Texto: Larry Runner.
Fotos: Jorge López Novales.
Creo que era la cuarta vez que lo intentaban, aunque no estoy seguro del todo. Fueron tantas que he perdido la cuenta. Parecía que el día de presentar “Born in the seventies” ante su público nunca iba a suceder. Pero sí, al final Leather Boys tocaron frente a los suyos en la Casa de Cultura de su ciudad, Avilés.
Con toma de temperatura, gel, mascarilla y acomodador. Así tuvimos que vivir el concierto de los hardrockeros asturianos. Con restricciones hasta para ir al baño, y, evidentemente, sin poder tomarse una cerveza. Esta es la nueva realidad y la forma en la que morirá el rock si la situación no cambia. Y es que hubo sold-out, pero recordemos que los aforos bajan a un tercio de la capacidad y la entrada era gratis.
Había ganas de rock y de pasárselo bien, eso estaba claro y así lo mostró el público. Ante un auditorio sin más sillas vacías que las que incorporaban una cinta que te impedía tomar asiento, salieron eufóricos a comerse un escenario que no estuvo mal de sonido aunque sí pobre de luces. Como suele ocurrir en este tipo de recintos, poco preparados para el rock, los focos estaban situadas más adentro que la posición de los músicos, que además, eufóricos por llevar más de un año sin actividad en vivo, se acercaban una y otra vez al frontal, estando así más cerca de la gente pero a oscuras.
Si hay un tío que mereciera ser una triunfadora rock star en Asturias ese sería Leather Rose. Capitán de la nave Leather Boys, el vocalista avilesino vive la música como pocos. Tras años de entrega ha logrado publicar con su banda un álbum -“Born in the seventies”- que no para de cosechar elogios.
La idea era presentar “Born in the seventies” por todo lo alto y colar por medio algún tema emblemático de sus anteriores discos. El resultado era un repertorio muy largo, quizá demasiado para los tiempos que corren. Y es que teniendo que estar a las diez de la noche en casa por el toque de queda, no todos pudimos quedar hasta el final.
Abrieron con ganas soltando de mano los tres primeros temas de “Born in the seventies”. Tras un speech de saludo la racha se rompió con “Decade of Decadence”. “Don’t Cheat on Me” arrancó por fin las palmas de un público que en una tarde de domingo y sentado en la butaca tardó en arrancar. No debe ser fácil tener que enfrentarse a un auditorio así, pero ahora mismo es lo que hay.
Recado para la extrema derecha que se tiñe de fosforito y “Aphrodisiac Grape”. A nivel vocal no fue el mejor bolo de Leather Rose, que se entrega tirando hasta de armónica si hace falta. Leather Sex estuvo inmenso en sus largos speech, que no pararon de arrancarnos incluso la carcajada, pero a decir verdad, ambos estuvieron algo fallones. Aunque la verdad, a estas alturas sabemos perdonarles todo. Los fallos se compensan con actitud, y de eso van sobrados. El jodido Leather Rose tiene estilo hasta para tirar la pandereta al suelo. Si quisiéramos ver virtuosismo no iríamos a un concierto de rock n’ roll como este. El resto de la banda, muy bien.
No faltó el emotivo “Fly Free (Blacksmith)”, tema dedicado a la memoria del padre de Leather Sex Eché de menos el piano de “Sixes & Sevens’, la verdad. Tras dedicar al que estas líneas escribe su temazo “St. Mary’s dance”, quizá de lo mejor de la noche, el amplificador de Leather Dirty Luke les quiso abandonar. Bien por Leather Rose y Leather Sex, que improvisaron entonces un tema en castellano, “Salvación”, canción inédita que se editará como añadido a su edición vinilo de “Born in the seventies”. Sí el portadón de su nuevo disco se podrá disfrutar en carpeta grande con una edición de lujo de la que no desvelaremos sorpresas, pero que promete ser alucinante.
Fue entonces cuando nos dimos cuenta de que eran más de las nueve y que teníamos tres cuartos de hora de carretera hasta casa teniendo que ir a buscar nuestro coche varias calles más arriba. Salimos de estampida para llegar a casa cinco minutos antes de ser tachados como españoles desobedientes. Nos perdimos las tres últimas: “To the Curb”, “Leather Gunner” y “Rock and Roll Blowjob”, tema de su ya lejano disco debut de 2011 y que sirvió para cerrar la presentación de disco más accidentada de la historia. El tiempo les ha de compensar el esfuerzo. A pesar de todo nos lo pasamos de miedo. Falta nos hacía. Gracias a la concejalía de Cultura de Avilés por el regalo.
Rebirth
Born in the 70s
Underground
Decade of Decadence
Don’t cheat on Me
Aphrodisiac Grape
Fly Free (Blacksmith)
Flower power
Stranded
Lord of the Whores
Scabs
Sixes & Sevens
St. Mary’s Dance
Salvación (tema inédito)
To the Curb
Leather Gunner
Rock and Roll Blowjob.
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