miércoles, 8 de diciembre de 2010

ANNIHILATOR: Annihilator (2010 - Earache) Canadá.


Decimosexto album de la banda y para mí un album genial. Tengo que decir que el anterior, METAL, no fue demasiado de mi agrado, jamás llegué a pillarle el punto al disco, aunque fuera un gran disco.

Sin embargo, este nuevo disco, titulado ANNIHILATOR, con el nombre de la banda, sí que me ha enganchado. Empecé escuchando algunos temas via myspace y como me gustaron tanto, inmediatamente lo compré a través de la tienda on-line de Earache, que por cierto, funciona de maravilla. 

Fue barato, muy barato. Tan solo quince euros que el disco bien los vale. Pero mucho más barato si tenemos en cuenta que me compré la edición especial via pre-sale, y que viene presentado en una preciosa caja con algunos regalos guapos para la colección de memorabilia.

Lo primero que me llamó la atención cuando recibí el disco fu la pegatina exterior con la leyenda “66 solos on this record”. No me he parado a contar los solos que Jeff Waters ejecuta magistralmente durante los diez cortes del disco. No se si serán de verdad 66, seguro que no nos miente, pero una cosa sí queda clara, es un disco plagado de guitarras, de estupendos riffs y de estupendos solos. De sonido crudo y de guitarras contundentes, aunque también impregnado en ocasiones de pasajes muy melódicos que lo hacen variado sin perder la esencia del sonido que Annihilator lleva mostrándonos durante las últimas tres décadas.

Eso sí, que nadie piense que por tener 66 solos el disco se va a hacer pesado. Todo lo contrario, no me digas como lo ha hecho, pero te la clava, y te mete todos esos solos sin que te hayas enterado, y que conste que para nada es un disco a lo Yngwie Malmsteen, afortunadamente.

Abre el album THE TREND, el tema más largo del disco, con siete minutazos plagados de solos. Un tema que al principio puede desconcertar pues la primera parte de la canción es extremadamente melódica. Antes de empezar a cantar ya se producen los primeros punteos, así que no es de extrañar lo de los 66 solos. 

Luego llega lo mejor del disco. COWARD, AMBUSH y BETRAYED (nada que ver con el tema moña de Kiss del mismo título) son thrash metal del de verdad. Muy veloces, speedicas a tope. Ojo con ponértelas en el coche, cuando te des cuenta estarás entrando en una curva más rápido de lo que debieras. Sobre todo AMBUSH me encanta. Me traslada a los ochenta cuando cabeceaba brutalmente con Forbidden, Death Angel, Metallica y tantos otros.


25 SECONDS es pura rabia. Tema dedicado al inmigrante polaco asesinado brutalmente por la policía canadiense en el aeropuerto de Vancouver “por un malentendido”. La música y la letra reflejan la rabia que merece el tema. Contundencia a tope. Engancha, no me quiero imaginar la que se puede liar con este tema en un concierto.


NOWHERE TO GO es también un temazo, lento y con guitarras muy pesadas y contundentes. También con su parte melódica. THE OTHER SIDE es más del estilo de los temas anteriores, thrash old school lo mismo que DEATH IN YOUR EYES, aunque esta más larga, con más solos de guitarra. PAYBACK, la penúltima es la que menos me gusta, acaba con una serie de solos que parece no va a tener fin.

Cierra el disco ROMEO DELIGHT, aquí viene la anécdota. La primera vez que escuché el cd, fue en el coche, y al llegar a ese último tema me chocó enormemente y vine comiéndome el tarro hasta casa. La canción me sonaba, pero a saber Dios porqué me sonaba. Pensé para mí que podía ser alguna de las canciones que había escuchado por internet antes de comprar el disco, pero algo no me encajaba,  no me sonaba a Annihilator. Pensé para mí, “¡coño! ¡vaya gritos! como se está pasando, parece el puñetero David Lee Roth”. Llegué a casa, teclee el título en el google y ¡bingo! la canción es de Van Halen. Reconozco que nunca fuí muy fan de Van Halen, y ni tan siguiera tengo el Women and Children First de donde sacaron la canción, de ahí no haberme dado cuenta antes. En su día fuí más fan de David Lee Roth en solitario que de los propios Van Halen, de los que me entusiasmaron siempre los temas típicos, pero jamás tuve ni una triste camiseta o parche.

En definitiva un gran album. Con un JEFF WATERS mejor que nunca, sobrado de ideas y que se encarga de todos los intrumentos de cuerda del disco, es decir, guitarras y bajo. La labor de DAVE PADDEN a la voz es realmente espectacular, con unas estupendas melodías vocales difíciles de encajar en la a veces compleja música de los temas. RYAN AHOFF a la batería completa la banda.

Si quieres caña, si quieres guitarras de verdad, si quieres actitud, quizás este pueda ser un disco hecho para tí.

Probablemente esté en mi top 10 al final de este año.





© Larry 2010 



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