Viernes noche. Cansadísimos, tras una dura semana de dormir muy poco. Teksuo y los maños Después De Todo actuaban en el Dompedro gijonés. Tras la cena, sentado en el cómodo sofá de casa, era casi preferible llevar dos buenos bofetones que pensar en coger el coche, hacerse los 45 kilómetros hasta Xixón y buscar aparcamiento.