lunes, 17 de agosto de 2020

JON LORD: Sarabande (Ear Music, 2019) Remastered. UK.


Por Larry Runner.

Ear Music ha reeditado “Sarabande” proyecto instrumental y orquestal en solitario de Jon Lord publicado originalmente en 1976. Hace apenas un mes que se cumplía el octavo aniversario del célebre teclista, que nos dejó el 16 de julio de 2012 a los 71 años y es ahora cuando logro meterle mano a esta histórica pieza reeditada por Ear Music en una preciosa edición en digipack de cartón con un amplio libreto de 16 páginas que cuenta con el sonido remasterizado por Eike Freese en los Chameleon Studios de Hamburgo.


“Sarabande” es el segundo álbum en solitario de Jon Lord y quizás el más personal de toda su historias. Fue grabado cerca de Düsseldorf, Alemania, entre el 3 y el 6 de septiembre de 1975 con el estudio móvil de Dieter Dierks. Los protagonistas principales al lado del teclista de Deep Purple son los músicos de la Orquesta The Philharmonia Hungarica dirigida por Eberhard Schoener. Junto a ellos un buen combo de amigos del teclista. Paul Karass al bajo. Mark Nauseef (Thin Lizzy, Elf, Ian Gillan Band, G- Force, etc) a la percussión, tarea que comparte con Pete York al a batería (The Spencer Davis Group, Nazareth, etc). Por último el célebre Andy Summers (The Police, The Animals, etc) a la guitarra.

Abre "Sarabande con “Fantasia”, una intro totalmente épica que nos recuerda sin duda a las piezas de las grandes películas históricas tipo Ben Hur. “Sarabande” entra a ritmo de jazz con Mark Nauseef abriendo de forma totalmente suave sumándose detrás piano y guitarra. La orquesta entra luego y se acopla con suavidad, ganando peso Lord en los teclados con un sonido muy 60’s y alejado del Hammond al que estamos acostumbrados, para dejar luego el protagonismo definitivamente en manos de la orquesta, que se hace poderosa con vientos y cuerdas en una pieza sensacional totalmente mágica y psicodélica que acaba hasta siendo pegadiza tras las sucesivas escuchas, como si de un single se tratara. Eso a pesar de su duración. Personalmente me vuelve loco y pinchándome el disco puedo escucharla una y otra vez sin descanso. En “Aria” el protagonismo es todo para Jon Lord. El piano es el amo y señor de la pieza, que crea una atmósfera romántica a más no poder y donde el grupo de rock desaparece para dejar que sea la orquesta la acompañante.

“Gigue” sigue con el piano de Lord y va como dividida en tres partes. La primera se presenta con aires medievales, casi folk, que quizás emocione a los fans de Jethro Tull, pues las flautas tienen peso en una pieza barroca en la que escuchamos regresar al grupo de rock que entra con fuerza, con un Andy Summers magistral apoyado por una sección rítmica muy a ritmo de jazz. En la segunda entra por fin entra el Hammond en juego, y además lo hace con fuerza. Los cambios de tiempo se suceden durante los más de once minutos que diríamos concluyen con una tercera parte donde Pete York tiene su espacio en forma de solo de batería antes de que la orquesta cierre la pieza de forma épica y contundente. Alucinante. 

“Bourée” es toda una oda a la experimentación, algo que le encantaba al teclista. Ojo a los sonidos que Jon Lord se saca de la manga a través de teclados y sintetizadores en esta pieza de aire oriental y psicodélico que ocupa junto a su predecesora la parte central de la obra y que por su situación y la duración de ambas conforman el corazón de la obra. La orquesta tarda en tener su momento, pero cuando entra es pura crema cargada de épica.

“Pavane” tiene como protagonistas a la guitarra española y el piano. Tras las dos piezas centrales, queda como floja. Detrás llega la alegre “Caprice” que parece revivir la obra tras la caída de revoluciones de su predecesora. La obra muestra un aire acelerado muy disco 60’s. “Finale” cierra como una mezcla de todo en plan desconcierto desbarajustado, como una loca mezcla de todo lo escuchado a lo largo de la obra. 

Es increíble la variada cantidad de teclados que llega a tocar Jon Lord en esta obra. Principalmente tira de piano, pero también se ayuda de varios sintetizadores distintos, quedando el Hammond relegado. La música de este “Sarabande” tiene una influencia barroca importante y demuestra que en el siglo XX también se crearon obras clásicas y que músicos como Jon Lord deberían estar en los libros de texto como lo están Bach o Beethoven. Poco a poco se le va reconociendo, aunque va despacio. De momento le han dedicado un pequeño monumento en Ucrania y antes de su fallecimiento fue nombrado Doctor Honoris Causa de Música por la Universidad de Leicester. Demasiado poco me parece. 


Tras más de 35 años, no son pocos los protagonistas de esta maravilla que ya no están entre nosotros. Ambos productores ya no están entre nosotros. De esa labor se habían encargado el mismo Jon Lord en compañía del recientemente fallecido Martin Birch. El célebre productor de Iron Maiden y Black Sabbath entre una infinidad de grupos más fue también el ingeniero encargado de la mezcla, la cual elaboró en los Musicland de Munich. La masterización final se elaboró en California. Esta última edición fue remasterizada por Eike Freese en los Chameleon Studios de Hamburgo y hay que reconocer que es una auténtica maravilla y que parece imposible que hayan transcurridos tantísimos años. Suena nítida, cristalina. Enorme trabajo.

La portada muestra el dibujo de uróboros (una serpiente que se muerde la cola), sobre el que cabalgan tres mujeres desnudas. La mujer de la derecha se encuentra en una posición que evoca a la mujer de la portada del “Lovehunter” de Whitesnake, en el que tocó Lord. La funda original de Jon Lord fue diseñada por Kosh y la ilustración de Jon Lord por el fabuloso Mike Bryan. ( https://www.michaelbryan.com/ )

Creo que la última vez que se interpretó la obra en vivo con Jon Lord presente fue en 2014 en Colonia. Os dejo un video por si queréis disfrutar un poco.  


Tracklist:
Fantasia – 3:30
Sarabande – 7:20
Aria – 3:42
Gigue – 11:06
Bourée – 11:00
Pavane – 7:35
Caprice – 3:12
Finale – 2:03

Line Up:
Jon Lord - Hammond organ, piano, clavinet synthesizers
Andy Summers - Guitarra.
Paul Karass - Bajo.
Pete York - Batería.
Mark Nauseef - Percusión.
y por supuesto: The Philharmonia Hungarica dirigida por Eberhard Schoener.









© Diario de un Metalhead 2020.

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