lunes, 18 de mayo de 2015

BANDAS TRIBUTO: esa peste!


By Larry Runner.

Llega el buen tiempo. Las fiestas, los festivales y las bandas de tributo que se ponen a trabajar como nunca, esas a las que algunos se refieren como "esa peste".


El debate siempre está ahí y parece no tener fin. Pero yo hago distinciones y no todos son iguales. Hablo de las llamadas bandas tributo, y la opinión sobre ellas es como los culos, todos tenemos uno. 

Sí, yo hago distinciones, no todas las llamadas “bandas de tributo” son iguales, y algunas están haciendo mucho daño. Y es que hay bandas de tributo que realmente son grupos que imitan al original dentro de sus posibilidades y a un alto nivel, y otros que se hacen llamar banda de tributo, pero que en el fondo no lo son y simplemente son grupos que tocan versiones, como toda la vida existió, sólo que de una sola banda en concreto. Ahí es donde comienzan las faltas de respeto.

El debate vuelve a surgir de forma airada en las redes sociales cuando vemos el anuncio de un festival de sucedáneos bautizado como Replicate Music Festival a celebrar los días 17 y 18 de Julio en Castellón de la Plana.


Inmediatamente surgen las opiniones, algunas muy airadas y los insultos. La verdad es que la propuesta es un tanto descarada. Dos días haciendo pasta a costa de las canciones de otros no parece muy ético. Pero el problema viene de que hay demanda de este tipo de formaciones, con lo cual hay que entender que cuando hay demanda de un producto, haya gente que lo comercialice. Lo ético entraría en juego si tras todo este tipo de historias hay gente lucrándose y los artistas creadores de las canciones no ven un duro. Eso sí que es vivir a costa de los demás y ahí es donde se abre el espacio para las críticas.

Independientemente del tema lucrativo, eminentemente por el que se mueven iniciativas como el citado festival, habría que hablar de lo musical, del espectáculo que se ofrece y si es realmente digno o no.

A lo largo de los últimos años han florecido las llamadas bandas de tributo, pero yo, como digo, hago distinciones. Unas lo son realmente y otras hacen simplemente versiones, no rinden homenaje ni hostias en vinagre. Van a apañar la pasta a costa del nombre de otro artista, lo cual ha levantado polvo, suspensiones y problemas legales en algunos casos cuando dichas bandas de tributo lo eran de grupos nacionales. Y es que una cosa es poner en el cartel un logo parecido y otra cosa utilizar el logo de la banda original en grande para poner debajo en pequeño el de la formación que toca realmente. Algunos como Extremoduro se han puesto a vigilar. Lógico.

Independientemente de qué aparezca en el cartel, lo que realmente marca la diferencia es la puesta en escena. Hay bandas que se molestan y otras que salen a tocar con las pintas con las que llegaron a la sala. Es ahí donde radica la gran diferencia y donde puede entrar en juego el respetar o no a los músicos que dicen rendir tributo.


Hay formaciones trabajándose el tributo de verdad. Salen al escenario y clavan los temas. Sí, los clavan, en ocasiones cuentan hasta con un vocalista que incluso mejora a la versión original actual. Cierras los ojos y estás escuchando al grupo en sus buenos tiempos. En ese sentido sin problema. El impacto lo tienes cuando miras al escenario y ves que no son los auténticos. Pero hay grupos que se trabajan esa puesta en escena, que la llevan tan lejos como sus posibilidades económicas les permiten, y es ahí cuando aparece la banda de tributo y desaparece el grupo de versiones.

No es lo mismo salir maqueado con la misma ropa que el original, con una decoración que te acerque, con los maquillajes, etc, que salir con unas putas bambas y un bermudas. Por mucho que te empeñes, la segunda opción es una mierda si te pones a tocar temas de Whitesnake, Maiden, Kiss o los mismísimos Scorpions. O haces tributo o haces versiones.

Tributo es lo de Iron What?, lo de Stingers, por citar a un par de ellos que lo hacen bien. Ellos sí. Y pocos más. Gente como los que cito se lo trabaja de lo lindo e incluso están aceptados por las bandas originales y a veces hasta han compartido escenario con algún miembro original. Todo lo que ves en su show es intentando calcar, imitar en todo a su banda de inspiración. Eso sí que es un tributo. Vale que no vas a tener tirolinas ni pasarelas, ni tantos medios, pero sí un show digno que te va a transmitir esa sensación de haber visto algo muy similar a lo de verdad. Muy digno y que te hace llegar casi las sensaciones que te hacen vivir los originales. Otros muchos no se molestan en cuidar esos detalles, simplemente salen y tocan las canciones, incluso en ocasiones lo hacen muy bien, pero falla el aspecto visual, y ahí es donde no tienen derecho a llamarse bandas de tributo. No lo son. Se la sopla uno de los detalles imprescindibles y que marca realmente la diferencia.

El debate sigue ahí, y me temo que cada día irá a más, las críticas también, nunca desaparecerán. Las bandas tributo florecen como champiñones, pero en ocasiones no merecen ese adjetivo, son más bandas de versiones, algo que es natural, que siempre ha pasado, que siempre ocurrirá y que fue la forma en la que arrancaron muchas de las que luego fueron grandes bandas componiendo sus propios temas. Las bandas de versiones son geniales, son indispensables y dignas, pero siempre que no quieran engañar a nadie con lo que no es.

Sepamos marcar la diferencia entre banda tributo y banda de versiones. Siempre es clara, ahí no existe debate. Las bandas de tributo que de verdad lo son, no son ninguna peste.


Foto: Carlos de Iron What? en Gijón en 2014. Un tributo llevado a su máxima expresión.

© Diario de un Metalhead 2015.

1 comentario:

Otoski dijo...

Con el rock comienza a pasar lo mismo que con el flamenco, que tras sus sesenta años de historia (y doscientos de flamenco), los grandes temas son verdaderos clásicos y si están bien interpretados no te importa que no sea el propio autor, más si este ya ha muerto. Para mi escuchar unas seguiriyas de Manuel Torre bien catás por quien sea, me parece tan sublime como haber podido ver al mismísimo creador, pero lo mismo me pasa con un tema de Cream o Jimmy hendrix, si el que lo toca le pone alma, corazón y rabia. Si se toca no solo "un clasico, si no todo un repertorio de un mismo cantaor o grupo y se hace bien, mejor que mejor. Yo la verdad es que prefiero la música en directo a cualquier tipo de enlatado y por eso me parece admirable que haya gente con tanto amor a los clásicos del rock o flamenco, para intepretarlos como si fueran propios. Por no decir los lamentables temas propios que cantan algunos grupos o flamencos. De todos modos coincido con el autor que Iron What, son mucho más que un tributo, son unos enamorados de Iron Maiden que saben trasladar su amor al público, y eso no es solo ensayar, es mucho más.
Un saludo.