Por Larry Runner.
No tuvo que esforzarse mucho mi amigo Sergio para convencerme de ir a ver a Warcry a Fuenlabrada. Hacía al menos dos años que no disfrutaba de la banda en directo, desde la presentación de su último album, REVOLUCION en Avilés. Como todo buen seguidor de la banda sabe, no suelen prodigarse demasiado tocando en vivo, y el que sean asturianos no hace que en eso sus paisanos tengamos el privilegio de poder verlos más a menudo que el resto de la humanidad. Así que tras tanto tiempo sin sentirlos sobre las tablas, la única forma para hacerlo era viajando, y la oportunidad era fantástica.
Hacía apenas un mes desde la última visita a escenarios madrileños de la banda. Fue en la primera noche del Granito Rock, en el que según cifras de la organización, les vieron más de 12.000 personas. En esta ocasión la ciudad madrileña que les recibía era Fuenlabrada, y la fecha, un lunes, no nos hacía muy optimistas con respecto a que acudiera mucha gente. Además no hubo promoción alguna del evento, no logré ver ningún cartel ni siquiera en la misma Fuenlabrada, y mucho menos fuera de ella o en internet. Tampoco se anunció el evento en ninguna de las revistas de metal españolas y las webs más visitadas del género no se molestaron demasiado con la promoción del concierto, algunas lo anunciaron ya a muy última hora, cuando solo la gente que viviese muy cerca tendría tener capacidad de reacción para poder acudir a la cita.
Por desgracia, las bandas que acompañaban a Warcry en el cartel, tampoco son grupos que ultimamente arrastren a grandes masas precisamente, a pesar de tener una gran calidad y trayectoria: Koma y Panzer. Por eso realmente me sorprendió ver como a la hora de salir al escenario los asturianos, a la una de la madrugada, aquello presentase un aspecto casi inmejorable. No es fácil meter a unas 5.000 personas un lunes de madrugada. Puede que fuese fiesta en la ciudad de Fuenlabrada, pero no en el resto de España, y dudo mucho que en esta ciudad al sur de Madrid haya 5.000 metalheads fans del grupo. Tiene aún más mérito la asistencia, si tenemos en cuenta que al término del concierto, la única forma de regresar a casa fuese en coches particulares, ya que a esas horas, el transporte urbano desde la zona, simplemente no existía.
Sobre la una de la madrugada salían a escena los asturianos entre un griterío ensordecedor. La audiencia contaba una cuenta atrás aparecida en la gran pantalla situada en el centro del fondo del escenario al término de la cual el quinteto aparecía bajo los acordes de LA ULTIMA ESPERANZA. Inmediatamente seguido al tema que abre el último disco Revolución, atacaron con EL ANTICRISTO de su trabajo ¿DONDE ESTA LA LUZ? del año 2005, y que a día de hoy y en mi humilde opinión, me sigue pareciendo su mejor disco.
Tras un saludo al respetable, llegó la veloz y machacona AIRE, y seguidamente la preciosa CORAJE, todo un acierto y donde por fin ya empecé a ver a VICTOR GARCIA cómodo sobre el escenario, subiendo el tono sin problemas, algo que hasta ese cuarto tema no me pareció apreciar, como si su voz no estuviese lo suficientemente caliente, sonaba muy rasgada. A partir de ahí el excelente frontman estuvo magistral durante toda la actuación.
Tras la extraña espantada de José Rubio tenía muchas ganas de ver como funcionaba la banda con un solo guitarrista. Por una parte pensaba que dos guitarristas dan un sonido más heavy al grupo, pero por otra parte, hay otras formaciones que me encantan y que cuentan con un solo guitarrista y aún así cubren todos los huecos posibles a base de teclados como por ejemplo en el caso de una de los fineses Stratovarius. Tengo que decir que tras lo visto en Fuenlabrada, a Warcry no le hace falta ningún otro guitarrista, la gran labor del nuevo dueño amo de las teclas Santi Novoa permite a la banda sonar realmente bien con la única presencia a las seis cuerdas del maestro Pablo García.
Acompañados de una audiencia que cantaba sin cesar acompañando a Victor, ya no solo en los coros, sino en toda la canción, sonaron NUEVO MUNDO y DEVORANDO EL CORAZON con el lugarteniente Pablo García dando lo mejor de si mismo, tocando con elegancia y brillantez. Fue entonces cuando llegó uno de los momentos más especiales de la noche.
Con mi canción favorita, LA VIEJA GUARDIA, fueron apareciendo en la pantalla fotos de los fans de la banda sacadas de sus distintas webs, perfil de facebook etc. Algunas caras incluso nos sonaban. Las fotos no eran solo de fans españoles, sino también de seguidores de todo el mundo. A más de uno se le saltarían las lágrimas al verse en la pantalla, y seguro que muchos de esos incondicionales que aparecen en las fotos aún no han tenido la oportunidad de verse por ser de fuera de España. Fue un momento realmente emotivo, un homenaje a los seguidores más fieles. La última repetición del estribillo sirve como homenaje a las bandas que han hecho que grupos como Warcry existan en nuestro país. Grandísimos nombres como Iron Maiden, Scorpions, Judas Priest, Kiss, Metallica, grupos que no llegaron a tanto como mis adorados Stryper, o Warlock e incluso bandas españolas como Barón Rojo o los número uno de los ochenta, Sangre Azul. La foto final fue la del tristemente desaparecido Roonie James Dio con la leyenda “Never Die”. Un homenaje que me puso la carne de gallina. Me asaltó la nostalgia y no pude evitar emocionarme para al término de la canción tener que limpiar mis ojos. Solo por ese momento ya había merecido la pena el esfuerzo de viajar de lunes a Madrid, teniendo que trabajar al día siguiente.
LA VIDA EN UN BESO fue el siguiente tema, al que apenas pude prestar atención tras la emoción de LA VIEJA GUARDIA. Luego llegaron ALEJANDRO, con un Roberto García insuflando grandes dosis de energía y CONTRA EL VIENTO que fue otro de los momentos intensos de la noche. Los cánticos eran constantes, y el buen rollo que se veía sobre el escenario se reflejaba abajo entre el público. Las caras de felicidad y complicidad de los músicos, eran las mismas que se veían en los fans. Puedo afirmar con rotundidad, que el grupo está ahora mismo en el mejor momento desde su aparición hace ya casi una década. Unos gritos de “Victor, Victor” fueron acallados rapidamente por el líder de la banda para que se convirtieran en “Warcry, Warcry”
CAPITAN LAWRENCE fue la despedida de una actuación fantástica en la que no hubo cabida para las a veces innecesarias demostraciones de virtuosismo a la batería, guitarra, etc. Simplemente grandes canciones, lo que buscas cuando vas a un concierto, pasártelo bien escuchando los temas que te gustan sin falta de que los músicos te tengan que dar una clase magistral de su instrumento. No hacía falta, su calidad ya es conocida por todos, y por ejemplo la cada vez mayor espectacularidad de Rafa Yugueros a la batería ya había quedado demostrada, golpeando con fuerza y demostrando otras habilidades. Fantástico ver como las baquetas giran en sus manos mientras interpreta todo a la perfección. Y es que, como digo, la formación actual es la mejor que han tenido.
Las caras tristes de la audiencia provocadas por el abandono del escenario, cambiaron con el regreso para interpretar dos canciones más a modo de bis. EL GUARDIAN DE TROYA fue recibido entre un griterío ensordecedor y como fin de fiesta HOY GANO YO, coreada hasta la extenuación, aunque yo la cambiaría por Trono del Metal.
Tras lo visto, tengo que decir que sin duda Warcry son a día de hoy la banda número uno de heavy metal en España, le pese a quién le pese. Alguno dirá que estoy equivocado, que lo son Mago de Oz, pero yo hablo de heavy metal, no de las ridículas formaciones de música pop que suenan día y noche en las mediocres emisoras de radio españolas y que en directo no dan la talla. Por cierto, y respecto a esto, hemos visto a Mago, Saratoga, Los Suaves e incluso a bandas que no son de heavy metal como Fito o Extremoduro en las portadas de nuestras revistas favoritas. ¿Para cuando una portada dedicada a Warcry?
Texto: Larry Runner
Fotos: Sergio Blanco
© Larry Runner 2010.
Enlace a la crónica (la colgada en su día en myspace) en la web de Warcry.
