Por Jorge López Novales.
Para empezar expreso mi total desconocimiento por las bandas de Argentina (con sus obvias excepciones). Mi punto de partida será Chewelche.
Fue un amor a primera vista. Desde las primeras notas, desde que comenzaron las primeras líneas del relato de Aries Basualto se empieza a sentir el amor que la banda profesa por su tierra, por su cultura y la gente que la habita. Chewelche da voz a la Patagonia. Muestran su contrariedad frente al expolio que sufre las entrañas de su cordillera, el daño que ha hecho la minería a cielo abierto. Lo hacen en un tema como “Cordillerano Destino (No a la mina)”. También vemos letras que abordan temas familiares, la gente que no está, la vida del músico… Van directos hacia el corazón en doce temas.
Chewelche, cuya traducción es Gente Bravía, nace en 2019 siendo un proyecto paralelo de los miembros de la banda Aonikenk (un término empleado, a su vez, para nombrar a uno de los pueblos indígenas que habitan la Patagonia). La banda es oriunda de Plaza Huincul (Neuquen-Patagonia Argentina).
¿A que suena Chewelche? Puro heavy metal con temas muy directos donde las letras, como ya hemos dicho, tienen tanta importancia como la música. En el sonido de la banda tiene mucho que decir el trabajo de Franco Contreras. En algunos momentos los músicos aceleran y juguetean con el power pero en general tenemos medio tiempos muy contundentes guiados por la batería de Sebastián Figueroa. La voz de Ariel, con toda su rudeza, armado con su bajo, me llega a recordar a la de Oscar Sancho (Lujuria) y es perfecta para la denuncia, el mensaje, y aporta mucha personalidad a la banda.
La guitarra de Juan Bruno Basualto está en todo momento presente. En algunos momentos llega a sacrificar virtuosismo por feeling. Se ve que está cómodo y en ciertos pasajes se deja llevar como es el caso de “A paso firme” donde tiene más protagonismo.
“Nunca es tarde” es el tema que ha escogido la banda para hacer un videoclip. “El tiempo no se detiene La vida se hace tan corta Y cuando grande te haces valoras más muchas cosas” llegan a decir. La experiencia te hace valorar las cosas de otra manera y alejas de ti lo que no te aporta nada.
Versionan a Hermética “Ayer deseo, hoy realidad” (Víctimas del Vaciamiento, 1994). Hermética es una banda referente del thrash metal hispanoamericano. Chewelche hace un guiño al género con su sonido sin perder un ápice de intensidad con una batería más definida que el tema original. ¿La mejora? Sólo puedo decir que personalmente me gusta más.
El cierre es curioso. “A mi tata” es un homenaje instrumental. Una grabación casera de una reunión familiar da paso a fraseos de guitarra sobre una guitarra acústica que cierran con un ritmo tradicional de su tierra.
Chewelche nos trae un disco lleno de sentimiento. Es muy complicado encontrar un trabajo que transmita algo más allá de la indiferencia en estos tiempos. Ahora mismo se han vuelto a meter en el estudio para grabar su próximo disco de estudio “Defensa civil”. Su lucha continuará. Al menos oíd su voz.
Ha sido editado el 23 de enero de 2020 por el sello Icarus Music Argentina
Ariel Basualto (Bajo y Voz)
Sebastián Figueroa (Batería)
Juan Bruno Basualto (Guitarra)
Tracklist:
01 - Nunca Amutuy, ¡Quedémonos!
02 - Alguna vez, quizás tal vez mañana
03 - De Paisano Guitarrero
04 - Cara Sucia
05 - Cordillerano Destino (No a la mina)
06 - Tiempos Nuevos
07 - Un canto para mi nieto
08 - Nunca es tarde
09 - Pancho Billete
10 - A paso firme
11 - Ayer deseo, hoy realidad (Hermetica)
12 - A mi tata (Instrumental)
© Diario de un Metalhead 2020.
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