Fotos: Sergio Blanco
Texto: Larry Runner
Escribir a estas alturas una crónica sobre un concierto de Angelus Apatrida es probablemente una de las tareas más difíciles que se me pudiera encargar. Y es que se me antoja harto complicado hablar de ellos tras haber cubierto sus eventos casi una decena de veces y más aún cuando ser objetivo es bastante difícil por la cercanía humana y porque desde aquel viaje a su ciudad siempre tienen algunas palabras de agradecimiento o recuerdo para el que ésto escribe.
Los albaceteños habían visitado la capital asturiana hace dos años y en aquella ocasión la céntrica Sala Tribeca había presentado un muy buen aspecto, repleta de gente. Pero entonces era difícil discernir la cantidad de espectadores que habrían acudido a verles a ellos, pues sus acompañantes aquella noche fueron los asturianos Sound of Silence, una banda que sí es profeta en su tierra y por lo tanto con una gran capacidad de convocatoria.
En esta ocasión a los hijos predilectos de la ciudad de las navajas les acompañaban en el cartel los jovencísimos locales Soldier, que presentaban su disco de debut “Gas Powered Jesus” en su ciudad, pero que a día de hoy el tirón que tienen, y ellos son los primeros que lo saben, aún es limitado. Así que viendo como estaba la Sala Tribeca, podemos afirmar que Angelus Apatrida casi llenó en Oviedo.
Excelente fue la idea de Soldier. Querían presentar su álbum ante mucha gente y acostumbrados a tomar las riendas ellos mismos de su destino, adaptaron el papel de promotores y corrieron con los todos los riesgos económicos que implica el pagar el alquiler de una sala, el equipo de sonido, el propio técnico y la contratación de una banda con un buen caché como el que tiene el cuarteto insignia de Century Media en España.
SOLDIER comenzaron puntuales y ofrecieron un excelente show que además contó con buen sonido. Apadrinados por grandes de la región como Dani G. de Darksun, que hizo las veces de técnico tras la mesa, o Pablo García de los enormes WarCry no podían decepcionarnos y a fe que no lo hicieron. Desgranaron lo mejor del “Gas Powered Jesus” sin inmutarse y sin apurarse demasiado cuando uno de sus amplificadores les quiso decir adiós.
Y es que canciones como “Between Two Masters”, “Revolt” o la balada “The Road” tienen la suficiente entidad como para que les prestes atención aunque aún no hayas escuchado el recomendable disco de debut.
Además de los temas propios tuvieron la excelente idea de caldear aún más el ambiente con el “Madhouse” de Anthrax y contaron con el espontaneo salto al escenario del vocalista de otra banda que viene pisando fuerte en Asturias: Oxidixe.
En definitiva, un show de alrededor de una hora que sirvió para comenzar a sudar y que dejó grandes sensaciones a todos por lo que pude comprobar charlando luego con algunos amigos y con músicos de otras bandas que estaban presentes en la sala.
ANGELUS APATRIDA llenaron la Tribeca y sembraron las hostilidades en la pista desde la inicial “You Are Next”, primera de las muchas canciones que sonarían a lo largo del show. En el momento de escribir estas líneas nuestro cuello aún nos recuerda los excesos de nuestro incesante “headbanging”.
Y es que hay que ser de piedra o no tener sangre en las venas para no estar cabeceando de continuo si te gusta esto que desde que yo era un colegial se conoce como thrash metal. La banda ofreció un repertorio insuperable presentando “The Call” a lo grande, hasta siete temas, pero respetando todos sus discos, tocando canciones de todos ellos.
Ahora echamos mano a nuestro castigado cuello, pero ayer no lo pensábamos cuando nos volvíamos locos con canciones como “Of Men And Tyrants”, “One Side One War”, “Blast Off” o “Be Quick or Be Dead” del anterior “Clockwork”. Versión ésta de Iron Maiden que en palabras del propio Guillermo Izquierdo, sienten como un tema más de Angelus Apatrida y se ha convertido en fija en su set-list en estos últimos dos años.
Ayer me di cuenta de lo fantástico que fue en su momento y es a día de hoy “Give ‘em War” y de lo aparcado que lo tengo desde hace tiempo por culpa de la altísima calidad de los dos últimos trabajos discográficos editados por su multinacional alemana. Canciones como “Never Forget”, “One Side One War”, “Vomitive” o “Corruption” llegará un momento en que quizás tengan que dejar de aparecer en el repertorio, y será difícil tanto para la propia banda que las disfruta sobre las tablas, como para los locos de abajo que montan auténticos cirios de agresividad desplegando todo el repertorio que el público de los conciertos de thrash suele ofrecer. Sí, no faltaron los “circle of death”, “wall of death” y todos los “death” que os podáis imaginar, siendo más de uno el que acabó con sus posaderas sobre el húmedo suelo del infierno en que se convirtió la Tribeca sin aire acondicionado, apagado para hacernos beber si no queríamos morir.
Como apuntaba antes, el repaso a “The Call” fue bastante serio. La inicial “You Are Next”, de la que han puesto a la venta una llamativa camiseta, vino seguida de tres temas más del disco: “At The Gates Of Hell”, “It´s Rising” y “Violent Dawn”. También sonaron otros cortes del álbum a lo largo de la noche. Canciones que ya se nos han convertido en favoritas como “Killer Instinct” de la que han estrenado un videoclip recientemente, “Fresh Pleasure” o “Blood On The Snow”, muchas de ellas con un combativo Guillermo que para presentarlas, tanto en el caso de estas nuevas canciones como a las ya mas machacadas, no tuvo reparos en arremeter contra los maltratadores, la iglesia católica, los políticos corruptos y todo aquel que merezca el desprecio por estar en este mundo para hacer daño.
Si bien toda la banda ralla a un nivel técnico elevado, el trabajo de Víctor Valera tras los tambores, sobre todo con los temas de su último disco, me deja perplejo. Recuerdo los primeros días de escucha de “The Call”. Cuando me fijaba en el trabajo de la batería, me parecía imposible que el muchacho pudiera tocar algunas partes. ¡Que bestia! Incluso llegué a contactar con él vía internet para comentarlo. Ya tenía ganas de volver a verle en vivo para comprobar como llevaba al directo todo ese brillante trabajo del disco. ¡Menuda máquina! ¡No podía quitarle ojo! Muy grande el señor Valera.
No se olvidaron de su álbum de debut “Evil Unleashed”. Sí, lo pasamos en grande con el “Versus the World” y con el “Fuck You”, canciones habituales en sus conciertos, pero también sonó “Hereditary Genius”, un tema que casi tenía olvidado. Al menos para mi fue toda una sorpresa. Parecía que aquello no iba a tener final, pero sí lo tuvo, y por supuesto, fue con “Thrash Attack”, un excelente himno que ojalá sea para siempre el tema que cierre sus conciertos. “Give’em War” forever.
Muy grandes. Enormes. Indiscutibles. Ya estamos soñando con volver a verles pronto. Se les admira y se les quiere. Señores, ayer vimos otra vez a Angelus Apatrida y lo siento por aquellos asturianos que se lo perdieron. Si pasan por vuestra ciudad no dejéis pasar la oportunidad. No os acordaréis del dinero pagado por la entrada. Es más, es probable es que incluso paséis por el kiosko del “merchan” a dejar los últimos euros.
Gracias a todos ellos por su simpatía. A Víctor por el sincero abrazo antes del concierto. A Guillermo por el saludo desde el escenario una vez más. A Jose por la cerveza cuando estaba al borde de la deshidratación por no perder el sitio. Y en esta ocasión sobre todo a David por el detallísimo de vestir la camiseta de Diario de un Metalhead.
Gracias a Soldier por traerlos y enhorabuena por haber cumplido todos los objetivos, el económico también. Llenazo.
Volverán.
Los albaceteños habían visitado la capital asturiana hace dos años y en aquella ocasión la céntrica Sala Tribeca había presentado un muy buen aspecto, repleta de gente. Pero entonces era difícil discernir la cantidad de espectadores que habrían acudido a verles a ellos, pues sus acompañantes aquella noche fueron los asturianos Sound of Silence, una banda que sí es profeta en su tierra y por lo tanto con una gran capacidad de convocatoria.
En esta ocasión a los hijos predilectos de la ciudad de las navajas les acompañaban en el cartel los jovencísimos locales Soldier, que presentaban su disco de debut “Gas Powered Jesus” en su ciudad, pero que a día de hoy el tirón que tienen, y ellos son los primeros que lo saben, aún es limitado. Así que viendo como estaba la Sala Tribeca, podemos afirmar que Angelus Apatrida casi llenó en Oviedo.
Excelente fue la idea de Soldier. Querían presentar su álbum ante mucha gente y acostumbrados a tomar las riendas ellos mismos de su destino, adaptaron el papel de promotores y corrieron con los todos los riesgos económicos que implica el pagar el alquiler de una sala, el equipo de sonido, el propio técnico y la contratación de una banda con un buen caché como el que tiene el cuarteto insignia de Century Media en España.
SOLDIER comenzaron puntuales y ofrecieron un excelente show que además contó con buen sonido. Apadrinados por grandes de la región como Dani G. de Darksun, que hizo las veces de técnico tras la mesa, o Pablo García de los enormes WarCry no podían decepcionarnos y a fe que no lo hicieron. Desgranaron lo mejor del “Gas Powered Jesus” sin inmutarse y sin apurarse demasiado cuando uno de sus amplificadores les quiso decir adiós.
Y es que canciones como “Between Two Masters”, “Revolt” o la balada “The Road” tienen la suficiente entidad como para que les prestes atención aunque aún no hayas escuchado el recomendable disco de debut.
Además de los temas propios tuvieron la excelente idea de caldear aún más el ambiente con el “Madhouse” de Anthrax y contaron con el espontaneo salto al escenario del vocalista de otra banda que viene pisando fuerte en Asturias: Oxidixe.
En definitiva, un show de alrededor de una hora que sirvió para comenzar a sudar y que dejó grandes sensaciones a todos por lo que pude comprobar charlando luego con algunos amigos y con músicos de otras bandas que estaban presentes en la sala.
Set-list:
1. A Handful of Children (intro).
2. Between Two Masters.
3. Destroyers.
4. Gas Powered Jesus.
5. Kill My Soul.
6. Winebrick Prophet.
7. The Road.
8. Stand Your Ground.
9. Madhouse. (Anthrax cover)
10. Revolt.
11. Maniac.
Y es que hay que ser de piedra o no tener sangre en las venas para no estar cabeceando de continuo si te gusta esto que desde que yo era un colegial se conoce como thrash metal. La banda ofreció un repertorio insuperable presentando “The Call” a lo grande, hasta siete temas, pero respetando todos sus discos, tocando canciones de todos ellos.
Ahora echamos mano a nuestro castigado cuello, pero ayer no lo pensábamos cuando nos volvíamos locos con canciones como “Of Men And Tyrants”, “One Side One War”, “Blast Off” o “Be Quick or Be Dead” del anterior “Clockwork”. Versión ésta de Iron Maiden que en palabras del propio Guillermo Izquierdo, sienten como un tema más de Angelus Apatrida y se ha convertido en fija en su set-list en estos últimos dos años.
Ayer me di cuenta de lo fantástico que fue en su momento y es a día de hoy “Give ‘em War” y de lo aparcado que lo tengo desde hace tiempo por culpa de la altísima calidad de los dos últimos trabajos discográficos editados por su multinacional alemana. Canciones como “Never Forget”, “One Side One War”, “Vomitive” o “Corruption” llegará un momento en que quizás tengan que dejar de aparecer en el repertorio, y será difícil tanto para la propia banda que las disfruta sobre las tablas, como para los locos de abajo que montan auténticos cirios de agresividad desplegando todo el repertorio que el público de los conciertos de thrash suele ofrecer. Sí, no faltaron los “circle of death”, “wall of death” y todos los “death” que os podáis imaginar, siendo más de uno el que acabó con sus posaderas sobre el húmedo suelo del infierno en que se convirtió la Tribeca sin aire acondicionado, apagado para hacernos beber si no queríamos morir.
Como apuntaba antes, el repaso a “The Call” fue bastante serio. La inicial “You Are Next”, de la que han puesto a la venta una llamativa camiseta, vino seguida de tres temas más del disco: “At The Gates Of Hell”, “It´s Rising” y “Violent Dawn”. También sonaron otros cortes del álbum a lo largo de la noche. Canciones que ya se nos han convertido en favoritas como “Killer Instinct” de la que han estrenado un videoclip recientemente, “Fresh Pleasure” o “Blood On The Snow”, muchas de ellas con un combativo Guillermo que para presentarlas, tanto en el caso de estas nuevas canciones como a las ya mas machacadas, no tuvo reparos en arremeter contra los maltratadores, la iglesia católica, los políticos corruptos y todo aquel que merezca el desprecio por estar en este mundo para hacer daño.
Si bien toda la banda ralla a un nivel técnico elevado, el trabajo de Víctor Valera tras los tambores, sobre todo con los temas de su último disco, me deja perplejo. Recuerdo los primeros días de escucha de “The Call”. Cuando me fijaba en el trabajo de la batería, me parecía imposible que el muchacho pudiera tocar algunas partes. ¡Que bestia! Incluso llegué a contactar con él vía internet para comentarlo. Ya tenía ganas de volver a verle en vivo para comprobar como llevaba al directo todo ese brillante trabajo del disco. ¡Menuda máquina! ¡No podía quitarle ojo! Muy grande el señor Valera.
No se olvidaron de su álbum de debut “Evil Unleashed”. Sí, lo pasamos en grande con el “Versus the World” y con el “Fuck You”, canciones habituales en sus conciertos, pero también sonó “Hereditary Genius”, un tema que casi tenía olvidado. Al menos para mi fue toda una sorpresa. Parecía que aquello no iba a tener final, pero sí lo tuvo, y por supuesto, fue con “Thrash Attack”, un excelente himno que ojalá sea para siempre el tema que cierre sus conciertos. “Give’em War” forever.
Muy grandes. Enormes. Indiscutibles. Ya estamos soñando con volver a verles pronto. Se les admira y se les quiere. Señores, ayer vimos otra vez a Angelus Apatrida y lo siento por aquellos asturianos que se lo perdieron. Si pasan por vuestra ciudad no dejéis pasar la oportunidad. No os acordaréis del dinero pagado por la entrada. Es más, es probable es que incluso paséis por el kiosko del “merchan” a dejar los últimos euros.
Gracias a todos ellos por su simpatía. A Víctor por el sincero abrazo antes del concierto. A Guillermo por el saludo desde el escenario una vez más. A Jose por la cerveza cuando estaba al borde de la deshidratación por no perder el sitio. Y en esta ocasión sobre todo a David por el detallísimo de vestir la camiseta de Diario de un Metalhead.
Gracias a Soldier por traerlos y enhorabuena por haber cumplido todos los objetivos, el económico también. Llenazo.
Volverán.
Set-list:
1. You Are Next.
2. At The Gates Of Hell.
3. It´s Rising!.
4. Violent Dawn.
5. Of Men And Tyrants.
6. Never Forget.
7. Fuck You.
8. Blood On The Snow.
9. Clockwork.
10. Corruption.
11. Hereditary Genius.
12. Give’ em War.
13. One Side One War.
14. Fresh Pleasure.
15. Killer Instinct.
16. Be Quick Or Be Death.
17. In The Heart Of Nations.
18. Blast Off.
19. Free Your Soul.
20. Legally Brainwashed.
21. Versus The World.
22. Vomitive.
23. Thrash Attack.
