By Sonia M.
THOSE FURIOUS FLAMES lanzarán la continuación este mismo año, como reza en su página web, pero de lo que os vengo a hablar hoy es que "estas llamas enfurecidas" procedentes de Suiza facturaron hace ya casi cuatro años este Trip to Deafness, elegante y a la vez marchoso, cargado de un buen hard rock.
En este viaje a la sordera nos deleitarán con riffs directos y sin demasiadas complicaciones. Por momentos hasta parecen simplones, pero se pegan y acaban siendo resultones. La pegada de la batería marcando el ritmo es una de las cosas más destacables.
Yari a la voz, intenta darle un registro más áspero, sin llegar a ser un Lemmy acatarrado. Las guitarras de Yann Nick y Joe Napoli suenan bien, se complementan con gusto, entre algún solo como el que aparece en When the city is sleeping y sobre todo los acordes más potentes. Uno de los temas que más me ha gustado ha sido el que lo cierra y bautiza el disco. Cargado de potencia desde el primer minuto, es un corte que hubiese elegido sin dudar para abrir el disco. Muy pegadizo y perfecto para el directo, para desmelenarse sin medias tintas. Pienso que quizás lo han colocado al final para que te entren las ganas de volver a empezar de nuevo.
Dentro de los cortes más destacados encontramos You´re like a Drug, el más largo de los diez y que cuenta con una intro muy intersante. Fuck the Rest es otro que es carne de directo, con apartado para las palmas incluido. Sin duda su fuerte son los temas más cañeros, a mi parecer. No acabo de verlos en las canciones más pausadas. En definitiva, nos encontramos ante un disco agradable, que entra a la primera y que consigue hacernos pasar una media hora entretenida. Sin embargo, aún los veo lejos de un nivel notable y no será un disco que pase a las historia del hard rock más callejero por así decirlo.
Aún siento que les falta esa chispa que en este tipo de grupos engancha definitivamente. Veremos si con su nuevo lanzamiento contentan esta faceta.
Estos días están de gira por nuestro país. Si te han gustado, no te los pierdas.
© Diario de un Metalhead 2014.
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