domingo, 15 de agosto de 2010

Crónica Noche Rock en Turón 13.08.2010



Noche agradable la vivida ayer en el Barrio de Villabazal, en Turón. Por fín, en unas fiestas del pueblo, pudimos gozar de una jornada para la gente más joven, ya era hora de que alguien viese que no solo de pasodobles vive el hombre.


La Comisión de Festejos nos regaló una jornada con música para casi todos los gustos. Teniendo en cuenta que los presupuestos en estos casos son más bien limitados, el detalle fue de agradecer, y seguro que a estas horas algún vecino aún está protestando “por el ruidu de los rockeros”, como si tener que aguantar una orquesta pachanguera hasta las cuatro de la mañana (que será lo que pase hoy) no molestase a nadie.

Abrieron la noche Spicy Mustard & the Pickles, pero cuando yo llegué ya estaban recogiendo, así que no puedo opinar absolutamente nada de ellos. Lo siento, la cena se alargó un poco más de la cuenta.

Les siguieron MISIVA, de Grao. Estuvieron entretenidos, aunque para mi gusto sonaron bastante bajos de volumen. Un poco más de cera les hubiera venido bien. Hacen punk-rock a lo Bad Religion, cosa que no me desagrada (tengo un par de discos de los BR), pero tengo que reconocer que a partir de los veinte minutos ya estaba un poco cansado de la movida. No es mi estilo favorito ni mucho menos y enseguida me cansaron, aunque no lo hacen mal los chavales. Una pena que sus colegas no se acercaran un poco más al escenario para animarlos. Bien.

Tras la descarga punk-rockera, llegaba la hora de SAMBRE. Son una de esas bandas herederas del legado de Dixebra. De esos grupos con los que te lo pasas bien aunque no conozcas los temas. Ideales para estos saraos, hacen que te muevas acorde a tu estado etílico. Su canción de PIRATA NEL PILESASTURCON del glorioso Apuntate a la llista de Dixebra. me encanta, sobre todo cuando dice eso de “pirata del Navia, pirata del Turón”. Eso sí, a mí dame el Nora y no el Piles. Entre sus canciones colaron el
Estuvieron muy bien, sonaron ya algo mejor que Misiva y contaron con movimiento en la parte de alante. Su público estuvo apoyando.

Y por fín nos dieron las tres de la mañana y con ello la salida al escenario de la banda a la que realmente habíamos ido a ver, BLAST OPEN.

Si Fernando, vocalista de la banda, fuese tan radical como Dave Rotten de Avulsed, habría salido al escenario y abría gritado aquello de “se acabaron las mariconadas, empieza el heavy metal”.

En ese momento es cuando me di cuenta de que ya estaba un poco hasta los huevos de gaitas, punk-rock y milongas. Allí teníamos a los colegas que nos iban a dar media hora de cera. En las primeras filas nos congregamos los incondicionales y disfrutamos de su set-list, clavado al que interpretaron en Pola de Lena en Mayo.

Abrieron con LOST, como en aquel concierto de La Palmera, y la cosa no se calentó hasta que llegó la versión del ONLY de Anthrax, donde empezamos a mover las cabezas, levantar cuernos, y todo eso que solemos hacer los metalheads independientemente de que los que estén enfrente sean unos amigos del barrio o los mismísimos Children of Bodom.

Como digo el show fue clavado al del mes de mayo, solo que esta vez tuvieron más espacio, aunque, la verdad, son muy estáticos sobre el escenario. Deberían moverse algo más e interactuar con el público. No solo consiste en tocar bien, hay que dar algo más, si bien la audiencia, a decir verdad, no era tampoco para tirar cohetes.

Cerraron con la aclamada y esperada THE DAY OF THE DEATH. Nos lo pasamos bien.

En definitiva, noche entretenida y tranquila. Sin pago de entrada y con una cerveza de las que “enfila”, y no como la del Wacken. Esta mañana me di cuenta de ello nada más despertarme.

© Larry Runner 2010