By Larry Runner.
Estaba claro que iba a ser una noche para recordar. DARKSUN presentaban su nuevo Crónicas de Áravan y evidentemente las canciones que pensábamos compondrían su repertorio sin duda alguna que nos iban a trasladar a algo más de diez años atrás.
La fiesta comenzó con unos ARENIA que llegaron predispuestos a calentar el ambiente y que lo lograron en parte a base de insistencia y de un buen final con Hades - tema que cierra su nuevo y flamante EP Hijos de la Noche- Mil Metros, que abría su debut La Sombra del Atlas y el cover de The Wickerman que siempre funciona.
Fran de ARENIA
DARKSUN comenzaron con Cuando Salga el Sol, tal y como esperaba pues es la canción que abre el nuevo disco, un Crónicas de Áravan para el que los seguidores de la banda han aportado financiación y repertorio, pues los doce cortes que componen el álbum fueron elegidos por el público mediante votación. Y es que Crónicas de Áravan no es más que un "best off" del que fuera último disco de Northwind El Retorno del Rey de 2002 (banda en la que estaban Dani G y Tino) y los dos primeros álbumes de DARKSUN: El Legado y El Lado Oscuro.
De repente estábamos en 2002. Uno cerraba los ojos y se acordaba de aquel año, el más grande de la historia de Northwind, cuando pareció que iban a dar el salto definitivo. Aquel verano tocaron en todos los festivales importantes del país, en todos, llegando a compartir escenario con grupos como Savatage, Rage, Sodom, Annhihilator, Moonspell, Sinergy y hasta el mismísimo Bruce Dickinson que por entonces giró en solitario en cinco festivales, uno de ellos aquel inolvidable Rock Machina de Moncofa. Poco más tarde las discusiones acabaron con la banda y todo se fue al traste, dividiéndose el grupo en dos partes que con más o menos éxito han llegado hasta nuestros días.
Dani G. de DARKSUN
Sí, Cuando Salga el Sol era un fantástico arranque, lo que pedía la noche y lo que a buen seguro esperaba un público que le daba un buen aspecto a la sala y que además venía con ganas, como se demostraría luego viendo como se cantaban las canciones desde el pit. Pensé entonces que igual nos tocaban los doce temas de seguido. Creo que no hubiese sido mala idea. Pero no, la banda jugó con el repertorio sin respetar el orden.
La Morada de Celler fue el segundo de los temas de la noche y el segundo de Northwind y aquel El Retorno del Rey. Seguíamos con el “remember”, sólo que hoy no era Dani G. quien se marcaba el solo. Mucho han cambiado las cosas en la banda con el paso de los años. David Figuer es el presente guitarra solista de la banda y él se encargó de los solos. Se le vio disfrutar a lo largo de la noche con los temas, muchos para él nuevos pues al igual que el bajista Adrián Huelga, no estuvieron presentes en ninguno de los discos de la trilogía. Cuando se publicó El Retorno del Rey, David era un adolescente que hacía poco pisaba el instituto y Adrián estaba también llegando a esa época de granos en la cara. A buen seguro que fue estupendo para ellos tocar unos temas que al fin y al cabo son historia del metal de este país. Northwind en su día aprovecharon la sombra proyectada por Avalanch y estuvieron envueltos en aquella vorágine heavy powermetalera de principios de siglo que nos trajo a bandas como Ankhara, Easy Rider, Tierra Santa, Azrael, etc. ¡Lo bien que nos lo hicieron pasar entre todos!
El listado de Crónicas de Áravan se había roto ya en el segundo tema de la noche y ahora ya nos podían salir por cualquier parte, pero en ese momento ya daba igual. La banda cuidó, como siempre, su puesta en escena. Todos de negro, como mandan los cánones, sabiendo cada uno cual es su lugar en el escenario, disfrutando de su papel y entregados a un público que había venido con ganas y que no se excedió en el uso del puñetero móvil sacando fotos. Quizás porque la mayoría de los asistentes no eran jóvenes en exceso. Fue una noche de treintañeros , de aquellos que en aquellos comienzos de DARKSUN eran adolescentes o poco más y muchos a buen seguro que comenzaron en esto del heavy con discos como El Retorno del Rey.
Tino de DARKSUN
Llegó Cielo Gris y en ella aprovecharon para lucirse tanto Dani Cabal en la batería como Adrián Huelga al bajo, que durante unos instantes se quedaron solos aportándole un plus especial a la canción y siendo el centro de atención por unos momentos. Con el paso del tiempo la banda ha renunciado a llevar teclista y esa parte va en formato sampleado. Adiós a los tiempos de Helena Pinto antes, de Víctor Fernández más tarde y de la también fantástica rizosa Ana Fernández, que estaba presente como una más del público luciendo camiseta de la banda y por la que, a diferencia de los que en su día fueron compañeros de carretera, no parecen pasar los años.
Con El Legado Dani G. aprovecha para saludar a ARENIA y soltar un buen discurso recordando sus comienzos musicales aprovechando así para tomar aire. Mientras sonaba la canción me di cuenta de que con el paso de los años El Legado, que siempre me pareció un temazo, se ha convertido de largo en mi favorita del grupo.
Los temas se iban sucediendo, La Traición también de El Legado sonó genial y con Veo la Luz, también del mismo álbum, Dani G. aprovechó para narrar lo dura que es la vida en la carretera aunque evidentemente "la mina y la mar lo son mucho más". El vocalista siempre sensible a las realidades sociales -es una persona que si hay que mojarse en las redes sociales, no duda en hacerlo- da la sensación de saber siempre lo que tiene que decir y estoy seguro de que el mensaje fluye de forma natural, sin falta de tener que prepararlo. Lo demostraría luego también con Esclavos del Miedo hablando del sufrimiento de los inmigrantes. Para otros cantantes las pausas son horribles y destrozan el show. A veces por fingir ser lo que no se es en realidad o simplemente por no tener nada que decir. Con Dani G. dudo mucho que eso suceda. Y sí, tiene razón, "hay mucho hijo de puta también en la música", por supuesto que sí. Como en todo.
David de DARKSUN
Con Dentro de Tí el cantante se gustó, tanto que llegó a soltarse en todos los agudos de una canción más que difícil de interpretar, aunque en Como el Viento ya pasó de arriesgar tanto. A pesar de presentarse al concierto "sin apenas dormir" según nos contó tras el show -algo perfectamente creíble viendo el ritmo de vida que lleva haciendo de productor, técnico de directo y guitarrista en mil bandas- defendió las canciones con holgura, no escatimando con lo agudos salvo quizás en esa Como el Viento.
El trabajo a la guitarra de David Figuer fue quizás lo más destacable a lo largo de la noche junto con el bruto de Cabal aporreando una batería que parecía querer destrozar. David da la sensación de ser un chaval tímido y no se prodiga en redes sociales dando la nota. Quizás eso le haya dejado hasta hoy en día un poco apartado del mundo del famoseo musical de la región y mientras hay mediocres absolutos siendo nominados a premios a veces por tocar incluso canciones de otros, David se mea encima de todos ellos con su Ibanez a base de esfuerzo y talento. Con Prisioneros del Destino se despidieron, aunque como es habitual, para hacer ese papelón de irme, bebo dos tragos y regreso enseguida al primer silbido. Ya sabéis como va eso.
Adrián de DARKSUN
Para el "encore" que dicen los guiris tocaron "otres tres", como se suele pedir en esta Asturias nuestra, cerrando con El Lado Oscuro (creo recordar, pues en algunos momentos me dejé llevar y no tomé todas las notas que debiera) y por supuesto Corazón de Dragón.
Fue una gran noche, con una banda de la que celebro su regreso. Con el paso de los años y la constancia se han ido ganando el respeto sin ser del todo profetas en su tierra. Les falta aún rodaje, pero estoy seguro de que los directos y algunos ensayos más les darán lo poco que necesitan para que sus conciertos sean los mejores shows de su historia.
Ya tienen dos fechas confirmadas, una muy cercana:
12 de Febrero, León: Studio 54 + Crowthunder
5 de Marzo, Bilbao: Sala Azkena + Kauce
© Diario de un Metalhead 2016.
+ Crónicas de conciertos aquí.
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