sábado, 24 de diciembre de 2016

EL CIELO EN OVIEDO. 03.12.2016. Oviedo. LIZZIES. Crónica y fotos.


Por Larry Runner.

Tras una jornada infernal en la Sir Lauren's el día anterior con la presencia de Hate, Noctem y Atroxentis, a los gestores de la sala la actuación de LIZZIES les sonó a gloria celestial.


Aparte de eso, las chicas congregaron a más gente que Hate, Noctem y Atroxentis el día anterior. Porque mucho flipe con el metal extremo, pero la gente luego se queda en casa, y los hosteleros para mantener las salas abiertas necesitan hacer dinero, si no, a la mierda con todo.

El joven cuarteto femenino se pasó por fin por Oviedo, gracias a la iniciativa de Doc Producciones, para presentar su primer disco "Good Luck". Tenía muchísimas ganas de verlas en vivo tanto por las recomendaciones de amigos y compañeros como por lo leído de ellas. Y es que no todos los días puedes ver que se diga en una publicación del Reino Unido sobre una banda española que "son la banda que el heavy metal necesita en 2016".

Todos esos halagos podrían ser perjudiciales si luego las chicas no lo dieran en el escenario, pero … cumplen con creces. Se habían ganado mi simpatía días antes a través de la entrevista que les hice para el programa de radio, pero reconozco que como Santo Tomás, hasta que no lo comprobara por mí mismo, no me iba a fiar de lo que decían.


A pesar de su corta edad parecen salidas de un VHS, te transportan a una época mejor sin duda alguna donde los músicos eran estrellas de verdad y no lo de hoy en día, donde las bandas no nos sorprenden a veces porque al fin y al cabo son como nosotros y jamás envidiarías a alguien "mortal" como tú. Hay que ser algo más.

Su música, mezcla del hard rock y del heavy metal de los 80, te hace disfrutar, botar, cantar y pasártelo de miedo, y sólo su, de momento, corto repertorio hace que no estemos allí todavía disfrutando de su música.


Al micro Elena enamora por su simpatía y por lo bien que lo hace y el buen rollo que transmite. La sonrisa siempre está presente, mostrando lo bien que se lo pasa sobre las tablas y haciendo que los demás nos lo pasemos tan bien como ella. Contagia a todos, también a sus compañeras. Marina al bajo es una sonrisa perpetua y ya quisieran muchos que van de virtuosos de las seis cuerdas tocar con el feeling de Patricia. En la parte de atrás, Saray aporrea mejor que muchos de los hombres que he visto en el último año. Increíble lo de la baterista, de verdad. Toca muchísimo. Se lo tuve que decir.

Tocaron todo y más de su debut "Good Luck" y también un par de covers. El de AC/DC no me sorprendió, pero el "Kick Out the Jams" me dejó boquiabierto. Esa canción tiene 50 años y mira que homenaje le hicieron. Tengo miedo que ni sus padres hubiesen nacido. Aún así, alucinante la energía que le supieron imprimir y lo respetuosos que fueron con el hit de los MC5. Brutal.

Y es que triunfaron de lo lindo, se metieron a la gente en el bolsillo y a pesar de no tener más canciones tuvieron que volver al escenario para un bis. Repitieron "Viper" para que nos diéramos por medio conformes y abandonáramos la sala no sin antes charlar un poco con ellas, felicitarlas y pasar por el kiosko del merchan.


En un mundo donde siempre se lo ponemos tan jodido a las mujeres, lo suyo tiene un mérito enorme. Derrochan calidad en el escenario y simpatía fuera de él. Espero que ningún cabrón les arrebate lo segundo. Lo otro, a este ritmo, pronto meterá miedo. En cinco años serán increíbles.

© Diario de un Metalhead 2016.

Más crónicas de conciertos aquí.