sábado, 14 de noviembre de 2015

LEATHER HEART: Comeback (2015 - The Fish Factory ) Madrid.



By Diego Rodríguez Liébanas.

El éxito que tuvo el Heavy Metal en los barrios de la periferia de Madrid a lo largo de los ochenta fue realmente arrollador. Por mucho que los medios oficiales reescriban la historia, el Rock Duro y el Heavy Metal tuvieron un impacto inmensamente superior entre la mayoría de los jóvenes de la capital al de la tan cacareada y elitista movida madrileña.



Aunque en la actualidad el estilo está lejos de ser mayoritario, ecos tan potentes como los de aquella época siguen aún vigentes gracias a personas que dedican cuerpo y alma a que esto siga para adelante. Asociaciones, bares, pubs, tiendas, fanzines, publicaciones en internet, programas de radio… todos trabajan duro a sabiendas de que el trozo de pastel es pequeño y que merece más la pena disfrutarlo todos juntos que estar cada uno haciendo la guerra por su cuenta. Con este caldo de cultivo no debe extrañarnos que cuatro adolescentes de uno de esos barrios, Alameda de Osuna, decidan, en pleno siglo XXI, formar una banda de Heavy Metal Clásico. El batería Manuel Rueda, y los dos guitarristas Alejandro Gabasa y Jorge Piñero empezaron hace un lustro con este proyecto. Tardaron un año en encontrar la persona adecuada para encargarse de las labores vocales en manos de Adrián González mientras que en el puesto de bajista, después de varios cambios, se ha asentado Sergy Alvarado.



Sorprende que antes de publicar su EP homónimo en 2014 gozaran de una trayectoria en directo bastante interesante teloneando bandas importantes como Muro o Skull Fist y saliendo de nuestras fronteras para dejar su impronta en el Headbangers Open Air alemán. ¿Coordenadas musicales? Heavy Metal tradicional que pica de las vertientes americana e inglesa situado sobre todo en el primer lustro de los ochenta y que puntualmente se adentra en terrenos más Hard Rock.  Judas Priest, Quiet Riot, New Wave Of British Heavy Metal, WASP, Ozzy Osbourne… ¿Sonido? Bastante bueno. Con un protagonismo claro de las guitarras y la voz, es indudable que una vez has escuchado el disco uno de los puntos fuertes es la producción. Limpia y potente, equilibra los anhelos vintage, lógicos en una banda de sus influencias, con frescura y brío aunque un punto más de peso y crudeza en las rítmicas hubiera sido interesante.


anhelos vintage con frescura actual

Comenzamos con dos ramalazos muy Ozzy Osbourne de la época post Rhoads. The Crow es un tema rápido y con nervio formado por varias partes que funcionan perfectamente mientras que Destiny, más sencillo y melódico, contiene un solo a doble guitarra apoteósico a través del cual Gabasa y Piñero te dejan una tarjeta de presentación inmejorable. La tercera, Leather Heart, único tema rescatado de su EP, vuelve a tener un solo en la parte final de quitarse el sombrero. Muy en la onda de los Thin Lizzy más heavies, nos sirve también para comprobar la mejora cualitativa del sonido de este disco en comparación con su anterior trabajo. La fiesta continúa con una efectiva Depths Of Space, de cadencia más lenta y pesada, y con el gran trabajo realizado en la versión del Danger Zone, tema que procede de aquel disco en solitario de Tony Iommi que al final salió bajo el nombre de Sabbath. Destaca la labor de Adrián González atando en corto una interpretación difícil, no en vano se calza las botas de todo un Glenn Hughes. Sexta y seguimos en buena línea con Rock´n´Roll Soul, tema que goza de una frescura y una espontaneidad que evocan lo mejor de la NWOBHM.



En mi opinión, después de ofrecernos una buena muestra de la potencialidad de la banda a través de canciones en las que las influencias son bastante obvias, en las últimas cuatro canciones se quitan un poco la careta y se lanzan hacia eso que será el verdadero rostro de Leather Heart obteniendo diferentes resultados. Hopeless Sinner no llega al nivel que traía el disco ya que la concatenación de los diferentes fragmentos no llega a cuajar convirtiéndose en mi opinión en el tema más flojo de la obra. Restless, que recupera pulso e intensidad, destaca por el trabajo de Sergy Alvarado al bajo y por fluir al ritmo de unas rítmicas muy conseguidas. La penúltima, For You, balada de indudable calidad, dulce y emotiva, tiene un pero clarísimo para mí que es la ausencia de un solo de mayor envergadura en la parte final de la misma que la hubiera encumbrado. Terminamos con Comeback, la canción más larga y quizá la más ambiciosa. Con unos teclados muy interesantes al inicio sube y baja de intensidad y velocidad sin perder vigor en ningún momento. Además de unos solos de lo más atinados que ya no son novedad, destaca la parte intermedia en la que la canción se para y vuelven unos teclados que me recuerdan al The Sun Goes Down de Lizzy. Buena guinda para el pastel.



Comeback es un gran trabajo en el que destaca por encima de todo el trabajo de guitarras, frescas, divertidas, inspiradas. Solos de todos los colores en partes rápidas, lentas, pesadas o más ligeras que siempre molan y siempre suman calidad al tema. Jake E. Lee y John Sykes estarían verdaderamente orgullosos de ser influencias de un trabajo tan logrado. ¿Otro punto fuerte? La interpretación vocal. Adrián González se mueve cómodo en tres registros distintos y suele darle a los temas lo que requieren, aunque a veces abusa de falsete. Tiene un surtidor de voz privilegiado y me consta que su rendimiento en directo es muy bueno por lo que seguro que conseguirá ajustar su interpretación en siguientes trabajos. El próximo viernes 13 de noviembre actuarán en Madrid junto a Lizzies en una cita que no se debería perder aquel que pueda y quiera disfrutar de dos de las mejores bandas de Heavy Metal Clásico que hay en este momento en el país.





© Diario de un Metalhead 2015.

+ HEAVY ESPAÑOL aquí.