viernes, 29 de octubre de 2010

Crónica Tronar Fest. 23.10.2010


Caminando lento y seguro, el Tronar Fest llegó a su tercera edición. Un festival creado por músicos y donde se respira rock n’ roll al 100% en todos sus estilos. Una fecha marcada ya en el calendario del rockerío astur que parte de la idea de un grupo de jóvenes de Mieres, músicos casi todos ellos, que aburridos de la falta de locales y medios para poder ensayar y actuar, se agruparon ya hace tres años en una asociación sin ánimo de lucro con el nombre de Insonorizados.

Insonorizados nos llevó el pasado sábado 23 de Octubre al paraíso del rock en Mieres por un día. Allí se dieron cita gente de todos los pelajes y tribus del rock en torno a bandas de estilos bien diferentes, pero donde todos los asistentes pudieron disfrutar de lo lindo de la música y de unos precios en barra que deberían ser ejemplo para el resto de festivales que tienen lugar en territorio ibérico.

Llegamos bien temprano y nos encontramos un hermoso y acogedor recinto cubierto, con la barra muy cerca de las tablas, dentro del patio del Colegio Liceo. El escenario era amplio, lo que permitió disfrutar con algunas bandas de un mucho mejor espectáculo que si las hubiésemos visto en una sala.  El sonido, durante toda la noche, fue realmente bueno, algo digno de agradecer.


Viendo que todas las necesidades para pasarlo bien estaban cubiertas, no había más que ponerse a disfrutar de las bandas, que estas dieran la talla y que nosotros, el público, respondiéramos dándoles calor, y a fe que las casi cuatrocientas personas presentes se volcaron con las bandas, a excepción de la primera.

Y es que a No Jedi, banda asturiana surgida de los desaparecidos Jacky Trap le tocó “bailar con la más fea”. Salieron ante un aún escaso público, que en su mayoría estaba formado por metalheads que habían acudido bien temprano porque detrás tendría lugar uno de los momentos álgidos de la noche, la actuación de los thrashers Crysys. Su punk-rock pasó con más pena que gloria, aunque hay que decir que fue de más a menos. A pesar de que sobre todo el público masculino no perdía ojo de los movimientos de la guapa vocalista, Carmen, ni siquiera la versión del “Prayer of the Refugee” de los estadounidenses de Chicago Rage Againts logró espabilar demasiado a los presentes, aunque al final se llevasen una buena ovación de una audiencia que ya en número mayor empezaba a ser mucho más numerosa y dotaba al recinto de un muy buen aspecto.

Los siguientes en aparecer fueron los ya llamados por estas tierras “hijos secretos de Anthrax”, Crysys, la razón de nuestra visita al festival. Una jovencísima formación que va ganando fans por dondequiera que vayan. Ganadores del Wacken Metal Battle 2009, su gesta no se vio recompensada, y del disco que entonces debería haber visto la luz como premio jamás se supo.

Ahora van de plaza en plaza, para con las posibles ganancias, subvencionarse un trabajo discográfico que debería ver la luz en 2011 y que de no ser por la incompetencia o mala fe de alguien, que vete tú a saber, ya estaría en nuestras manos para disfrutar de temazos como los escuchados en Mieres.


Empezaron fuerte, atacando con los temas más conocidos por llevar tiempo compartidos en su myspace. “Internal Pollution” dio paso a “Spawn” antes de que July diera el buenas noches. “Holy Punishement” y “Ultra Thrash” fueron los dos siguientes pildorazos, descarga brutal que continuó con “Electric Possession”. Las cabezas de los de las primeras filas parecían que podían salir despedidas en cualquier momento. Gente desplazada desde todos los puntos de Asturias e incluso de León habían acudido única y exclusivamente para ver a los thrashers catalanes que parecen haber viajado en el tiempo, sacados de la Californiana “Bay Area” de los ochenta.


Como digo, muchos de los presentes ya sabían lo que iban a ver, pero para otros era la primera vez, y fueron estos los que realmente quedaron impresionados de la insultante juventud de la banda, con un Busi a la guitarra solista que con el paso de los minutos parecía afilar más sus cuerdas mientras Marc, el bajista, y Requena, el otro guitarrista, no paraban de dar botes y animar al público.

Tras esta batería de temas cañeros, se cambiaron los instrumentos como en su día hacían los mejores Anthrax de la historia y durante ese intercambio procedieron a hacer un medley de versiones que se vio coronado con el Antisocial de los Trust en su versión más thrash. Cerraron con “Dead by the Fistful of Violence” con una sonora ovación que llegaba incluso a los camareros de las barras o los mismísimos técnicos de sonido. Triunfaron de lo lindo y ello se vio reflejado luego en la venta de camisetas, firma de autógrafos, etc.


Set-list Crysys:
1- Intro
2- Internal Pollution
3- Spawn
4- Holy Punishment
5- Ultra Thrash
6- Electric Possession
7- Medley (Riff Raff/Hit the Lights/ Antisocial)
8- Dead by the Fistful of Violence


No lo tuvieron fácil luego los locales Gruesome Stuff Relish. Su corrosivo Grindcore no llegó a encajar bien en la mayoría de la audiencia y solo un puñado de fieles estuvieron con ellos en todo momento. Visualmente, al ser un trío lo tienen difícil, y sus brutales himnos como “Psycho Slasher” o “Eaten Alive” no despertaron demasiado interés. El dicho de que nadie es profeta en su tierra les vino a ellos al dedillo. Una banda que ya ha girado por medio mundo y con una trayectoria de varios álbumes detrás, editados hasta en los Estados Unidos no logró triunfar del todo en su ciudad. Una lástima.

Tras la descarga atronadora de los mierenses, llegaba la dosis de rock añejo de Positiva. Los bilbainos venían con ganas de agradar, pero aunque su actuación fue fantástica, la atención del auditorio fue de más a menos, y yo creo que en algunos casos incluso llegó a aburrir un poco, probablemente porque eran muy pocos los presentes que conociesen su obra en profundidad y solo los verdaderos fans de la banda estuvieron con ellos de principio a fin. Definitivamente no era el momento ideal para su rock con raíces.

Llegó luego la sorpresa de la noche, y cuando digo sorpresa, seguro me quedo corto, porque más que una sorpresa, la actuación de los belgas The Experimental Tropic Blues Band fue algo surrealista. Aparecieron sin bajista y al primer tema uno de sus amplificadores pasó a mejor vida, cosas del “vintage”. El caso es que sufrieron un largo parón, lo cual vio reducido su tiempo de actuación a poco más de un cuarto de hora, tiempo que algunos aprovecharon para cenar. Luego dieron paso a estupideces varias como ponerse el micro en los calzoncillos para acabar uno de ellos saltando al público con su armónica. En fin, no sabría como calificarlo, si como concierto o como performance.

Menos mal que luego vinieron ‘77 a poner orden en el festival. A la primera canción ya levantaron aquello a base de esa música 100% AC/DC que tanto nos gusta. Sus melodías no dieron descanso a la parroquia e incluso para mayor gozo de los más metaleros, Busi, guitarrista de Crysys les acompañó en la versión del “TNT” de los australianos. Si nunca has visto a ‘77 no te los pierdas la próxima vez que pasen por tu ciudad, recogen la esencia AC/DC y están a la altura de Airbourne. Presentaron sus temas del 21st Century Rock con gran acierto, verlos sobre el escenario es un auténtico espectáculo sobre todo al señor LG, que en ningún momento para de un lado para otro caldeando el ambiente. Un brillante fin de fiesta que luego se vio coronado con un concurso de “air guitar”, aunque a eso ya no nos quedamos.

En definitiva, una gran noche de rock y metal, cuyo único pero fuese quizás el poco acertado orden de actuación de las bandas. Aplaudimos la iniciativa de los Insonorizados y desde aquí les mostramos todo nuestro apoyo para que continúen adelante con actos como este “joda a quién joda”, como diría el bueno de Oscar de Lujuria.

Haciendo click en las imágenes se pueden ver a mayor tamaño.

Fotos: Sergio Blanco y Felipe SM, excepto la del escenario, robada a Constan de su facebook.
Texto: Larry Runner


© Larry Runner 2011


La crónica se publicó en la web de Rafa Basa. Se puede ver pinchando aquí.

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