Uno de los grandes del género vuelve con disco nuevo y con gira mundial (que pasará por nuestro país a finales de este mes). Y vienen con ganas, y es que cuando super grupos de rock progresivo juntan cuatro mentes privilegiadas como es el caso, suelen salir cosas como ésta.
Volviendo la vista atrás, cuando Neil Morse señaló que estaba interesado en reunirse con sus colegas transatlánticos en 2009 llegó la máxima expresión del progresivo con The Whirlwin álbum con sólo una pista de setenta y siete minutos. ¡Están Locos! Dirían algunos detractores. Los más puristas fijo que se frotaron las manos, es cuestión de gustos. En Kaleidoscope, han revertido esta forma de pensar y han hecho un disco mas “normal”, cinco temas, tres de los cuales son de menos de ocho minutos de duración. Éso deja dos que son más de veinticinco minutos… Y siguiendo en el ejemplo anterior… “Vaya comerciales se han vuelto!” dirán ahora los puristas y los detractores… Pues probablemente sigan diciendo que son unos locos… Desde mi punto de vista creo que han hecho la conjunción perfecta.
Pero bueno, vamos al meollo del asunto. Abre el disco, Into The Blue la que para mí es sin lugar a dudas la mejor pieza del álbum. Veinticinco minutos que comienzan con suavidad y sube y baja según vamos pasando por los diferentes capitulos del tema, a veces con las secciones silenciosas, pero todo ello acompañado por unos teclados y unas atmósferas preciosas. Conjunta la melodía al principio con la epicidad en la parte final. Una obra de arte.
La siguiente es Shine, que es la canción que suena más comercial en el álbum a pesar de durar siete minutos y medio. Una canción sólida con unos arreglos corales muy bonitos. En ocasiones me recuerda a We All Need Some Life de su álbum de debut por la forma en la que esta estructurado el tema y alguna de sus partes.
Black As The Sky quizás sea la que menos funcione dentro del conjunto. Le falta un algo durante toda la canción. Puede entrar un poco en las primeras escuchas pero finalmente y dentro de la calidad del álbum se queda francamente por detrás… ¿Es un fallo su colocación en el tracklist? Es posible...
Podríamos decir que Beyond The Sun es la “balada del disco”. Y hay comillas porque tampoco es que sea exactamente ese tipo de canción. Una vez más, los teclados se hacen con el tema y nos guían, apoyados por una sobresaliente melodía dentro de esa voz emocional. Gran tema, cuatro minutos y medio de mucho feeling.
Tras las tres canciones más cortas, nos llega la segunda masterpiece. Durante treinta minutos esta vez, la canción que da titulo al álbum recuerda muchas veces a los Spock´s Beard de Neal Morse tanto en estructuras como en pasajes de teclado y voz. Contiene ideas muy similares a Into The Blue aunque quizás se quede algo más corta en cuanto a calidad que la primera del disco.
Podríamos decir que el álbum contiene lo mejor al principio y al final, separados por dos buenos temas y uno claramente de relleno. Volviendo al ejemplo del principio de la entrada, opino que los más puristas y amantes de los anteriores discos de Transatlantic estarán encantados, pero los más críticos con el estilo no se sentirán muy identificados, y me juego lo que queráis a que calificarían el disco de peñazo. Mi opinión al respecto es clara, con este line-up si te gusta la música sería de escucha imprescindible, porque son cuatro monstruos cada uno en su instrumento y las composiciones no les van a la zaga.
Transatlantic son:
Neal Morse (ex-Spock's Beard)
Mike Portnoy(The Winery Dogs, ex-Dream Theater)
Roine Stolt (The Flower Kings)
Pete Trewavas (Marillion)
© Diario de un Metalhead 2014. Si nos vas a copiar, al menos cita la fuente.
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