domingo, 29 de mayo de 2016

TENER UN TELONERO ESTATAL TENDRÍA QUE SER LEY.


By Larry Runner.

El metal de este país va camino de la desaparición a pasos agigantados, y te lo digo yo, que soy una persona más que optimista, pero viendo la actitud de algunos, la historia pinta mal.


Y es que algunos remamos río arriba luchando por lo que nos gusta, por lo que amamos, pero son más los que pasan de remar o nos mueven el timón para hundir este precioso barco en el que tanto hemos navegado. Y me explico.

Diario de un Metalhead, Subterráneo Heavy, y algunos medios más, no muchos por desgracia, apostamos por lo nuestro de continuo. Intentamos crear cantera, que la gente vaya a conciertos, nos dejamos nuestro tiempo en ello, en apoyar lo de aquí, pretendiendo crear escena.

Los medios "grandes" raramente lo hacen. En realidad el único que lo hace de verdad ahora, habiendo cambiado un poco de filosofía, es Metal Hammer, que en los últimos tiempos está llenando sus páginas de metal estatal, de grupos que empiezan, lo cual se agradece infinitamente. Y es que necesitamos crear cantera para que esto no se nos muera y si no, párate a pensar en lo mal que va el "negocio".

Los más veteranos no tienen ningún interés en las nuevas bandas. La gente que peina canas o que ni siquiera se peina ya, prefiere acudir a ver a una banda de tributo que a un grupo que empieza. Todo el día tiran de la frase de "a mi edad" y en nuestro país los metalheads de la época dorada se quedaron anclados ahí, en los 80, y todo lo que salió tras Fear of the Dark no tiene interés. No escuchan ni los nuevos discos de Saxon o Testament, ni siquiera el de Iron Maiden. Vale, todos conocemos excepciones, pero la mayoría actúa de esa manera, y si no, vete a un concierto de un grupo de "tributo" y vete a cualquiera de cualquier banda que tenga uno o dos discos y me cuentas.

Es una dejadez total, pero nadie puede obligarles a que escuchen esto o lo otro, cada uno es muy libre de pagar por ver lo que le apetezca. Y no tenemos que echar en cara nada a esa gente que al fin y al cabo en su juventud se dejó el dinero y las costillas en viajes interminables por carreteras nacionales, porque en su juventud no había ni autovías.

Sí, estos veteranos a los que se machaca de continuo por ir solamente a conciertos de tributo o a los grandes bolos tipo AXL/DC, ha cumplido con creces. En los 80 ir a ver a Manowar de Asturias a Donosti llevaba casi 20 horas de autobús entre ida y vuelta, y se llenaban autobuses. Así que esa generación ya ha cumplido, dejémosles en paz. Y si alguno se viene a ver bandas nuevas, pues mucho mejor, pero ya está. Dejarles vivir, por favor, que además se han comprado más discos que las próximas 10 generaciones juntas.

El problema no es ese, la culpa no es de los más veteranos ni de lejos. El problema está en que cuando vas a un concierto estás rodeado de gente que ronda los 30 y por debajo de esa edad cada vez ves a menos chavales. Y digo problema porque en unos años ocurrirá lo que pasa siempre, que la peña cumple los 40 y lo normal es que le tire más el sofá y vigilar a los críos o salir a cenar que ir a ver un concierto. Sí, en apenas un década los que hoy van de reyes del metal se irán acomodando a otro tipo de vida. Es lo que hay, es ley de vida. Habrá excepciones, claro que sí.

¿Qué viene detrás? El desierto, el puto desierto. Son muy pocos los chavales de hoy en día que tienen interés ya no digo por el metal, si no incluso por el rock. Ver un video de Deep Purple les parece la prehistoria. Los Rolling o AC/DC les dan la risa y un Highway to Hell o un Run To The Hills les importa un carajo. Al pobre que va a conciertos y se pone una camiseta negra, a veces hasta le miran mal o le hacen eso que ahora llaman bullying o acoso. Y lo sabéis.

¿Cómo se puede intentar arreglar? Es complicado, la verdad. Hay que apostar mucho por lo nuestro, luchar para crear afición. Intentar que lo nuestro se expanda, se oiga, que salgan nuestras bandas adelante, que se cree cantera.

¿Quién lo puede hacer? Está claro, medios y promotores.

Los medios, cumplen, algunos podrían hacer más, pero yo creo que en general, cumplen, salvo muy contadas excepciones que prefieren escribir cuatro líneas sobre un rumor de un grupo mainstream que hablar del nuevo álbum de una banda de Suspiria o de Art Gates. Y es que como en todo, hay gente que busca el éxito fácil, lo cual nos da un poco la risa.

Los promotores no cumplen. Incluso los hay que dicen no querer bandas nacionales en sus giras. Eso sí, a veces, si interesa, meten a una para que ponga el backline, porque entonces sí interesa. Aunque quizás necesiten una ayuda, no digo que no.

Y es que es muy bonito traer a Kreator, Angra, o cualquier otra banda de las que puede llenar salas. Esas que gustan a los de 30 hacia arriba sobre todo, pero ojo, que en 10 años te vas a quedar sin clientela y luego acabarás teniendo que comerte a artistas latinos de reggeaeton para subsistir.

Así que, intenta crear cantera si pretendes que esto subsista a largo plazo. Si no es así, en nada el rock en este país será historia y sólo funcionarán los bolos de tributo para gente anclada en el pasado.

Tener a un grupo telonero estatal en cada concierto de banda internacional tocando, tendría que ser ley. ¿Alguien controla lo de recoger firmas para llevarlo al congreso? Que lo ponga en marcha. Desde aquí le apoyaremos, pondremos hasta un banner.

Apostemos por lo nuestro.

© Diario de un Metalhead 2016.

TENER UN TELONERO ESTATAL TENDRÍA QUE SER LEY,  parte II aquí.