lunes, 1 de agosto de 2011

Crónica concierto: Angelus Apatrida. Resurrection Fest. Viveiro, Lugo, Galicia. Sábado 30.07.2011


Como creo que bien indica el título de esta entrada del blog, no voy a hacer ninguna crónica del Resurrection Fest.  Esta no va a ser una crónica al uso. No voy a hablar de cada una de las bandas del cartel ni muchísimo menos, sino de como viví yo el Resurrection Fest al que acudí solo la última jornada, la del sábado y con el interés puesto en una única banda: Angelus Apatrida. Si que expondré algunos apuntes sobre el evento, pero intentando no explayarme demasiado, aunque hay cosas que creo que es conveniente comentar. Aquí os dejo mi crónica de un sábado para recordar.

RESURRECTION FEST
Viveiro, Lugo.
Sábado 30 de Julio de 2011
Entrada de un día 25.-€. Bono 3 días: 40.-€.

Envidia. Tras lo del sábado, siento un poco de envidia de los gallegos. Eso sí, se trata de envidia sana.

Como en todos sitios, hubo fallos, evidentemente. Pero lo que más nos transmitieron es que hay voluntad, ganas de crecer y de no estancarse. Siempre han tenido como referencia el Derrame Rock. Este sábado estuve allí y ya puedo atestiguar que a día de hoy están un poco por encima. Solo un Derrame Rock, aquel que todos recordamos con Gamma Ray, Kreator, Backyard Babies, Rata Blanca, Soulfly y Turbonegro ha superado al Resurrection Fest de este año 2011.

Este verano el Festival referencia en Asturias ha emigrado también a tierras gallegas. Quizás los políticos asturianos sean unos incompetentes, casi seguro. Quizás las subvenciones no lleguen. Pero a la inmensa mayoría de la gente el cartel del festival le parecía el mismo siempre. Un estancamiento que el público rockero asturiano hacía años que venía denunciando. El público astur es exigente, pero normalmente recompensa al que arriesga un poco y apuesta por algo nuevo.


En Viveiro vi algunas cosas mejorables, por supuesto. Nadie es perfecto. El control de los accesos está claro que es deficiente. Mucha gente no llevaba pulsera, e incluso hablando con alguien, nos contó la jugada para que con dos pulseras pudieran entrar seis personas y no llegaron a colar a más porque no habían ido más colegas de su pandilla.

Por otra parte, gente que sí compró la entrada, pero que iba un solo un día, no pudo salir del recinto en toda la jornada. La pulsera de un solo día es siempre necesaria. No puedes encerrar a la gente en un sitio durante 12 horas.

Otro de los fallos que vi fue lo de los servicios. Muy escasos y completamente desbordados. Necesitan más o al menos que la empresa responsable recicle a media tarde como en el Derrame Rock (este año no he estado en Ourense, pero en Pravia se hacía). 

La Avenida Cantarrana a donde acudimos a comer.

El tema del polvo es algo que con poco también se puede evitar y que quizás deberían valorar. Un manguerazo de vez en cuando hubiese sido vital para que la gente de las primeras filas no tuviese que poner un pañuelo en la cara y los asmáticos, que desgraciadamente cada día hay más, no tuviesen que huir. Mi asma gracias a Dios se ha esfumado en los últimos años, sino habría sido insufrible para mí.

Esos son los pequeños detalles que se les escaparon que yo pude observar. Son mejorables facilmente y seguro que tendrán arreglo en futuras ediciones poniendo buena voluntad y tomándose de forma constructiva críticas como esta, que al fin y al cabo más que críticas son sugerencias.  Si conociese a los responsables, les plantearía una visita a Wacken para ver como lo organizan los que más saben de esto, pues 22 años dan para mucho. Probablemente vayan al Hellfest, pero eso sigue a años luz en organización, que no en cartel, con respecto al festival de la llamada “Meca del Metal”.

Alguien se dejó esto sobre el césped.

Lo que si veo en los promotores del evento es la gana de crecer. El festival va cada año a más y la apuesta se hace cada vez un poco más ambiciosa. Los nombres del cartel son cada vez más llamativos e  impactantes.

El camping estaba lejos, pero al fin y al cabo se podía ir en un autobús gratuito. De sus instalaciones no puedo opinar pues la viajar en el día no me instalé en él.

El recinto está en una localización acogedora, pegada al mar, y los dos escenarios muy juntos, para no tener que caminar demasiado. Aunque si el festival va a más, corren el peligro de que se les quede el lugar pequeño. De todas formas, observando el entorno, hay sitio bastante para crecer.

El escenario grande, patrocinado por la bebida energética Monster, no sonaba demasiado bien. Son de esas cosas que pasan y que no tienen fácil explicación, porque volumen había y técnicos buenos seguro que también. El pequeño, el de Jaggermeister, sonó bien durante toda la tarde y muy brillantemente con la actuación de Angelus Apatrida, que fue cuando más atención presté y más disfruté, porque al fin y al cabo fuí a Viveiro para eso.


LOS CONCIERTOS

Como digo, acudí única y exclusivamente a Viveiro para ver a los de Albacete y también por acompañar a un amigo al que no le vino nada mal que le hiciera de runner a la vuelta para venir el durmiendo a pierna suelta. Jamás los políticos de aquella ciudad castellano-manchega se darán cuenta del todo de lo que estos cuatro están haciendo porque el nombre de esa ciudad suene por el mundo. A día de hoy ni su equipo de futbol, hundido en la Segunda B, da tanto que hablar como la banda de thrash.

Ya que estábamos allí. Nos dejamos caer durante la tarde por alguna de las actuaciones programadas para las horas anteriores al show de “los nuestros”. Así que entre otros, vi un poco de los conciertos de Authority Zero y More Than Life, cuyo vocalista empezó muy bien pero acabó totalmente sin voz y desafinando de lo lindo. Mucho tendría yo que cambiar para que estas bandas fuesen santo de mi devoción, aunque nunca digas de este agua no beberé. Pero está claro que a su audiencia le encantaron y aquello se puso patas arriba con el público entregado y las primeras filas llenas de gente con pañuelo tapando boca y nariz para evitar el polvo. De todos ellos precisamente More Than Life fueron los que más me gustaron, aunque algunos de los ritmos bailones de Authority Zero no están nada mal.


Messugah era otra de las atracciones para mí. Al igual que me pasa con ellos en disco, me acabaron aburriendo. Demasiado repetitivos para mi gusto. Eso sí, me encanta su actitud y su puesta en escena. Como diría el colega del amigo con el que viajé, apuñaladores.

Legacy of Brutality tocaron muy temprano. Cuando ellos estaban descargando su escasa media hora de show aún estábamos disfrutando de una gran comida y una aún mejor compañía en el otro extremo del pueblo. Viendo el nivel de algunas bandas que tocaron más tarde no me pareció lógico el lugar en el cartel de los naviegos. ¿Es que nadie piensa nunca darle a una banda con tanta calidad como esta lo que realmente se merece?


Y por fin nos dieron las 22:45. La hora señalada para que las estrellas del escenario Jaggermeister hiciesen acto de presencia.

Me preguntaba qué iba a ocurrir. Angelus Apatrida son un grupo de auténtico thrash metal. Son cuatro metalheads genuinos, y tenía la incertidumbre de que podía suceder frente a un público que era en una mayoría abrumadora amante del hardcore o del metalcore y no de los sonidos más clásicos del metal. Una audiencia que no iba vestida de negro, sino con camisetas llenas de color, pantalones cortos en el 90% de los casos y tatuada literalmente hasta las orejas.

En los ochenta ambos estilos convivían conjunta y pacíficamente, como debe ser, y las bandas compartían giras y fans. Hoy en día y contrariamente a lo que yo podía pensar hace años, la gente cada vez etiqueta más, se separa y margina a otros estilos. Es por eso que yo desconfiaba de la recepción que el público podía dispensar a los cuatro thrashers manchegos, aunque ver tantas gorras de Suicidal Tendencies daba buen rollo.


Mi incertidumbre desapareció en nada. En cuanto los primeros acordes de “Clockwork” comenzaron a sonar se difuminaron mis todas dudas. Tuve la suerte de poder ver la reacción desde un lateral del escenario. Desde lo alto de las tablas se apreciaba bien la actitud de la audiencia. Melenas y gorras compartían empujones y se entregaban a la banda.

Así que con la segunda canción, ya no aguantaba estarme quieto viendo el ambientazo que había abajo. Abandoné la zona noble, más llena que nunca en toda la tarde-noche, y bajé a impregnarme del polvo, que es donde mejor se pasa. Lo único que me fastidiaba era el perderme el espectáculo que es ver a Victor Valera golpeando sus tambores y que veía con claridad desde mi privilegiada posición.

Víctor dándole duro.

“Free Your Soul” fue la primera de “las antiguas” en sonar. Para entonces la temperatura en la Carpa Jaggermeister ya había subido, y el fresco que sentía a esas horas en mis brazos descubiertos desaparecía por completo. Cuando tocaron este tema en su concierto de Oviedo, me impactó, pues en el de Enero en Albacete no formaba parte de su repertorio. Esta vez volvió a sorprenderme, pues el tiempo de actuación, como el de todas las bandas del festival,  era reducido y no pensé que la fueran a tocar. 

Estando a setenta kilómetros escasos de la cuna de uno de los mayores canallas que haya dado la piel de toro, “Of Men And Tyrants” tuvo un sabor especial y quizás más agresivo que en otras ocasiones en la voz de un Guillermo avasallador. Mi cuello empezaba a sufrir. Si fuese de los que se gastan la pasta en peluquería habría tirado el dinero. Los gritos de “Albacete, Albacete” sonaban de entre el público como si el desaparecido Rommel Fernández hubiera marcado uno de aquellos brillantes goles que marcaba en los noventa cuando era jugador del entonces llamado “queso mecánico”.

Davish in action. (Foto robada en el facebook de Unai)

No había descanso, y ante la petición de Guillermo Izquierdo de que se formase un “circle of death” el público respondió rápidamente. Lo mismo pasó cuando con “Give’ Em War” se preparó un “wall of death”. Las imágenes que reservo en mi mente de la noche son realmente salvajes. Las Jackson de David y Guillermo con su despiadada intensidad parecían ametralladoras. 

“Legally Brainwashed” sonó más acelerada que en el disco. Poco a poco el set-list se iba igualando en número de temas entre “Clockwork” y “Give ‘Em War”. Tocaron cuatro de cada uno y las dos restantes canciones de la noche fueron de su primer trabajo “Evil Unleashed”. Y es que “Give ‘Em War” suena peor  que “Clockwork” pero los temas puede que estén a la misma altura.


Terminaron con mi favorita “Thrash Attack” y dejaron devastada la carpa. Sin sorpresas, sin tiempo para versiones. Dejándonos una vez más una grata impresión y a la vez esa pena que te queda cuando has visto un concierto que te ha encantado y que se ha terminado demasiado pronto. De todas formas la aflicción tampoco fue tan grande como otras veces. En esta oportunidad se que en menos de un mes los veré de nuevo y esta ocasión mucho más cerca de casa. El Vaques Metal Fest de Lugones les espera y estoy seguro de que volverán a triunfar a lo grande, pues allí a donde van, lo hacen siempre. Algo más de cuatro horas de viaje para solo tres cuartos de hora de concierto. Pero mi cuarto concierto de Angelus Apatrida mereció la pena, pues ya suenan a grupo grande. Geniales siempre.


Set-list Angelus Apatrida:

1. Clockwork
2. Blast Off
3. Free Your Soul
4. Of Men And Tyrants
5. In The Heart Of Nations
6. Give ‘Em War
7. Legally Brainwashed
8. Versus The World
9. Vomitive
10. Thrash Attack

Gracias al señor Ian Alvarez por su amistad sincera, por dejarnos acompañarle y por habernos dado la oportunidad de vivir una jornada tan inolvidable como inesperada. Gracias también a Sete de Sound of Silence. "Se te" debe una. Gracias también a la gente con la que compartimos risas y mantel, se os quiere y lo sabéis.


© Larry Runner 2011


2 comentarios:

Anónimo dijo...

los autobuses costaban un pavo, y ir a viveiro para ver solo a angelus apatrida me parece un poco triste

Ismael dijo...

Buena cronica pero tengo que corregir una cosa, los buses no eran gratuitos, costaban 1e cada viaje.

Esta genial el festi, me lo pasé en grande y se agradece que vaya creciendo pero si quieren crecer preocupate de poner buenas instalaciones urinarias y abundantes.