📷 Jorge López Novales.
La visita de Misery Index y Konvent nos pilló en miércoles y en pleno mes de julio. Una aventura peligrosa. Al final el resultado no fue tan malo como cabía esperar.
Más de un centenar de metalheads se pasaron por la Gong el pasado miércoles para disfrutar de uno de los grandes eventos de metal extremo del año. Viendo el resultado final, de haberse producido la visita en pleno invierno quizás habríamos aspirado a un lleno. Pero bueno, nunca se sabe. El caso es que tanto estadounidenses como danesas ofrecieron unos conciertos increíbles.
Abrieron Konvent la noche. Lo hicieron con “In the Soot”, un excelente y habitual arranque. Las vi dos años atrás en Resurrection Fest y me encandilaron. Tenía ganas de repetir y no me decepcionaron.
Se presentaron bajo el humo de la Gong de Oviedo con nueva guitarrista, Amira Hernan, que ha entrado en la banda este mismo año y saltaron a escena de negro, como tiene que ser. Creo que había bastante expectación por verlas y juraría que hubo gente fue por ellas.
Lo suyo es el death/doom oferta musical a la que le dan un toque personal gracias sobre todo a la voz de Rikke, que más que cantar lo que hace es susurrar las voces. Su estilo recuerda por momentos al de otras bandas del momento y que incluso han pasado de forma reciente por la misma sala. “Grains” bien podría ser un tema de Grima, y es que las de Copenhague son unas maestras en la creación de pasajes totalmente atmosféricos a base de pesados y machacones riffs. Amira rasga sus seis cuerdas y Heidi Withington al bajo y Julie Simonsen a la batería le dan el peso de fondo con intensidad.
Su actuación no conoce de interacción con el público. Es como si cuatro cadáveres se plantaran en el escenario y empezaran a disparar riffs y susurros, ritmos repetitivos y temas que conforman una sonoridad única. Cuarenta y cinco minutos para amarlas u odiarlas. En mi caso, lo primero. Ojalá las pueda ver más veces ya sea en un escenario grande, donde ganan obviamente en visualidad, como de cerca como fue en este caso. Un lujo.
In the Soot
Grains
Sand Is King
The Eye
Fatamorgana
Ropes Pt. II
Pipe Dreams
Puritan Masochism
Misery Index están en las antípodas de Konvent. La lentitud dejó paso a la velocidad. Los riffs machacones a la violencia despiadada. Los susurros dieron paso a los aullidos.
Arrancaron de forma despiadada con “Embracing Extinction” y “The Carrion Call” y desde ese inicio hubo poco margen para el respiro siguiendo el ritmo de un Adam Jarvis (Lock Up, Pig Destroyer, Nailbomb, Hate Eternal...) descomunal en la labor.
Sabía lo que se venía, por una vez, había hecho los deberes antes de verles en vivo (casi nunca lo hago). Así que no me extrañó que continuaran con el guión soltando la thrashera “Strategies of Manipulation” detrás, empezando ahí un poco a disfrutar del show. Sí, soy más de thrash que de death, y cuando estás con ese empacho de pura muerte, un tema que te lleve a una atmósfera thrash se agradece.
Si bien hubo tiempo creo que para casi todas sus obras, es verdad que “Heirs to Thievery” fue más el centro de atención de un repertorio que incluyó hasta seis de los cortes de dicho disco.
La sala subía de temperatura. La buena asistencia pesaba en el ambiente y la banda sudaba arriba y la audiencia lo hacía abajo, con empujones por medio en la parte delantera. Vimos por vez primera las puertas de par en par. Al menos lográbamos respirar, aunque no sé cómo el grupo lo lograba, porque aquello no bajaba de intensidad. “New Salem” sonó a gloria y detrás llegó una “Ghost of Catalonia”(trata sobre la guerra civil en aquella tierra) que alteró el repertorio de anteriores citas.
“Heirs to Thievery” desató la locura y vimos a alguno volar sobre las cabezas. “Conspiracy ofNone” sirvió además de levantar un tanto el pie del acelerador y ser coreada con esos aires black que posee el tema.
Estar inmerso en labores de producción hizo que aquí tuviera que perderme un par de temas. Era lo que tocaba si no quería quedarme sin el final, que se me antojaba glorioso como así fue. Jason Netherton (bajo) y Mark Kloeppel (guitarra) se iban turnando en los guturales, algo que hacía mucho tiempo que no veía. Mientras, Darin se encargaba de las partes de guitarra más técnicas.
“Fed to the Wolves” sirvió para que me quedara embobado mirando para Adam Jarvis. Corre por Youtube un video suyo grabado en el Brutal Assault en esa canción que me alucina. Verle en vivo fue muy disfrutable.
Se despidieron con la absoluta locura de “The Spectator”, con la que practicamos algo de headbanging, aunque aún se dejarían un par de ellas más antes de decirnos el adiós definitivo.
“Manufacturing Greed’ y la demente y coreable “Traitors” sirvieron para concluir
En definitiva, un concierto que me gustó mucho más de lo esperado, en el que lo que más me asombró fue labor de Adam Jarvis, que seguro que quemó el enorme cachopo que se metió en un bar cercano antes del concierto. Eso sí que es ganarse el pan. Enorme.
Embracing Extinction / The Carrion Call
Strategies of Manipulation
Retaliate
New Salem
Ghosts of Catalonia
Conspiracy of None
Heirs to Thievery
You Lose
Exception to the Ruled
Fed to the Wolves
Conjuring the Cull
The Spectator
Manufacturing Greed
Traitors
© Diario de un Metalhead 2025.
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