By Simón García López.
La primera vez que escuché a INFESTDEAD fue en la Radio en 1996. Hace casi 20 años ya que recuerdo que fue durante el verano de aquel año. En una cadena de radio generalista además. Un programa de metal que presentaba Mariano Muniesa y que una vez por semana dejaba espacio para que una persona que controlaba verdaderamente de música extrema, no recuerdo quién la verdad, pusiese las novedades discográficas del momento.
Una de esas noches de verano empezó a hablar de un grupo llamado INFESTDEAD, creado por Dread (ex Marduk, el Axelsson de Edge of sanity) y el genio Dan Swäno, de aquella conocido sobre todo en los ambientes más extremos por su trabajo en Edge of sanity, grupo que nunca se ha valorado como merece desde mi punto de vista, y que algún día, cuando tenga algo más de tiempo me comprometo a poner en valor como creo se merece.
Presentó a INFESTDEAD como un grupo de Death metal satánico en la onda de Deicide, que no hacía mucho habían sacado el impactante Once Upon the Acroos y del que adoptaba la mayor influencia. Aquel hombre se presentaba en la radio con un EP de ellos titulado Killing Christ y lo vendía como un bombazo. De aquella yo tenía siempre una cinta virgen preparada para grabar las canciones que más me podían gustar del programa y después de escuchar aquella presentación, inevitablemente le di al REC. Todos expectantes. La canción I´ll be Black empieza a sonar. Poco más de dos minutos que pasaron en un suspiro. Además, este tema acaba de manera cortante y cuando llegó a su fin, detrás de los micros Muniesa tardó un rato en reaccionar. Había quedado tan impresionado que solo acertó a decir: Uuuuuuaaaaaauuuu!!!
Recuerdo perfectamente que fue así, porque aquella grabación debí de escucharla un millón de veces. Por suerte, poco después un amigo se hizo con el EP y pude escucharlo entero otro millón de veces.
Hace unos días, 20 años después, Larry nos dice que entró en Diario lo nuevo de INFESTDEAD. ¿¡Nuevo!? ¿¡Volvieron!? ¿¡En serio!? No. Lamentablemente no. No está Swäno a estas alturas para emprender un proyecto de Unholy Death metal me da la impresión, ni tan siquiera para otro Bloodbath, aunque nunca se sabe, ojalá.
INFESTDEAD reaparecen con una edición de esas que se llaman definitivas que contiene un doble CD sus dos discos completos, su primer EP, más un par de demos, todo ello bajo el título Satanic Serenades. La portada es obra de Hjules (Destruction, Annihilator) y representa el conjunto de lo que INFESTDEAD fueron y lo que este Satanic Serenades representa: demonios destruyendo un templo cristiano, lo que siempre fueron, con el órgano del templo destrozado en primer término, el final de la música, el final de INFESTDEAD.
INFESTDEAD siempre fueron un grupo de canciones rápidas y a la yugular, aunque con Jesusatan su estilo varió hacia un Death más pesado y complejo. Esto era Killing Christ y su primer largo titulado Hellfuck donde el sonido y el estilo eran prácticamente exactos. El uso de las baterías programadas fue siempre una característica del sonido. Este recurso le permitió a Swäno en esta época desarrollar muchos proyectos que compaginaba con Edge of sanity sin necesidad de buscar músicos para desarrollarlos. Le daba la facilidad de poder hacerlo todo él. Este fue el caso de INFESTDEAD y de Diabolical Masquerade con el que editó su primer disco a finales del mismo 96.
Y estando claro que su máxima influencia en su origen eran Deicide, el resultado final de su propuesta a mí siempre me pareció original y de gran calidad, suponiendo Jesusatan la ruptura definitiva y el alejamiento de sus orígenes para adentrarse en un estilo mucho más personal.
Una oportunidad excelente de rememorar viejos tiempos para los seguidores del grupo, de conocerlos si a alguien en aquella época se le escaparon o si a día de hoy los descubre por primera vez. INFESTDEAD sigue siendo un proyecto musical absolutamente recomendable de uno de los mayores genios que ha parido el mundo metal.
© Diario de un Metalhead 2016.
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