martes, 31 de enero de 2012

WARCRY: Madrid 21.01.2012. Crónica y fotos


Texto: Larry Runner
Fotos: Sergio Blanco

El sábado anterior los habíamos disfrutado en Bilbao y afirmamos en nuestra crónica que las dos horas y media de show se nos habían hecho cortas. Superar el listón nos parecía difícil. Pues bien, a la conclusión del concierto del Palacio Vistalegre del pasado sábado, salimos con la sensación de que lo de Bilbao había sido poco más que un buen ensayo en comparación con el show de la capital.


Y es que eran muchos los factores a tener en cuenta para el concierto de Madrid como para permitirse el lujo de pasarlos por alto. La banda programaba la grabación de su segundo DVD en vivo, y para ello tiró de largo en los preparativos. Trataré con esta crónica no rehuir ninguno de los detalles que acontecieron, aunque la labor se antoja harto complicada. De todas formas, las fotos del maestro Sergio Blanco ilustran mis palabras y sirven para esbozar lo que se perdieron aquellos que no acudieron a Madrid. Alguno se arrepentirá cuando lo vea en el DVD, aunque seguro que algo así se tendrá que volver a acometer en el futuro. No sería justo para los seguidores de la banda que no se repitiera.

El montaje comenzó 48 horas antes del evento. Ya el jueves se estaba habilitando el escenario. Las cosas labradas con tiempo, suelen salir bien, y en este caso ni la banda, ni su management, ni nadie cercano a ellos, quería desatender ningún detalle ni que el azar tuviera nada que ver en el resultado. Todo debería  ir ajustado al milímetro para intentar que el resultado fuese superior.

Gracias a Aníbal Siñeriz, tuve la suerte de poder acceder al recinto mucho antes de la apertura de puertas al público. Así me percaté de muchos detalles que de no ser así, probablemente me hubiesen pasado desapercibidos. Por encima de todo llamó poderosamente mi atención el montaje situado en la parte opuesta al escenario. Lo que en otras ocasiones es una mesa de sonido y poco más, parecía la sala de mandos de Cabo Cañaveral. Mesas para el sonido del directo, para la grabación, para las luces, y gran parte del equipamiento por duplicado, preparado para cualquier desgracia que pudiera acontecer durante el evento. Listo para recurrir a ello en caso de necesidad. Máximos detalles para un colosal evento. Las caras de tensión en los técnicos reflejaban la inmensa responsabilidad que recaía sobre sus almas.

El centenar de fans que accedieron a comprar su abono con derecho a Meet & Greet disfrutaron de cada uno de los segundos que pasaron en compañía de la banda. A cambio del esfuerzo económico fueron recompensados con varios detalles exclusivos tales como una camiseta conmemorativa del evento, un parche, postales, etc, todo ello incluído en una bolsa a modo de "full metal bag Wackenera".

La multitud se agolpaba a las puertas y la cola daba vuelta a varias calles. El personal de seguridad de la plaza de toros se vio desbordado por la tremenda afluencia de público, lo cual propició que los últimos de la fila accedieran al concierto cuando la banda estaba ya interpretando el tercer tema de su repertorio.

El aspecto de la Vistalegre era el de las grandes citas, algo que yo personalmente había vivido afortunadamente en muchas ocasiones pero siempre con bandas extranjeras, nunca con una banda de las nuestras. Desde los tiempos en los que Obús y Barón llenaban pabellones hasta nuestros días, solo Mago de Oz puede presumir de liar algo así. Aunque en el caso de los madrileños, hay que apuntar que a día de hoy, la mayoría del público que les sigue no es el que viste habitualmente de negro. Aspecto que no digo que no pase con WarCry, por supuesto. También entre los presentes había parte de público poco heavy. Y luego explicaré el porqué de esta afirmación.

Como pasó en Bilbao, todo el escenario estaba recubierto con lonas, para que ni un solo engranaje del tablado  quedase a la vista. En el frontal, cinco cañones de fuego, de los que se hizo muy buen uso y que a casi más de uno le queman las pestañas. Al fondo, la pantalla. Todo la trasera del enorme escenario era un video-world que estuvo durante todo el concierto emitiendo diversas imágenes,  en la mayoría de los casos inéditas y diseñadas para la ocasión. Un derroche visual sin precedentes en la trayectoria de la banda. Un lujo de trabajo. Un despliegue a la altura del evento. Pero todo ese derroche de visuales no nos iba a distraer de lo importante, y de lo que realmente nos llevó allí a miles de almas congregadas: la música.

Una vez más los cinco componentes de la banda saltaban al escenario, y como viene siendo habitual en esta gira, acompañados a los coros de los geniales Ruth Suárez (ex-Darna) e Iván Blanco (ex-Avalanch). Se avecinaba una noche de emociones y de sorpresas. Se sabía de la presencia de un invitado internacional, pero solo la ganadora del concurso celebrado al efecto, sabía quién era y no lo iba a ir pregonando. Con lo cual, al comienzo de la actuación la intriga continuaba y se seguía especulando con diferentes nombres.
El espectáculo comenzó con un preámbulo durante el cual el nombre de los protagonistas iba apareciendo en la gran pantalla. Imágenes en video de todos y cada uno de los componentes y sus nombres en letras bien grandes. El ruido emergente de las voces del impacientado público era ensordecedor.


Despegaron como en Bilbao, con dos temas de sonido épico: “Alma de conquistador” y “Alejandro”. En esos primeros instantes de concierto me situé en la parte trasera, algo nada habitual en mí.  Las ganas de ver el espectáculo completo me llevaron a ello. Así pude disfrutar al máximo de la pirotecnia de los gerbs en el primero de los temas y del alucinante video lanzado con “Alejandro”. Las llamas volvieron a aparecer en el tercer tema “Anticristo”, que lució un gran nivel merced a un visual especialmente editado para el momento.

La salida había sido impresionante,  energía arrolladora en estado puro . El público se volvía loco, nos volvíamos locos. Las cámaras giraban para uno y otro lado buscando el momento más brillante,  caras de  emoción. Banderas de los más diversos lugares ondeaban al viento, entre ellas varias de Asturias, la tierra de la banda.
Estar en la parte trasera de la zona de la pista empezaba a resultar incómodo. Lo de siempre. La gente se apelotona en la parte de atrás, sin intentar buscar un hueco donde permanecer cómodo observando el show. Reparando en la actitud de la multitud que nos rodeaba, optamos por incorporarnos hacia uno de los laterales, el izquierdo y fue realmente curioso ver que tras avanzar poco más de una decena de metros, nos encontrábamos con todo un espacio abundante para nosotros. Desde allí disfrutamos a lo grande del resto del show aunque para ello sacrificáramos un poco la visión de la totalidad del escenario. A partir de entonces dejamos de ver a los coristas, solo les oíamos.


Con “Aire” volvieron a lucir las llamas. A esas alturas los de las primeras filas seguro que tenían ya muy claro que frío no iban a pasar. El concierto transcurría sin descanso, sin paradas largas. Víctor García se dirigía al público pero sin parrafadas, hasta que de repente ocurrió algo completamente inesperado. Algo que nos iba a llamar realmente la atención por su originalidad.
Pablo García, guitarrista de la banda, se quedaba solo sobre las tablas. Dos de los técnicos de la banda aparecían por uno de los laterales para depositar en el centro del escenario una mesa con algo que simulaba ser un pulsador. En la pantalla surgía la leyenda “Concurso de Riffs”. Los técnicos Sete y David, hacían uso del artilugio mágico y con cada uno de sus toques, iban apareciendo portadas de discos míticos y conocidos por todos en la gran pantalla posterior. Pablo se convirtió en protagonista absoluto durante casi diez minutos interpretando las notas más características de temas como “Paranoid” de Black Sabbath, “Black Night” y “Smoke on the Water” de Purple, “La Grange” de ZZ Top, “Battery” de Metallica, “Symphony of Destruction” de Megadeth y hasta el “Fever” de Michael Jackson. Por cierto, hay que ver lo loca que se vuelve la gente en cuanto escucha dos notas de AC/DC. El mágico momento desembocó en el riff inicial de “La carta del Adiós”.

Con “Nuevo mundo” volvieron a exponer otro video generado para la especial ocasión. Imágenes de carabelas, océanos por conquistar, tierras vírgenes, alegorías del nuevo mundo, llenaban la pantalla haciendo que la emoción de sus fans del otro lado del charco subiera hasta lo más alto. Algo que pudimos comprobar con los cercanos a nosotros. La balada “Cada Vez”, canción que Víctor García dedicara en su día a su mujer en su álbum de debut del año 2002, se convirtió en uno de los momentos más emotivos de la noche, muy en especial para su protagonista, que asistía conmovida al concierto desde la grada.


Tras mi favorita “La Vieja Guardia” donde de nuevo emergían imágenes de héroes de nuestro rollo tales como:  Barón Rojo, Iron Maiden, Judas Priest, AC/DC o Sangre Azul, llegó el que quizás fuese el momento más especial de la noche, la aparición del invitado sorpresa.
El personaje en cuestión fue el mítico y carismático Udo Dirkscheider, antaño vocalista de la leyenda alemana Accept y en los últimos años líder de la banda bautizada con su nombre. Fue maravilloso poder ver a WarCry interpretando el clásico “I’m a rebel” de Accept y viendo a Víctor García sobre el escenario abrazado a uno de sus ídolos de toda la vida.

Mientras algunos disfrutábamos como enanos del momento, otros preguntaban por aquel personaje rubio ya entrado en carnes. De ahí mis palabras al comienzo de esta crónica cuando calificaba a parte de la audiencia de “poco heavy”. Cualquier metalhead que se precie, y que lleve en esto dos semanas conoce a Udo. No es ningún tipo nuevo, sino uno de los cantantes más famosos del estilo y una de las voces más características y carismáticas del heavy metal europeo de todos los tiempos. Una lástima que algunos no supieran apreciar el momento y el esfuerzo realizado por la banda y por su management para contar con una figura de ese calibre sobre el escenario. Otros habrían matado por poder ver juntos en directo a WarCry y Udo.

No solo brillaron Víctor García, Pablo García y el invitado Udo. Como ya resalté en la crónica de Bilbao, me fascina la nueva actitud de Roberto García en el bajo. Como decía una amiga el sábado "mas heavy que una lluvia de hachas". Está en un momento dulce. De Santi en los teclados y Yugueros tras la batería ya no se me ocurren calificativos. Solo hay uno que les haga justicia: perfectos. Llenan el escenario con su actitud y buen hacer. Su profesionalidad y maestría individual aportan grandes mimbres al  grupo.


Tras “Libre como el viento” se retiraron durante unos minutos para regresar con un bis de tres canciones, que concluyó con la fundamental “Capital Lawrence” mientras que gracias a las imágenes proyectadas, parecía que nevaba sobre nuestras cabezas.

La apoteosis final fue, como siempre, “Hoy gano yo” lanzando llamaradas al rítmo de la melodía y despidiéndose luego todos y cada uno de los artistas -Udo incluido- de la feliz audiencia de Vistalegre.

Veintiséis temas. Casi tres horas y una vez más se nos hizo corto. Sin duda el sábado ganó WarCry.

Gracias a la banda por hacernos sentir parte de vosotros. Ruth e Iván incluidos, por supuesto.
Gracias a Sergio Blanco por su amistad y sus fotos. Me vaya mal o vaya bien siempre sabrás que aquí estaré.
Gracias a los técnicos que llevaron adelante todo con tremenda profesionalidad, especialmente a aquellos  con los cuales tenemos ya una relación más cercana: Ian Alvarez, Dani Sevillano, Dani Alonso, Dani González, Jose Angel Ordiz, Sete, David a.k.a. "El Congrio" y Rafa Montes.
Gracias a Kilo y sobre todo gracias a Aníbal Siñeriz por tratarnos de lujo.


© Larry Runner 2012

8 comentarios:

LoKKie dijo...

Una cosita,que no te quiero afear la cronica,pero creo que la de michael jackson fue Beat it :)

otro,es respecto a lo de udo y los pocos heavys...cuando se fueron warcry a mexico con mago y udo,existia todavia el chat de warcry y estaba bastante frecuentado,la mayoria por jovenzuelos(bueno,de aquellas yo era jovencita tambien xD)y no,no sabían quien era udo.de hecho ni accept.balls to the wall si les sonaba,pero como una canción de tantas.te aseguro que si son jevis o eso dicen,pero hay algunos que en lo de clasicos se quedan con maiden,judas y metallica...y gracias xD

por lo demás,lo que siempre digo,sali del conci afónica,despeinada y con el cuello roto,pero de este encima salí deshidratada y chamuscada,joder xD

John P. dijo...

Anda que no conocer a UDO... Mira que el heavy no es mi estilo favorito, pero joder, el cantante de LOS ACCEPT, jejeje. Me alegro de que todo saliera bien, porque se lo merecen.

Un saludo

Hernando dijo...

Gracias Larry, por la crónica, que enorme concierto!! curioso que algunos no conocieran a Udo supongo que seria la gente más joven aun así no tiene perdón jaja....comparto la crónica en el Facebook saludos !!

Larry Runner dijo...

Lokkie, probablemente tengas razón con lo de Michael Jackson jajajaja. NPI del "Rey del Pop" lo reconozco jajajaja.

marta dijo...

Qué currazo de crónica.. Arriba ese metaaaal!!

Leña dijo...

Gran crónica! Sólo decir que en este caso veo positivo que haya gente que no sea del mundo del metal viéndolos. Al contrario que Mago de Oz, Warcry no se han vendido a la radiofórmula. Y llevan gente "de fuera"

John P. dijo...

Perdona Larry, pero he entrado hoy de nuevo y no me he podido resistir a dejar un comentario sobre el gif del Ipad. Vaya fartura de reir.

Un saludo

Larry Runner dijo...

Marta: si. Ha sido un currazo.

Leña: tienes razón.

John P. Maaaula: el gif es tan enorme que no me resistí a ponerlo en la web.

A todos: Gracias por los comentarios.