miércoles, 4 de septiembre de 2019

MISANTHROPY: Path of Ashes (2019, On Fire)


Por Jorge López Novales.

Hace un tiempo tuve la oportunidad de ponerme a trabajar con lo nuevo de Misanthropy. Entre vacaciones y demás… debe ser este “Path of ashes” uno de los trabajos que más he escuchado. Como curiosidad, es raro que haga seguidas la review de un grupo de una misma ciudad como fue el caso de Warg, Zaragoza, y esta de Misanthropy con un mismo promotor, OnFire, y de un mismo estudio, Theocide Studios. Incluso, llegan a compartir letra sobre un relato de Lovercraft, “Lavinia”. Siempre teniendo en cuenta que estamos ante dos propuestas musicales completamente distintas.

Misanthropy acabó por consolidarse en 2015, a pesar de crearse en 2013. Su base son algunos de los miembros las extintas bandas de Thrash Metal mañas, Arterial Pressure (que se fraguó en pleno renacer thrash estatal de la década pasada) y su continuación, Mindreaver; y de la banda de speed metal Alacrán, todavía en activo.

Con las primeras escuchas lo primero que noto es que este nuevo trabajo supera en todos los aspectos a su antecesor, su EP de 2016 “Prelude to execution”. 

Pero, ¿a qué suena este nuevo trabajo? En líneas generales la banda se define como Death/Thrash con alguna influencia de black.

Toda la experiencia musical de sus miembros se puede apreciar a la hora de acometer los complejos pasajes instrumentales y elaboradas composiciones que hacen que un disco de doce temas no se haga pesado. Incluso llegan a tener un tema de diez minutos, “Lavinia”, no muy habitual en los géneros en los que se mueven, que contrasta con otros de apenas dos minutos como es “Ride Fast, Die Fast”.

Habría que sumar un sonido muy limpio que permite resaltar el timbre de cada uno de los instrumentos, en especial el del bajo de Diego Petrosky que, como detalle a destacar, tiene momentos en los que se alza como protagonista quedando las guitarras relegadas a un segundo plano, con lo que todo el conjunto gana en sonoridad.

La voz de Daniela contribuye a endurecer la propuesta de Misanthropy. Se aprecia evolución vocal e interpretativa respecto al citado EP, y no se conforma con ofrecer temas planos dentro de una agresiva propuesta thrash que lo convierte en algo casi death. La ejecución de las guitarras de Christian y Osmar recuerdan a las formas de Slayer y Kreator, con algunos acelerones más propios del metal extremo. 

El disco se inicia con “Summoning” y “Arsonist” pero es en “Hell´s Gate” cuando comienza la tormenta. En este tercer corte apreciamos el arte de tomar un rift lleno de armónicos e ir acelerándolo hasta el delirio, como se puede apreciar en el “Angel of death” de Slayer, hasta que la voz de Daniela te aplasta con su matiz más death. Posteriormente encontramos un breve pasaje más extremo, donde la batería de Juan te apuntala las neuronas con una intensidad que va dosificando a lo largo del tema, jugando el instrumento un papel primordial. Es de reseñar el aparente duelo vocal que mantienen en este tema el registro agudo y grave.

“The Fallen” fue el tema escogido para el videoclip. Fue dirigido por Henry Menacho de Kronic Produccions, y Global Make Up  se encargó del maquillaje. El tema resume muy bien lo que encontramos a lo largo de “Path of ashes” resultando, aunque acerca a los seis minutos, una buena elección.


“Non Perfect Symmetry” presenta una introducción de minuto y medio en la que arpegios de guitarra acústica acompañados por los platos de batería, son la base para que la otra guitarra acústica presente un primer tema melódico que inmediatamente se desarrolla ya en thrash metal americanizado y con los guturales de Daniela. Sigue “Father of blood”, un medio tiempo cuya melodía presenta rasgos orientalizantes,  donde el gutural es especialmente brutal. En este tema es especialmente destacable la labor del bajo, que dirige toda la ejecución.

 “Lavinia” toma el nombre de la madre del hombre destinado a ser quien traería al bueno de Yog-Sothoth a nuestro plano, y ya de paso allanar el camino a su jefe, Cthulhu. Es el tema más complejo del disco con intrincados pasajes instrumentales, cambios de ritmo, llegando a tomar elementos con sonoridad más heavys donde podemos encontrar tramos más lentos y pesados.

“Toxic Race” y “Shooting before you ask”, cortes 8 y 9 respectivamente, nos devuelven al sonido contundente y más rápido, aunque este siempre subyace.

“Merciless Vengance” nos transporta al registro más grave de los presentados en este compacto, con guturales muy profundos y toques de death y black metal realmente pesados, combinando los distintos registros vocales que realiza Daniela.

“Ride Fast, die fast” es, como hemos adelantado, un tema breve, rápido y directo que nos recuerda al “Endless pain” de Kreator.

El disco finaliza con la instrumental “It´s all over”, donde se retoma el sonido del primer corte del crepitar de las llamas, cerrando como empezaron, así como el timbre acústico de las guitarras que presentasen en “Non Perfect Symmetry”. Así “It´s all over”, aglutina los sonidos que emplea “Path of ashes” ajenos al propio género thrash.

A veces juego a imaginar a qué suena un disco sólo con ver la portada. Habría fallado miserablemente al ver el trabajo de Brutal Logos. Una portada de tintes oscuros donde se puede ver cómo una mujer invoca a un demonio, una imagen que está coronada por el logo de la banda, que desde su comienzo apela a lo satánico con su cruz invertida en la T. El dibujo destaca sobre el fuego, la llama como fondo, que parece ser el eje central de la banda y que llega a formar parte de temas como “Arsonist”. Así mismo el sonido del crepitar de las llamas se toma como fondo del recitado de “Summoning” que actúa como invocación. Y que también aparece en la portada de su anterior trabajo, en el que se veía cómo se torturaba a un reo con fuego mientras se veía de fondo a una multitud enardecida. Si, aquello preludiaba una ejecución y podría ser interpretado como algo más thrash, un producto de los ochenta.


Automáticamente solemos asociar todos los guturales cuando se trata de un mujer a Arch Enemy, no sería  justo.  Más cuando no existen muchas bandas con “frontman” femenino que se acerquen al extremo (no niego que cada vez haya más) y estamos viendo a los Arch Enemy inmersos en su obsesiva búsqueda de la melodía, un extraño híbrido que no me desagrada, que va en dirección contraria a Misanthropy, aunque en algunos momentos se puedan ver ciertas influencias inevitables de Arch Enemy en su sonido.

A nivel estatal, tampoco ayuda al crecimiento de bandas escuchar a la gente decir que Diva Satánica (Bloodhunter) está metida en todo. Como si tuviera que pasar toda su vida recluida en su parcela underground, que puede gustar más o menos, y en la medida que se menosprecia el gutural femenino ya de paso. Así que las nuevas propuestas pueden pasar más desapercibidas o que bandas como los referentes In Mute no hayan tenido más reconocimiento. Al menos, dad una escucha a Misanthropy. Merece la pena y sólo es su primer trabajo, ¿hasta dónde pueden llegar?.

Tracklisting:
1. Summoning 
2. Arsonist 
03. Hell’s Gate
4. The Fallen
5. Non Perfect Symmetry
6. Father Of Blood 
07. Lavinia 
08. Toxic Race 
09. Shooting Before You Ask
10. Merciless Vengeance 
11. Ride Fast, Die Fast 






© Diario de un Metalhead 2019.