Por Larry Runner.
Llevan más de 20 años y a muchos ni les suena el nombre. Tres discos llevaban (más un split compartido con Graveyard) y a día de hoy son unos desconocidos para el gran público. Eso se tiene que acabar.
¿El problema? Ver sus discos editados en sellos de renombre pero que o bien miraban más hacia estilos más extremos o bien acaparaban demasiado y les dejaban como segundo plato. Sólo así se entiende que uno se ponga un disco como “On the Brink of Existence”, se le caigan los calzones al suelo de lo bueno que es y a estas horas no estén a la altura de otros nombres de referencia del estilo como Angelus Apatrida o Crisix y tengan que recurrir a la autoedición. ¿Qué mierda de promoción les han hecho hasta ahora? Las cosas han de cambiar.
Y es que este álbum de REDIMONI nos muestra un Thrash Metal que nada tiene que envidiar a los grandes nombres del Thrash Metal mundial. Lo digo tal y como lo siento.
Eso sí, a diferencia de otras bandas que triunfan hoy en día, REDIMONI nos muestra un Thrash más 80’s, mucho más old school, sin influencias modernas, sin beber de influencias de otro tipo. La producción es cristalina y es eso lo que hace que el disco suene actual aunque conserve toda la influencia de los mejores y más honestos tiempos del género. Grabaron con el gran Javi Félez y digo gran porque todo lo que llega de Moontower Studios es crema pura. “On the Brink of Existence” no es la sensación.
Con una voz que bien podría decirse es un híbrido de Mike Petrozza y Bobby Ellsworth, REDIMONI nos hace viajar en el tiempo con las sensaciones que nos llegan a través de unos temas que son una continua descarga de cambios de ritmo donde las cabalgadas juegan un papel fundamental para invitar al headbanging casi de forma continua. Tienen algún trazo que puede sonar a black, esencia maligna, pero en el fondo esto es Thrash Metal de chaleco, del bueno, del de matarse a empujones en los bolos. Quizás les tire el rollo, pero no demasiado, o al menos no se dejan llevar por el lado oscuro.
El CD me lo hace llegar Blood Fire Death, son solo cinco temas, dieciocho minutos que rebosan, calidad y actitud. Me alegro infinito de tenerlo entre mis manos, porque además es un digipack absolutamente alucinante, con un portadón desplegable de tres cuerpos guapísimo.
Discazo. Y no, no inventan nada, ni puta falta hace.
1. As The Soul Leaves The Body
2. Death Shall Come To Us All
3. Der Tag Der Rache
4. Ancient Buried Secrets
5. Axes
© Diario de un Metalhead 2021.
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