzaban millones de cosas al público y como este respondía enloquecido y animado.
Por mi parte acabé con MUTE en la carpa mientras TRIVIUM colapsaban el Main Stage. Me apetecía cambiar de aires y eso es lo que me ofrecieron los canadienses y su punk rock fresco. Aunque cantaba su batería, poco a poco eso pasó a un segundo plano por la gran labor y los temazos que tienen. De diez las partes de guitarra enloquecida que eran puro caviar.
WET CACTUS fueron mi siguiente víctima en el Desert Stage. Cuál fue mi sorpresa por mi desconocimiento al respecto que pensaba que eran de fuera, de verdad. El primer tema sonó tan espectacular que me quedé pilladísima cuando Daniel comenzó a hablar. ¡De Torrelavega! Bestiales. Me gustaron muchísimo, uno de los mejores conciertos para mi que presencié en el Desert, por actitud, sonido y repertorio. Y eso que como comento no soy muy aficionada ni al stoner ni a la psicodelia pero quizás el destino me está queriendo mandar algún tipo de mensaje.
Volantazo a la carpa. VENOM PRISON, el infierno en la tierra en forma de mujer con Larissa. 40 minutos de pura barbaridad sonora. Densos, oscuros y sin respiro. Me encantan. Pero para verlos en directo, creo que aún no estoy preparada para engullir un disco suyo al completo. Buenos pits y patadas voladoras en las partes más hardcore. No eran muchas ya que la parte death tira más, pero cuando las había eso se convertía en el infierno.
Se supone que aquí tendría un merecido descanso para afrontar con dignidad los cuatro conciertos gordos que me quedaban. Casi una hora y media que me había planteado para ello. Mi gozo en un pozo. Las eternas colas para pedir cena me hicieron no descansar nada, cenar a toda velocidad y acudir al Main para poder pillar un sitio decente para SLIPKNOT. Nunca, en los 6 años que llevo acudiendo a Viveiro me había pasado algo así. Y si aún no me había dado cuenta, ahí fue cuando comprendí que aquello se estaba saliendo de madre o al menos que igual no estaba hecha para aquello en un espacio tan reducido.
Dicho lo cual mi yo adolescente me hizo callar para contemplar el telón de SLIPKNOT. Muchos años esperando un momento así. Consciente de que los años pasan para todos, que las cosas no son como al principio, que había temas que no tocaban que me dolían en el alma y demás, los disfruté. Quizás no tanto como esperaba pero yo feliz. Lo que me fastidió además de lo comentado es que el sonido era inofensivo, al menos desde mi posición. No me retumbaba el pecho, joder. Recuerdo cuando veía o escuchaba los discos de SLIPKNOT que me acojonaba. No sé, igual es que ya no es así pero como digo un set que va de más a menos y una hora y media que no es tal. Pero bueno, la espinita ya me la he quitado y puedo decir que los pude ver bien cómoda y sin agobios.
Desbandada generalizada tras SLIPKNOT y nosotras a por CRADLE OF FILTH, otra banda con la que tengo una curiosa historia. Es una de esas bandas que nunca me ha dado por escuchar porque no me atraía y también porque esos chillidos de Dani pues no me parecían coherentes. Hasta entonces. Tras saber su confirmación para el festival y escucharlos con calma en casa me he dado cuenta de que aquí hay donde rascar, al menos antes. Y me sorprendió disfrutarlos mucho en directo y ver a Dani Filth muy en forma. Sin ser fan de la banda me pareció un concierto muy digno y un set muy entretenido. Las vueltas que da la vida. Aún recuerdo la camiseta de CRADLE de mi hermano y el miedo que me daba. Ahora me río.
Y la decadencia llegó. Desde las 3 de la tarde sin parar llegó el toque final del cuerpo. Pude disfrutar el final de THE OCEAN, con el Desert de gala. Me dolió en el alma no verlos enteros ni en condiciones pero al menos lo que pude presenciar me confirmó todo lo que había leído al respecto. Qué barbaridad. Sonido, luces, puesta en escena. Maravilloso. Los veía desde la distancia, sentada en la hierba y flipaba. Solo fue una media hora, pero fue una media hora apasionante. Creo que hubiese sido incluso más épico si hubiesen tocado en el escenario 2 como lo hicieron CULT OF LUNA. En fin, aquí ya tocó recoger, sacrificar con todo el dolor de mi alma a BIRDS IN ROW y volver poco a poco al camping con múltiples paradas por el camino. Nunca había terminado tan destrozada como para tener que parar tanto hasta la tienda de campaña. Supongo que la tralla de los dos días anteriores más el viaje en autobús estaban pasando factura.
Continuará ...
© Diario de un Metalhead 2019.
Jornada maratoniana. Primeras y únicas compras del festival a primera hora. Comimos mientras nos amenizaban la espera AVIDA DOLLARS. Los gallegos MOURA en el Desert comenzaron nuestra jornada de una forma muy elegante y fresca, relajando el cuerpo tras tanta caña con su metal progresivo y psicodélica incluida. Tras ellos BTWD con mucho jaleo en el Main. Increíble ver su progresión y crecimiento. Su estilo claramente centrado ya en el beatdown me gusta aunque a veces se me quede lineal. La liaron bastante gorda. Actitud, temones y a bailar.
NEILA calmaron las aguas después de tanta intensidad. Los bilbaínos nos dejaron perlas musicales a una temprana hora, ya las 5, y bastante gente en el recinto. Sonaron muy bien y a pesar de definirse como doom sludge, dos estilos que no controlo, me convencieron.
La primera banda grande para una servidora fueron WHILE SHE SLEEPS en el Main Stage. A pesar de la ausencia de Loz, le suplió con nota el cantante de BLEED FROM WITHIN, Scott Kennedy. Para el marrón que le había tocado con apenas horas para aprenderse el set lo hizo de 10. Me apasionan WSS pero quizás el concierto se me quedó a medio camino, como a medio gas a pesar de que Mat Welsh hace tiempo que se ha echado la banda a la espalda y como cantante me flipa. Esperemos que Loz recupere la forma.
WHILE SHE SLEEPS
Por mi parte acabé con MUTE en la carpa mientras TRIVIUM colapsaban el Main Stage. Me apetecía cambiar de aires y eso es lo que me ofrecieron los canadienses y su punk rock fresco. Aunque cantaba su batería, poco a poco eso pasó a un segundo plano por la gran labor y los temazos que tienen. De diez las partes de guitarra enloquecida que eran puro caviar.
WET CACTUS fueron mi siguiente víctima en el Desert Stage. Cuál fue mi sorpresa por mi desconocimiento al respecto que pensaba que eran de fuera, de verdad. El primer tema sonó tan espectacular que me quedé pilladísima cuando Daniel comenzó a hablar. ¡De Torrelavega! Bestiales. Me gustaron muchísimo, uno de los mejores conciertos para mi que presencié en el Desert, por actitud, sonido y repertorio. Y eso que como comento no soy muy aficionada ni al stoner ni a la psicodelia pero quizás el destino me está queriendo mandar algún tipo de mensaje.
Volantazo a la carpa. VENOM PRISON, el infierno en la tierra en forma de mujer con Larissa. 40 minutos de pura barbaridad sonora. Densos, oscuros y sin respiro. Me encantan. Pero para verlos en directo, creo que aún no estoy preparada para engullir un disco suyo al completo. Buenos pits y patadas voladoras en las partes más hardcore. No eran muchas ya que la parte death tira más, pero cuando las había eso se convertía en el infierno.
SLIPKNOT
Dicho lo cual mi yo adolescente me hizo callar para contemplar el telón de SLIPKNOT. Muchos años esperando un momento así. Consciente de que los años pasan para todos, que las cosas no son como al principio, que había temas que no tocaban que me dolían en el alma y demás, los disfruté. Quizás no tanto como esperaba pero yo feliz. Lo que me fastidió además de lo comentado es que el sonido era inofensivo, al menos desde mi posición. No me retumbaba el pecho, joder. Recuerdo cuando veía o escuchaba los discos de SLIPKNOT que me acojonaba. No sé, igual es que ya no es así pero como digo un set que va de más a menos y una hora y media que no es tal. Pero bueno, la espinita ya me la he quitado y puedo decir que los pude ver bien cómoda y sin agobios.
CRADLE OF FILTH
Y la decadencia llegó. Desde las 3 de la tarde sin parar llegó el toque final del cuerpo. Pude disfrutar el final de THE OCEAN, con el Desert de gala. Me dolió en el alma no verlos enteros ni en condiciones pero al menos lo que pude presenciar me confirmó todo lo que había leído al respecto. Qué barbaridad. Sonido, luces, puesta en escena. Maravilloso. Los veía desde la distancia, sentada en la hierba y flipaba. Solo fue una media hora, pero fue una media hora apasionante. Creo que hubiese sido incluso más épico si hubiesen tocado en el escenario 2 como lo hicieron CULT OF LUNA. En fin, aquí ya tocó recoger, sacrificar con todo el dolor de mi alma a BIRDS IN ROW y volver poco a poco al camping con múltiples paradas por el camino. Nunca había terminado tan destrozada como para tener que parar tanto hasta la tienda de campaña. Supongo que la tralla de los dos días anteriores más el viaje en autobús estaban pasando factura.
Continuará ...
© Diario de un Metalhead 2019.
